— Escuchen todos, tengo muy malas noticias — me dirigí al resto mientras me iba acercando a la fogata —. Perdí todo lo mío.
— No me mires a mí, yo no he tomado nada — dijo Toph indiferente.
— Me refiero a mi fuego control, se ha ido — Katara comenzó a reír fuerte después de mi declaración. En el fondo eso me había molestado, ya que esto no era una broma ni pretendía serlo, pero podía entender el porqué se comportaba así conmigo.
— Lo siento, sólo me río de la ironía. ¿Sabes lo agradable que hubiera sido que perdieras tu fuego control hace un tiempo?
— No lo he perdido, sólo está más débil por alguna razón.
— Tal vez no seas tan bueno como crees que eres.
— Auch — dijo la maestra tierra.
— Seguro que es porque me cambié de bando — el comentario había calado en mis huesos y esa forma de responder había salido sin siquiera pensarlo.
— Eso es ridículo — admitió Katara.
— No lo sé, tal vez no lo sea — agregó Aang —, quizás tu fuego control proviene de la ira. Y no tienes la suficiente rabia para alimentarlo como antes — su razonamiento no sonaba tan descabellado en realidad.
— Así que sólo tenemos que hacer enojar a Zuko , eso es fácil — Sokka sonaba determinado a hacerme enfurecer, tanto así que comenzó a molestarme con tal de hacer que mi fuego control se hiciera presente de nuevo, aunque lo único que había provocado era que yo me enojara aún más por la situación.
— Muy bien, ya basta — lo detuve —. Miren, aunque tengan razón, ya no quiero contar con el odio y la rabia, tiene que haber otra forma.
— Tendrás que aprender a sacar tu fuego control de una fuente diferente. Yo sugiero la fuente original — añadió Toph.
— ¿Y cómo tendría que hacerlo? ¿Saltando a un gran volcán? — bromeó Sokka.
— No, Zuko debe regresar al origen del fuego control sea cual sea.
— Pues... ¿sería saltando a un gran volcán? — susurró Sokka.
— No lo sé, en la tierra control el origen está en los topos tejones. Para ellos, los maestros tierra originales no se trataban de peleas, era su forma de interactuar con el mundo.
— Es increíble Toph — admiró Aang —. Yo aprendí de los monjes pero los maestros aire originales eran bisontes del cielo. Tal vez tú puedas darme una lección alguna vez, amigo — dijo dirigiéndose a Appa.
— Nuestros maestros fuego originales eran dragones, están extintos — admití con tristeza.
— ¿Qué quieres decir? — interrumpió Aang — Roku tenía un dragón y había muchos dragones cuando yo era niño.
— ¿Pero hoy donde puedo encontrar uno? — dije molesto.
— Bueno, tranquilo, lo siento — se desanimo el menor.
— Pero tal vez haya otra forma. Los primero que aprendieron de los dragones fueron los antiguos guerreros del sol.
— ¿Guerreros del sol? — me preguntó curioso —. Que yo sepa no habían cuando yo era niño.
— No, murieron hace miles de años, pero su civilización no estaba muy lejos de este lugar. Tal vez podemos aprender algo visitando sus ruinas.
— Es como me decían los monjes, a veces las sombras del pasado pueden sentirse en el presente.
— ¿Y qué? ¿Vas a tomar un poco de energía de guerrero del sol sólo parándote donde ellos solían hacerlo hace miles de años? — Sokka no parecía tan convencido de nuestro plan.
— Algo así, tengo que volver a hacer fuego control, o tendrás que encontrar otro nuevo maestro — dirigiendome al Avatar.Llegada la noche, Sokka aprovechó la situación para interrumpirme antes de ir a mi habitación. Habíamos acordado todos que Aang y yo iríamos al templo de los guerreros del sol pa
ra poder entender un poco más sobre el fuego control y para recuperar mis habilidades perdidas. Sokka tocó mi espalda y eso me hizo girar.— ¿Pasa algo? — dije sorprendido por su presencia
— Oye, esta es la primera vez que saldrás fuera del grupo e irás con Aang. Te juro que si algo malo le pasa...
