𝗥𝗲𝗻𝘁 𝗔 𝗚𝗶𝗿𝗹𝗳𝗿𝗶𝗲𝗻𝗱 𝖩𝖤𝖭𝖫𝖨𝖲𝖠

˗ ˏˋ 𝟷𝟼 ˎˊ ˗

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Partió por decir lo que debió haber dicho hacía mucho tiempo atrás.

-Lo siento.

Lisa frunció el ceño, genuinamente confundida.

-¿Sientes qué? ¿El besarme la primera vez o el besarme la segunda vez? Oh, ya sé-dijo con una sonrisa radiante e irónica-. Lamentas ser una reverenda idiota que ataca bocas sin consentimiento.

Jennie resopló, rodando los ojos. ¿Qué había esperado? Por supuesto que pedir disculpas sería un trabajo complicado, sobre todo considerando que era Lisa. Se sentó sobre la cama, en una de las esquinas, e inhaló profundo.

-Lo siento... por lo que te hice cuando íbamos en la escuela- continuó sería. Sus ojos se enfocaron en Lisa, quien tenía la expresión más perpleja del mundo-. Hice muchas cosas de las que no me siento orgullosa.

Hubo una pausa-probablemente Lisa procesando la situación- antes de que la castaña abriera su linda y besable boca para hablar.

-¿Estás disculpándote por lo que me hiciste?-susurró. Parecía perdida y, cuando se hizo un poco para atrás, Jennie supo que estaba desconfiando de sus palabras. No podía juzgarla. Para ella también sería difícil creerlo si estuviese en sus zapatos. Siendo una imbécil antes y después, no ayudaba en su credibilidad, menos a ser alguien en quien podías confiar.

Su voz salió suave.-Sí.

Lisa tembló.

-No creí que...-Se cruzó de brazos-. Esto es... Sé que te exigí que me pidieras perdón, pero no pensé que en realidad lo harías.

-Había tratado de hacerlo. Cuando fui a visitarte en la pizzería-confesó-. Pero ya ves, eso salió muy mal. Y, honestamente, no tenía las agallas para decírtelo.

Hubo unos segundos en los que guardaron silencio. Lisa se relamió los labios.

-Vaya... Siendo tan correcta y pidiendo disculpas con honestidad... -Silbó-. Esas aguas termales realmente te fundieron el cerebro, gatita.

Jennie no pudo evitar reír. -Boba, hablo en serio. Fui la mayor hetero-imbécil de la galaxia, en la secundaria y cuando nos reencontramos también. Te... traté como la mierda, te grité, te amenacé...

-Robaste la virginidad de mis labios-añadió Lisa.

La coreana suspiró. La verdad de eso no me arrepiento.

-Mi punto es que fui una verdadera idiota que merece una buena patada en el culo. Lamento lo que te hice. Sé que no hay forma de volver al pasado y enmendar las cosas-dijo culpable-. Si pudiera lo haría... No merecías eso...

No merecías ser odiada por amar.

No merecías sufrir como sufrió ella.

-Por favor, Lalisa, ¿podrías perdonarme?-rogó. Y por un instante, en el rostro de la contraria pudo atisbar la sonrisa de su hermana. Una punzada golpeó en su pecho-. Seré mejor... Te lo juro.

La tailandesa la miró dubitativa. Jennie sabía que sus palabras jamás llegarían a los oídos de la única chica que amó, jamás tuvo la oportunidad de decírselo y se arrepentía hasta aquel día. No quería que más tarde se arrepintiera de no haber arreglado las cosas con Lisa.

"La vida se acaba tan rápido. Somos efímeros en un universo eterno. Ama, perdona y pide perdón a aquellos que heriste en el pasado. No dejes que tus errores te hundan al final."