Capítulo 31

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La Luna, con el corazón roto y la mirada perdida, acunaba a Badrudeen en sus brazos. La imagen de su amado aun presente,llenándolo de la ira y el dolor que lo consumían, pero la responsabilidad de proteger a su hijo era más fuerte que cualquier sentimiento.

 La idea de perder a Badrudeen era insoportable, pero la posibilidad de que creciera bajo la sombra de la tiranía y la violencia lo llenaba de terror.

Los rebeldes a pesar de su derrota en la batalla anterior aún persistentes en su objetivo inicial, amenazaron con volver a atacar,eliminar a Badrudeen y tomar el control. Las amenazas que habían hecho sobre volver a atacar eran constantes, y la Luna Falsa sabía que no podía arriesgar la vida de su hijo.

El llanto de su pequeño hijo lo sacó de sus pensamientos,lo miro y se acercó al pequeño Badrudeen. Con su voz tenue y melodiosa, le susurró.

-No llores, pequeño.....Se que lo extrañas.....pero él te protege aunque no esté con nosotros..... Él te ama y siempre estará contigo.

Badrudeen, con sus ojos grandes y llenos de lágrimas, no podía comprender las palabras de su padre, pero su voz suave y reconfortante le brindaba un poco de paz en medio de la tormenta emocional que lo rodeaba.

La Luna lo observaba con desolación en su rostro, sabía que era necesario tomar una decisión drástica. No podía permitir poner en riesgo la vida de su pequeño. Debía encontrar una manera de protegerlo, incluso si eso significaba alejarlo de el.

Con el corazón lleno de dolor, la Luna Falsa decidió acudir al Sol y a la Diosa, tenía que debatir con ellos la decisión que le rompería el alma, pero que era la única opción para asegurar la supervivencia de su hijo.

-.Mis hermanos..... necesito su ayuda......mi mundo está en ruinas y mi hijo está en peligro....Los rebeldes no se rendirán y solo traerán más sufrimiento,debo encontrar una manera de proteger a Badrudeen.

Ambos celestiales lo escucharon con atención.

-.Hermano, comprendo tu dolor y tu preocupación... hay que tomar las decisiones correctas...¿Has considerado algunas opciones?

-.Lo he pensado mucho.... He buscado todas las opciones posibles, pero en este mundo no hay un lugar seguro para Badrudeen.....Solo hay violencia y odio....Debo enviarlo a un lugar donde pueda crecer en paz y seguridad...

-.De que estas hablando?.- mencionó la diosa con suma preocupación

-.Si mantener a mi hijo a salvo.......implica dejarlo ir......te pido mi hermana....te pido qu busques un mundo donde el pueda estar a salvo...

-.Q-que?...no...no no podemos dejarlo solo...

El sol se acercó a la Luna Falsa y lo tomó del hombro.

-.Esa es una decisión muy difícil, no podemos hacer eso.... no puedes renunciar a tu hijo

-.Haría cualquier cosa para que Badrudeen esté a salvo, incluso si eso significa...... que nunca más lo vuelva a ver.

El Sol y la Diosa se miraron en silencio, con el peso de la decisión de la Luna Falsa sobre sus hombros. Sabían que era una decisión que le rompería el corazón, pero también sabían que tal vez era la única manera de asegurar el futuro de Badrudeen.

-.Porfavor....se los ruego......solo quiero salvar a mi hijo....

-....Está bien.........Te ayudaremos a encontrar un mundo seguro para el pequeño.

-...Me asegurare que este a salvo.-dijo la diosa con lágrimas invadiendo sus ojos.-

La Luna Falsa asintió con la cabeza, una mezcla de gratitud y dolor llenando su corazón. Finalmente, había encontrado una manera de proteger a su hijo, pero a un precio que nunca creyó que tendría que pagar.

La maldición de la luna falsaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora