Después de todo lo que sucedió ayer, deje que Edmund durmiera en mis piernas después de que tanto me rogara.Los dos quedamos dormidos y tuve un sueño un tanto peculiar y muy llamativo para mí, pues era yo golpeando a Lockhart como muggle y de vez en cuando lanzando hechizos imperdonables, hasta que sucedió lo peor que pude hacer en el sueño, con una peladora de papas empecé a cortar cada pedazo de piel de Lockhart mientras el pedia que para pero no lo hacia ya que recordaba el como rogaba que parara de hacerme tanto daño y dejara de ignorar mi sufrimiento como si no fuera obvio el dolor tan grande que sentía. Desperté al lanzarle el peor maleficio de todos los tiempos "Avada Kedavra".
Luego de eso no deje de pensar en la muerte de Lockhart y todo lo que le haría para que pagará lo que me hizo a mi y a mis hermanas.
- Blair, ¡Blair! - Grito Edmund llamando mi atención - ¿En que piensas, princesa?
- Ahm, en qué sería bueno que darán clases de canto.
- Si, tienes razón, podemos darle nuestra idea a Dumbledore y tal vez lo considere. ¿Vamos?
Asentí mientras el jalaba de mi brazo e íbamos a la oficina de Dumbledore.
- Flint, Black, ¿Que hacen por aquí? - Pregunto Dumbledore mientras se sentaba.
- Blair me estaba contando que sería bueno que hubieran clases de canto. - Dijo Edmund mientras se sentaba y me hacía sentarme a su lado, me solté de el y me senté sin su ayuda
- Sería muy bueno, eso podría hacer que haya más hechiceros que se dediquen a sacar buena música clásica. - Dijo Dumbledore pensando - ¿Quieren un caramelo de limón?
Yo negué mientras Edmund lo aceptaba.
- Bueno, considero que sería bueno que hubieran clases de música y el hecho de que sería entretenido y educativo. ¿Tienen algo más en mente?
Edmund nego al igual que yo, Dumbledore dijo que me daría una respuesta días más tarde mientras salíamos del despacho.
- Edmund, espero y no me digas a nadie que fui yo la de la idea, ¿Dónde no les guste?
- Lo prometo, Blair.
El junto sus manos con las mías, más manos de el empezaron a sudar exageradamente, el iba a quitar sus manos por vergüenza pero igual aguante la poca higiene que traía el sudor la no deje que quitará su mano.
- ¡Blair, te estaba buscando! ¿Dónde estaban? - Pregunto Pansy
- Estábamos donde Dumbledore. - Le tape la boca antes de que todos los que se encontraban en el pasillo escucharán, ¿Edmund jamás va a lograr cumplir una promesa?
Detesto cuando pasa esto, ahora Pansy me miraba interrogante.
- Edmund, hablaremos más rato, vete. - El se fue arrepentido
- Cuéntame el por qué estaban en la oficina de Dumbledore. - Dijo Pansy sin entender
- Bien, pero esperes y no le cuentes a nadie. - Dije y ella asentía así que empecé a contarle todo lo que había pasado en la oficina - Y por eso estábamos en la oficina y no quiero que nadie se entere.
- El secreto está guardado. - Cerro su boca como un cierre e hizo como si tirará una llave, rei por el acto
- ¿Dónde esta Daphne y por qué me estabas buscando?
- Es que Daphne y yo no dimos de cuenta que Draco no me prestara atención a mi y que Theodore no le prestara atención a Daphne...
- Se que me vas a decir algo más, suéltalo.