𝗘𝗹 𝗦𝗲ñ𝗼𝗿 𝗗𝗲𝗹 𝗙𝘂𝗲𝗴𝗼 (Zuko & Tú)

Libro Tierra (土)⛰️Capitulo 04 ㅡ Zuko Solitario

Narra Zuko

Desde que decidí separarme de mi tío, nada ha sido fácil, ya no tenía comida, ni agua, el cansancio, la sed y el hambre estaban empezando a pasarme factura, vi a un hombre asando carne, quería ir y robarla pero al darme cuenta de que su esposa estaba embarazada decidí dejarlos y seguir mi camino, me detuve en un pequeño pueblo, cuando veo a unos niños tirarle huevos a unos hombres, esos mismos se acercaron a mí preguntándome si sabía quién tiró el huevo por lo que mi respuesta fue un "no" a todo, ellos me quitan los sacos de alimentos que compré y después aparece el niño quien me había metido en este problema desde un principio.

Él decide llevarme a su casa como agradecimiento por no delatarlo, llegamos a su casa, salieron sus padres a darme la bienvenida, él les contó una parte distorsionada de la historia pero no la negué, me invitaron a comer pero debía de seguir, la madre me invitó a ayudar a su esposo, no les conté nada de mi identidad ni de mi pasado aunque Lee era un niño muy curioso, su padre lo regañó y él decidió callar por unos segundos hasta que preguntó por mi cicatriz, causando que me golpeara el dedo con el martillo que usaba para arreglar el techo, nuevamente Lee fue regañado levemente por su padre y sus palabras me hacen pensar en cuando era un niño.

Por la noche el niño Lee había ido a tomar mis espadas creyéndome dormido, cuando salió decido seguirlo y lo veo jugando con las espadas en un campo de girasoles, me acerco decidido a mostrarle como se usan correctamente y explicándole para después volver entregárselo.

A la mañana siguiente, al despedirme de la familia, los soldados aparecen en la casa para avisarle a la familia que su hijo mayor había sido capturado y se burlaron, me puse frente a ellos cuando quisieron atacar por querer defender a su hijo y estos retrocedieron, le dejé a Lee la daga que anteriormente mi tío me había regalado cuando joven con la inscripción de "nunca te rindas" y me aleje de su casa.

Estaba descansando cerca de un pequeño riachuelo recordando el pasado y todo por lo que pasé junto a mi madre, mi hermana quien siempre me mentía por cualquier cosa para asustarme:

ㅡAzula siempre miente...ㅡ

De pronto llega la madre de Lee quien me pedía ayuda desesperada, al parecer su hijo había sido secuestrado por los soldados y Lee los amenazó con la daga que le había dado, no dude en ir para salvarlo. Cuando llego, todos se ponen en guardia, no iba a darme para atrás, sabrían esta tarde con quien se interponían en la lucha.

ㅡDejen ir al niño... ㅡ bajo de mi caballo y me acerco.

ㅡ¿Quién te crees que eres? Nadie nos dice que hacer.ㅡ se burla el líder.

ㅡNo importa quién soy pero yo sé quiénes son ustedes, son bravucones abusando de su poder...ㅡ Digo mientras expongo sus artimañas en sus caras.

ㅡ¿Van a dejar que este extraño nos insulte así?ㅡ pregunta como una orden para que me ataquen y me preparo.

Empieza la lucha contra los soldados, me deshago de ellos uno por uno, mientras las personas miran, el último era un maestro tierra y me estaba rebasando en fuerza con sus golpes contundentes, caí al suelo y recordé de pronto las palabras que mi madre me había dicho: "nunca olvides quien eres", revelando así mi fuego control y logrando derrotar al soldado:

ㅡMi nombre es Zuko, hijo de Ursa y del Señor del Fuego Ozai, príncipe de la Nación del Fuego y heredero del trono.ㅡ

Después de revelarles mi verdadera identidad, todos los integrantes del pueblo empezaron a rechazarme, incluso Lee y su madre me despreciaban por mi asociación con la Nación del Fuego, supongo que ese era mi destino ser repudiado por todos, abandoné el pueblo, debía seguir mi camino, solo.