el destino

capitulo 15

_¡es...tan grande!
_¡oh diosa!

Es lo único que ella dice con la voz agitada pero no puedo concentrarme en eso solo estoy fijo en como ella cabalga, moviendo sus caderas como loca, satisfaciendo esa sed que ella tiene, la agarro de la cintura y la penetro fuerte y firme, lo que la hace gemir tan fuerte.

_¡no te detengas!
_¡Hazme tuya! -dice entre gemidos

Terminamos llegando al climax todo el semen termino saliendo y llenando por completo la pequeña vagina de gala, saco mi pene y ella simplemente se recostó encima de mi al poco tiempo se quedo completamente dormida, y yo de lo agotado que estaba hize lo mismo, luego poco a poco voy abriendo los ojos gala todavía sigue recostado sobre mi pecho, la levanto y la llevo hacia el baño para que tome una ducha.

Está totalmente cansada así que labo su cuerpo de una manera delicada, la saco de la tina, envuelvo su cuerpo con una toalla, la seco y le coloco la ropa, luego vuelvo al baño, me doy una ducha Salgo de la tina, me visto, y luego agarro la ropa, las bragas de gala que estan tiradas en el piso de la habitación, sábanas sucias, y bajo me voy al cuarto de lavado, y pongo todo en el lavarropas.

luego voy a la cocina y preparo el almuerzo me preocupa que gala no este comiendo como se debe debido a su celo, ni siquiera desayuno bien mi princesa, cocino un filete de carne y hago pure de papas, cuando termine mi estomago rugio, olvide que yo tampoco estaba comiendo bien, me siento y almuerzo cuando termino labo lo que ensucie luego caliento la comida de gala y subo.

Está tan dormida, en sus ojos se está empezando a notar un poco sus ojeras, pero sigue siendo hermosa quiero tocarla pero es suficiente mi dulce cielo esta sufriendo por su celo.

_gala despierta

_mm.. no quiero..

_tienes que comer algo -digo cortando la carne

Ella se levanta y me obedece, se sienta en la cama y aún sigue con los ojos cerrados, luego abre su linda boca para que la alimente, es tan tierna, recuerdo que cuando ella se enfermaba también hacía lo mismo cuando la abuela Maika estaba ocupada, yo me encargaba de cuidar a gala, come y da unos cuantos bocados para luego darme la espalda y volver a dormir.

Me llevo el plato sucio, lo labo, y luego vuelvo al cuarto de lavado, saco la ropa del lavarropas, y salgo afuera, las pongo a secar, cuando termine vuelvo adentro y vuelvo con gala.

Se ve tan tierna durmiendo tranquilamente que me gusta verla dormida y me pasaría horas viendo como duerme, cada expresion que hace o cada accion suya me parece muy lindo y tierno, me acerco y me acuesto a su lado mientras admiro su belleza me quede dormido.

Ya es hora que me levanté por qué juro que puedo sentir como si mi pene estuviera dentro de algo, que raro, abro los ojos y veo a gala desnuda y con mi pene dentro de su linda vagina, claro ahora recuerdo ya pasaron cuatro días desde que gala entro en celo y desde entonces me siento como si me estuviera domesticando, cada que se despierta me quiere cazar y no tengo mas opcion que darle lo que pide.

Levanto su pierna, y retiro mi pene de su vagina, su aroma ya no es tan intenso como antes asi que hoy ya paro su celo, me levanto de la cama, me dirijo al baño, y me meto a la tina, estaba tan intensa ayer que fue algo agotador pero divertido me relajo unos minutos más hasta que decido salir.

Cuando salgo encuentro a gala aun durmiendo, esa pequeña y linda espalda llena de lunares, ¡me gusta!, ella empieza a moverse despacio en la cama y eso me saca de mi pensamientos luego ella Me mira con esos ojos azules que me hipnotizan, adoro mirar lo bella que es.

_buenos días -dice con la cara roja

_buenos días mi amor

_voy al baño..

Se levanta de la cama y camina así a mí, veo como se acerca y deposita un pequeño beso en mis labios, me quedé sorprendido por unos minutos pero el golpe de la puerta al cerrarse me saca de mi pensamiento, decido bajar y preparar el desayuno.

Preparo un café con leche y bastante azúcar, y saco de la heladera un postre, a ella le encanta tomar cafe mientras come un postre, y para mí preparo unos sándwich la verdad es que estoy tan hambriento que lo que desayuna gala no me va a llenar, luego escucho unos pasos bajar por la escalera y luego la veo entrar a la cocina con un short, una remera de tirantes, de celeste pastel, se acerca y se sienta en una silla y yo le acerco el desayuno.