Granjas Muskrat

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Hannibal no pudo hacer mucho después de que Will no lo dejara ir a la mansión Verger y Margot fuese llevada por su hermano a otro sitio, estaba un poco frustrado, su plan era permanecer lo más lejos de Will para no exponerlo a Mason, pero al parecer eso sería imposible

- Will, debo decir que hoy te ves más hermoso que de costumbre -

Hannibal rodó los ojos, lo peor era tener que escuchar a Matthew coqueteandole descaradamente a su Will, aunque a decir verdad, una parte de su plan necesitaba que Matthew estuviera en ese mismo lugar, así que con cuidado de no ser visto, se acercó sigilosamente hacia la recepción donde los maestros habían dejado sus mochilas y empezó a husmear entre ellas

【M. Brown】

Hannibal sonrió y abrió la mochila buscando algo que le sirviera en el futuro, encontró entonces una pequeña bolsa ziploc con productos personales, cepillo de dientes, peine, etc.

- ¿Hannibal? -

- Margot...me asustaste -

- ¿que haces? - pregunto acercándose lentamente mientras veía a los demás distraídos

- creo un seguro para el futuro, confía en mi - Dijo tomando la bolsa plástica y cerrando la mochila - ¿que paso con Mason? ¿Te hizo algo? -

Margot instintivamente se froto el brazo donde minutos antes su hermano la había jaloneado

- me pregunto porque había decidido venir contigo hasta ahora y no con él dos días antes, no le gusta que estemos juntos y me advirtió que si planeaba algo en su contra, él...-

- ¿él que?-

- él mismo me iba a dar de comer a sus cerdos, creo que sospecha de ambos -

- es más perspicaz de lo que pensé...pero nobte preocupes, todo saldrá bien -

- ¿tu crees? -

- si, solo debemos ajustar un poco el plan, no podré ir a la mansión Verger con Will a mi lado, así que dividiremos el trabajo, tú encárgate de ir a la mansión y buscar mi cuaderno, yo me encargaré de Mason -

- pero creí que lo haríamos juntos -

- no con Will y Alana tan cerca de nosotros, debemos ser discretos -

La chica lo pensó unos segundos y asintió dándole la razón

- esta bien, confío en ti...-

De pronto Alana se acercó a ellos interrumpiendo su charla

- chicos ¿están listos? El recorrido empieza en unos minutos -

Hannibal le dedico una mirada a Margot

- de hecho, consejera Bloom...creo que yo no iré-

- ¿que? ¿Por qué? ¿Te sientes mal? -

- tengo algunos cólicos...quisiera poder ir a recostarme ahora -

- ¿enserio? Que lastima, pero podríamos conseguir  una pastilla o algo -

- no, no se moleste, en estos casos solo me recuesto y me siento mejor, creo que iré a casa -

- ¿quieres que te acompañe? -

- no, iré yo sola, no me gustaría que se perdiera el recorrido -

- pero tu también te lo perderías-

- bueno, yo vivo aquí, así que se lo que van a ver...por favor, no se detenga por mi -

- esta bien, pero al terminar iré a visitarte y checar que estés mejor y eso no esta a discusión-

La balada del cordero negro Donde viven las historias. Descúbrelo ahora