🔥¿How many times...

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Vegas jadea sabe que las uñas de Pete no solo están dejando marca si no también le están abriendo heridas en la espalda.

—Pete estás tan apretado— Vegas se mueve lento quiere disfrutarlo.

—No"!, ah ah— Pete lloriquea, siente como el ardor sube por su cuerpo, junto con unas extrañas sensaciones, no odia el sentimiento por completo pero no puede pensar con claridad.

—Mierda esto está demasiado bueno— Vegas se introduce un poco más.

—Basta duele"!— Pete se contrae de dolor.

Vegas no planea detenerse, quiere seguir entrando y saliendo a placer.

Pete siente su estómago lleno, es una sensación abrumadora.

El hijo de la segunda familia tenía una verga grande.

—Pet— Vegas suelta una de las pinzas y comienza a chupar el pezón enrojecido.

—Ah ah— Pete vuelve a sentir un extraño placer, le duele el culo pero las sensaciones que siente cada vez que su pequeño pezón es succionado lo hacen viajar a otra parte.

Vegas suelta el pequeño botón y continúa con el otro liberandolo de la pinza.

Ahora mientras succiona el segundo las penetraciones retoman un ritmo armónico.

—No, espere"!, ah duele ah ah— Pete no sabe si jadear o quejarse su cerebro realmente está recibiendo tantas señales, tanto de peligro como de placer.

—Mierda, mierda— Vegas le muerde el cuello y jadea sin soltar la carne.

Pete se siente como caperucita roja siendo devorada por el lobo.

Vegas saca por completo su verga al tiempo que descubre los ojos de Pete.

Ambos se miran y una chispa entre ellos renace con fuerza, los ojos rojos y llorosos de Pete están calentando de sobremanera a Vegas, quien ahora es un completo animal sadixo sexual.

Vegas se recuesta por completo encima de Pete y lo besa a lo bastardo sus lenguas hacen sonidos caóticos por toda la habitación.

Pete se siente asfixiado y jodido no sabe por qué no puede apartar ese cuerpo tan caliente y desastroso.

Vegas saca un dildo de su cajón.

Pete se pregunta cuántas más mierdas tendrá ahí.

Vegas enciende en la cara de Pete el juguete mientras lo introduce en su área pequeña.

—Ah ah ah— la vibración saca de balance a Pete el juegete no están grande como Vegas así que no duele.

Vegasete y saca el jueguete viendo la zona enrojecida, no le importa si hay sangre o no solo se deleita con aquel lugar y un pensamiento se queda ahí en su mente.

Pete no sabe cómo pero puede leer por completo la mente de Vegas.

—Vegas no"!— Pete se intenta apartar haciendo enojar a Vegas quien con una habilidad impresionante lo pone en cuatro.

—Tu no eres quien da las ordenes— Vegas le da una nalgada con fuerza dejando la zona marcada.

—Vegas haré otra cosa pero por favor no"!— Pete ahora tiembla quiere volver a sentir placer pero eso no será posible.

Vegas se introduce con todo y el jugete abriendo más la zona.

—Mierda Pete, tu maldito agujero cachondo, me hace enojar, pensar que puedes recibir a dos hombres me molesta— Vegas está totalmente esquisofrenico pensando en que Pete pueda estar con alguien más.

—Vegas para...tu, tú eres el único y el primero— Pete lloriquea siente que en cualquier momento puede dejar de respirar, le falta el aire y su corazón está sobre acelerado.

—Hazme creer en tus palabras, dilo otra vez Pete— Vegas comienza a mover con más entusiasmo las caderas.

—Ah Vegas, ah ah, tu ah"!— Pete no lo soporta más llega al orgasmo y todo se vuelve obscuro.

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