— Nada malo pasará, en verdad — aseguré —. Podrías incluso venir con nosotros si tanto te preocupa.
— No lo digo por eso, pero mi deber como amigo del Avatar es pensar en su bienestar, y no eres de confianza aún. Sólo queria advertirte sobre los peligros de cualquier mala decisión que tomes.
— Lo tendré en cuenta. Quédate tranquilo — le tomé de uno de sus hombros a modo de complicidad, y aunque Sokka no parecía convencido aún, tomó mi mano por encima y le dió un apreton antes de alejarla de su hombro....
A la mañana siguiente Aang y yo subimos al lomo del bisonte volador y le indique el camino hacia el templo de los guerreros del sol. Aún me sentía como un inútil mientras íbamos volando, pero al menos ese sentimiento tal vez podría disiparse cuando encontrara mi nueva fuente de energía para el fuego control. Mi descontrol aumentó al darme cuenta que ese templo era más lejos de lo que había imaginado.
— Llevamos horas volando — dije con molestia —. No sé porqué, pero pensé que esto sería mucho más rápido — Appa pareció quejarse de mi impaciencia.
— Appa tiene razón. En el grupo siempre comenzamos las misiones con más optimismo. No te preocupes, ¡te acostumbrarás!Me acosté sobre el bisonte esperando que el menor tuviera razón y que el viaje acabara pronto. Necesitaba sentirme fuerte nuevamente.
Cuando Appa empezó a descender, Aang y yo observamos la isla con atención y nos sorprendimos de lo grande y maravillosa que lucía. Era una civilización antigua, y cada rincón del lugar guardaban cierto misticismo que no lograba comprender por completo. Bajamos del bisonte en cuanto tocamos tierra y esto me dió unos segundos de completa paz e interés.
— Aunque todo esto es muy antiguo, siento algo tremendamente familiar — ambos caminamos por la isla, buscando una señal de dónde estaba el templo original —. Diría que los templos de los sabios del fuego descendieron de esto.
— Bien, aprendimos algo de arquitectura, espero que aprendamos algo de furgo control también. El pasado puede ser un gran maestro-Las palabras del menor se vieron opacadas repentinamente por una trampa que él activo al momento de caminar cerca de ella. Se abrió una compuerta donde cientos de filosas púas yacían en el suelo. Si no fuese por su rápida reacción tal vez habría caído sobre ellos y se habría hecho daño, pero su aire control lo regresó a una zona donde la trampa ya no parecía una amenaza.
— ¡Zuko! Creo que el pasado intenta matarme — dijo asustado.
— No puedo creerlo — al fin me detuve a inspeccionar la trampa —, esta trampa debe tener siglos de antigüedad y aún funciona.
— Seguramente hay muchas más. Quizás significa que debemos irnos.Di unos pasos hacia atrás y, en una carrera por el muro que nos seguia todo el camino, llegué al otro lado de la trampa hasta donde estaba el avatar. De repente sonreí sintiéndome más animado por nuestra nueva misión.
— ¿Que hay del optimismo del que hablabas? — sonreí —. Además la gente no hace trampas a menos que tenga algo más valioso que proteger.
Ambos observamos un templo triangular que se asomaba en el horizonte. Nos empezaba a quedar claro que ahí era a donde debíamos de llegar, así que seguimos nuestro camino para así cumplir la misión principal: aprender el verdadero fuego control.
ESTÁS LEYENDO
Como una chispa | Zukka
FanficVengo de una nación que es más grande que cualquier otra, donde nos enseñan a destruir a quienes no siguen al rey Ozai; sin embargo, nunca me enseñaron qué hacer cuando el fuego en mi corazón crece a medida que me enamoro de alguien, es como una chi...