12. Llamado

720 111 18
                                    

6 años atrás

Jimin recibió un beso en la cuenca de su cuello, ahí donde una linda marca adornaba su piel bronceada. Se estremeció con solo el tibio roce de aquellos labios que podría reconocer en cualquier parte de su cuerpo.

-Hmm-Suspiró ante la sensación y cerró los ojos para disfrutarlo por unos segundos más, a pesar de todo el horror que le rodeaba. Sobre todo la muerte de los lobos de la tribu, aunque era inevitable-El lazo es lo único que me tiene cuerdo.

-Yo también los extrañé.

Y lo primero que vió cuando abrió los ojos, fue la imagen del Alfa besando la frente de su cachorro, quién con dulces balbuceos, le respondió a su padre. Con sólo un año, el bebé casi que articulaba palabras, algo de lo que Jimin estaba bastante orgulloso.

-Baba, rona.

Y el bebé alzó la manito que sostenía una hilera de florecillas del campo, con pocos pétalos y medio destruidas.

-¿Para mi Jiwon?-Namjoon dijo en una voz cómicamente aguda, lo que le hizo reír. Observó a su Alfa alzar al pequeño cachorro entre sus fuertes brazos y besarle las regordetas mejillas una y otra vez, y Jimin sólo pudo sentirse feliz por un ratito a pesar de que lo estaba retirando del nidito que cuidaba con recelo.

Pero estaba bien, mientras que sea su Alfa.

-Anda bebé, dáselo a baba-alentó Jimin a su cachorro, sentado con las piernas cruzadas mientras los observaba desde abajo-Muéstrale lo que hiciste.

-Rona, ona-Repitió Jiwon

-Corona-Corrigió Jimin con una sonrisa suave. Se incorporó del suelo de la cabaña, para acercarse a sus dos amores, dejándose caer en el pecho de su Alfa quien lo recibió con necesidad-Hice una para ti, de las flores que sobraron del entierro, me daba pena tirarlas y creo que puedo darles un mejor uso.

-No entiendo cómo eres tan grácil con las manos.

-Puedo enseñarte, sólo tienes que tener paciencia.

-La tengo, pero no creo que tu la tengas conmigo al ver como destruyo cada pétalo-Namjoon le acarició el cabello, meciendo en un dulce vaivén a él y su bebé, quién por las feromonas de ambos se había adormecido en un leve dormitar. Cerrando sus ojitos poco a poco-Se que voy a fracasar, amor.

-Todavía ni lo intentas-Dijo enterrando la frente debajo de su mentón-Te hará olvidar, créeme que funciona.

-Aprende a luchar cuerpo a cuerpo y dejaré que me enseñes a entretejer flores.

Jimin se despegó del pecho del Alfa para mirarlo con los ojos entrecerrados. No era que no quisiese aprender a luchar, sólo que durante el embarazo y sobre todo ahora que tenía un cachorro lo único que le decía su omega era, defiéndete, y jamás ataca, a menos que sea necesario. Era casi inservible para esta guerra, por más de que le era difícil de aceptar. En lo único que podía apoyar era en estrategia, y proteger lo que era suyo.

-No necesito enfrentarme al enemigo tan de cerca Namjoon-Le dijo consternado-No sirvo para dañar a los demás, prefiero construir cosas con mis manos que usarlas para el combate sucio.

-¿Te vas a rendir en algo que todavia no te he enseñado?-Los ojos de su pareja de volvieron ambar, y Jimin supo que su Alfa estaba en la superficie. Le asustó por un momento, pues la reacción le indicó que algo andaba mal-¿Qué pasa si cruzan el río? Si, si no estoy aquí cuando lo hagan.

Jimin se quedó plantado en su sitio cuando Namjoon llevó al cachorro dormido de vuelta al nido, acomodando su cuerpo y cubriéndolo con una manta.

Su mente quedando en blanco.

Al otro lado • Minimoni OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora