Capitulo 22: Yo llegué primero.

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Impactada

Holaaaa, ya estoy mejor de mi mano, por si se preguntaban y gracias por sus felicitaciones, las aprecio demasiado, chulaaas 💖💖💞

disfrútenlo y no se enojeeeen JAJAJAJAJA😙🏳️‍🌈💞

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Pov's Andy:

Abrí mis ojos lentamente, como siempre estaba de mal humor, hoy no sería diferente. O tal vez si. Mi humor mejoró al recordar que estoy en mi isla, con mis personas favoritas , con el amor de mi vida.

Me levanté de la cómoda cama de Miko y saqué ropa limpia de mi maleta para después ir al baño a darme un baño rápido y salir a desayunar. No me demoré más de 10 minutos.

Salí de la habitación y sonreí al escuchar esa voz que aún me volvía loca.

—Un poquito na' más.—Su voz sonaba divertida, no estaba sola. Corrí a la sala esperando a encontrarme con Riri o Mauro. Pero no fue así.

Mi sonrisa desapareció al ver a una chica pelinegra sentada en el sofá con Victoria haciéndole cariños al lado. Acariciaba la mejilla de la chica mientras sonreía y chocaban sus narices como si fueran un par de idiotas enamoradas.

Carraspeé evitando que se besaran en frente de mí. Ambas se giraron a verme , pero no dejaron de sonreír, eso hizo que me hirviera la sangre aún más.

—Porfin despiertas, el desayuno está listo hace años.—Victoria se levantó del sofá riéndose y caminó hacia mí, esperé uno de sus abrazos mañaneros, pero se pasó de largo yendo a la cocina.—Ven, amor.—Dijo antes de entrar, mirando hacia el sofá donde estaba la que supongo era Carolina.

Nombre de mierda.

Quise decir algo, pero se habían ido. Las seguí a la cocina y vi solo un plato en la mesa, me senté y esperé a que Victoria me sirviera, como solía hacer.

—¿Quieres café?.—Me preguntó la pelinegra, miré la cafetera que tenía en sus manos y asentí lentamente. La odio. ¿Porque toma las cosas y ofrece como si fuera su casa? Yo vengo aquí desde que tengo memoria y no se ni donde están los platos.—Aquí hay azúcar, por si quieres.

Me dio una taza de color blanca y la tomé algo brusca. Mi mal humor había vuelto.

—¿Quieres pan tostado? Carolina sabe hacer uno delicioso.—Habló Victoria mientras movía algo sobre la estufa que no lograba ver desde aquí.

—Estoy bien, gracias.—Respondí seca. Lo que menos quería ahora era algo hecho por la estupida esta.

—¡Vicky! ¡Eso es azúcar, no sal!.—La chica le quitó el bote de azúcar y comenzó a reír. Una risa bastante molesta a decir verdad.

Contigo {Youngmiko}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora