La maldición de la luna falsa

Capítulo 17

Habían pasado varios meses desde la impactante noticia del embarazo de Alan. El pequeño ser que crecía en su interior era una fuente constante de alegría y emoción para la pareja. Aunque la gestación de un ser mágico era un proceso poco conocido, todo parecía marchar con normalidad.La relacion entre los integrantes del templo era mas estable,después de aquel dia las cosas tuvieron que llegar a un acuerdo.

Alan, con su característico optimismo, disfrutaba cada etapa de su embarazo. Su vientre se había redondeado ligeramente, y su cuerpo intentaba adaptarse con naturalidad a los cambios. Sin embargo, una pequeña inquietud comenzó a rondar su mente: aún no había sentido ningún movimiento del bebé.Con aquella duda decido acudir con su amado.

Se encontraban en el jardín del templo,reposando entre las hermosas flores y la calma y serenidad del lugar.

-Luna mía,he estado pensando....ya ha pasado un tiempo,y aun no siento movimientos de nuestro hijo.

-La luna miró con serenidad a su querido amante.-No te preocupes...puede que aún no esté lo suficientemente listo para moverse....no se mucho sobre esto,pero entiendo que cada ser es diferente...

-....puede que sí....espero que este todo bien...

-...Bueno.....tal vez podamos hablar con la Diosa y el Sol. Supongo que pueden tener más información sobre esto.

-Alan, con un tono de esperanza en su voz, respondió.-¡Es una gran idea! Estoy seguro de que ellos podrán ayudarnos!.

Ambos se dirigieron al templo,buscaron a las divinidades,hasta que encontraron al sol.

-La luna se dirigió a su compañero con seriedad.-....Mi....hermano.....te pido que me ayudes,hay una duda que nos atormenta...y necesitamos sus consejos.

-..Mi ayuda?.....ja,quien lo diria,despues de tanto necesitas de mi..

-Porfavor.....esto es encerio..puedes ayudar si o no?

-Bien,bien,..¿Qué es lo que quieren?

-Queremos saber si todo está bien con nuestro hijo

-Se supone que debería de moverse.....pero aun no he sentido nada-Dijo alan con preocupación-

-No hay movimiento?,que raro.....tal vez no sea normal..-El sol hizo una pausa para pensar y dijo-.Será mejor que veamos a mi hermana, creo que debemos ver si todo está en orden.

Alan miró a su amado con preocupación,su temor había aumentado, se dirigieron hacia una habitación, y al llegar el sol los detuvo.

-Será mejor que alan no entre,aqui estara expuesto a la alta magia y por precaución es mejor que evite lo más posible ese contacto,hablare con ella para saber qué hacer.

El sol se adentró en la habitación, dejando a Alan y Luna en un mar de incertidumbre. La espera se sentía eterna, cada minuto se traducía en un tormento de dudas y temores. Alan no podía evitar pensar en lo peor, mientras que Luna, con la fuerza que la caracterizaba, intentaba mantener la calma y la esperanza.

Finalmente, tras una agonizante espera, el sol y la diosa salieron de la habitación. Sus semblantes serios no presagiaban nada bueno. La luna se apresuró a preguntar, su voz apenas un susurro: 

-¿Qué ocurre?.

-Debemos averiguar qué pasa con el bebé,ha estas alturas debería haber aunque sea un mínimo movimiento.

Una punzada azotó el corazón de alan,su temor se estaba haciendo real.

-Y como podremos averiguarlo.

-la diosa miró a su compañero antes de pronunciar palabra-.....se debe de exponer a la magia.....tal vez el problema puede ser mas grande de lo que piensan y necesitamos ver al bebé...

-Pero eso le puede traer problemas,ustedes dijeron que no se debe exponer a la magia-

-Estamos concientes de eso,pero si no se interviene...puede que esté en peligro.

-Hagan lo que sea mejor-Hablo alan,con la voz casi quebrada-Por Favor...hagan lo que tengan que hacer...pero mi bebe tiene que estar bien.

Los tres se miraron con angustia,y tomaron la decisión que se debía de hacer algo,aun si implica usar la magia.....

En una habitación apartada del templo, Alan se encontraba dentro de un círculo trazado en el suelo. La luna con un movimiento de sus manos encendio aquel circulo.La diosa, con su mirada penetrante, recitaba un antiguo encantamiento mientras que el sol canalizaba energía  hacia el círculo. La tensión en la habitación era palpable, la esperanza se mezclaba con el miedo a lo desconocido.

De repente, el círculo comenzó a brillar con una intensidad cegadora. Alan, con los ojos cerrados y la frente sudada, sentía una extraña energía recorriendo su cuerpo. Un calor abrasador lo envolvía mientras imágenes fugaces danzaban en su mente.

En medio del torbellino de sensaciones, Alan pudo distinguir una pequeña figura. Era su hijo, un ser diminuto con rasgos aún indefinidos, que luchaba por abrirse paso entre la oscuridad.

La diosa y el sol, concentrados en su tarea, no se percataron del cambio en la expresión de Alan. Sus ojos se abrieron de par en par, llenos de una mezcla de terror y fascinación. Lo que estaba presenciando desafiaba toda lógica, toda comprensión del mundo que creían conocer.

Los presentes se quedaron perplejos,aquel ser tan diminuto y frágil luchaba con todo su ser para poder sobrevivir.

-...Mierda.....ese es el maldito...problema..-.Rompió el silencio el sol.

- que es es...eso-Alan se encontraba en shock por lo que presenciaba.

-....Era..era otro bebé.-La diosa con contempló con severidad aquella escena.