Stay With Me | AU QSMP | Guapoduo

Capítulo 46: Feliz navidad.

°

° Cellbit °

Estaba realmente atareado, hoy era navidad y mi marido había desaparecido nada más salir el sol, no me aviso a donde iba ni cuanto iba a tardar, solo dejo una nota en su almohada que decía: "no me esperes a desayunar", ya eran casi las dos de la tarde y él aun no volvía y yo tenía que asegurarme de que el penthouse se viera increíble porque mi guapito había hecho una larga lista de todas las características que debía tener nuestro enorme apartamento ya que él seguía tradiciones bastante claras aunque hizo unos cambios a su gusto.

Ahora mismo me encontraba colgando muérdagos sobre cada puerta que hubiera en nuestro hogar asegurándome que las decoraciones que habíamos colocado ayer estuvieran correctamente puestas, una vez estoy acomodando el ultimo muérdago en la puerta de entrada escucho unas llaves tintinear entrando en la cerradura.

- ¡Guapito espera! – rápidamente le advierto para que no me tire al abrir la puerta.

- ¿Cellbo? ¿Qué haces amor? – pregunta confundido al otro lado de la puerta.

- Colgando los muérdagos, dame unos segundos cariño – le pido apresurándome y una vez termino me bajo de la pequeña escalera para hacerla a un lado y recibir a mi marido con un casto beso, el ríe sobre mis labios.

- Que rica bienvenida – dice siguiendo mis labios una vez nos separamos, pero no le permito besarme de nuevo.

- Lo siento guapito, pero debemos darnos prisa la cena empieza a las ocho y aún no está lista la casa, ayúdame cariño – me alejo para guardar la escalerita.

- Claro, me pondré manos a la obra con lo que vamos a cenar – responde tranquilo, solo puedo suspirar ante su nulo nerviosismo.

El resto de la tarde nos quedamos haciendo la cena lo cual era bastante tardado y asfixiante, era la primera navidad que festejaríamos así, los dos años pasados había sido muy tranquilo y normal, pero esta vez mi esposo estaba siguiendo las tradiciones de su familia por alguna razón y eso implicaba que hubiera comida a rebosar por todos lados, Roier había horneado galletas de jengibre, de canela y de mantequilla, agradecía que teníamos doble horno porque si no nunca terminaríamos, yo ayudaba más con la limpieza y pasándole o picando cosas porque no me sabia sus recetas y tampoco quiso decirme.

En la nevera estaba cuajando una gelatina de queso con chocolate, había ponche y chocolate caliente con bombones, el pavo estaba a punto de salir, también el lomo con salsa de cereza y chiles, además de que había hecho ensaladilla rusa, tapas de bacalao a la vizcaína, salmón al ajo y naranja, puré de papá con camote y verduras a la mantequilla, también había encargado una enorme tarta de tres leches y frutos rojos la cual no tardaba en llegar.

Ya eran las ocho de la noche y nosotros aun no nos habíamos duchado, pero todo ya estaba listo, agradecía que nadie fuera puntual en estas cosas porque si no estaría enloqueciendo, ayudo a mi marido a sacar el pavo del horno para que repose, después subimos corriendo las escaleras para poder ducharnos rápidamente, era la primera vez que compartíamos ducha y no nos tocábamos entre nosotros.

Estaba arreglándome la camisa cuando escuchamos que llaman a la puerta principal, mi esposo pasa como un rayo a mi lado abotonando su pantalón, suspiro realmente cansado esperaba que no volviéramos a seguir tradiciones y que si lo hacíamos contratáramos a un chef, porque no pensaba volver a hacer esta locura de nuevo, salgo de nuestra habitación y veo que los que llegaron son Jaiden con otra chica rubia, no le doy mucha importancia porque la gente comienza a llegar unos tras otros.