Capítulo 19

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Emma.

El 25 de diciembre me estaba despertando a las 4:45 de la mañana para coger el primer tren hacia Madrid, donde me espera Álvaro. Mañana, día 26 comenzaba nuestro viaje a Nueva York. No quiero imaginarme cuánto tiempo lleva organizando estas vacaciones si las cogió para ir en Nochevieja, además, serían dos semanas llenas de aventuras en las que tambien visitaremos otros estados.

Estaban siendo unas Navidades maravillosas, me encantaba juntarme con mi familia, ver a mis abuelos a los que tanto aprecio, y cenar todos en una misma mesa.

Me tomaba mi café reglamentario de la mañana cuando vi asomarse un cuerpo pequeñito vestido de un pijama enterizo de dinosaurios, Marcos, mi primo, lloraba porque no quería que me fuera.

-Tata, no te vayas.

Yo hice un puchero y me acerqué a él, quedando de cuclillas, a su altura.

-Ven aquí cariño.- Le abracé, para mi era como el hermano pequeño que nunca tuve.- Marquitos solo serán dos semanitas, además, te traeré un regalo muy grande.- Hice hincapié en la palabra "muy".

-¿Me vas a traer a Spiderman?

-Cariño, ya te he dicho que Spiderman es muy dificil de encontrar, se esconde y no se deja ver, porque es un superhéroe y su identidad es secreta.- Le miraba con ternura mientras dejaba un mechón de su pelo desordenado por el descanso detrás de su oreja.

-Porfa, dime que al menos lo intentarás.

-Lo intentaré, pero solo si te vas a dormir.

-Vale Tata, ten mucho cuidado y más con ese hombre con el que vas.

-¿Álvaro? Si te cayó muy bien en mi cumple.

Susurraba mientras acompañaba a mi primo a su habitación con una mano en su espalda.

-Es muy feo, no me gustan sus gorras y su ralla en la ceja, y tiene un acento muy raro.

-Tu si que eres raro. Venga a dormir, campeón. Y tranquilo, le diré a Álvaro que Marquitos le ha pedido que me cuide.

-Pero no le digas "Marquitos", Tata, que sino no se lo toma en serio.

-Entonces Marcos, le diré que Marcos le pide que me cuide.

-Gracias, pásatelo bien Tata.

-Adiós cariño, descansa.

Me despedí con un beso en la frente y, tras cerrar la puerta, corrí a la habitación a por mis cosas para salir hacia la estación de tren.

Amaba los trenes, son cómodos y tienes tiempo de hacer tantas cosas... Leer, maquillarte, ver unas cuantas películas, o incluso una serie. Yo soy de las que se preparan en los trenes para no perder tiempo en casa y el día antes se cocina su tupper para eso que llaman brunch, yo lo llamo o "despertarse tarde y hacerse lo q sea" o "despertarse tan temprano que necesitas desayunar dos veces".

Cuando quedaba una hora para llegar a Madrid, decidí llamar a Imantado.

Un tono.

Dos tonos.

Tres tonos.

Cuatr...

-¿Si?- Su voz adormecida despertó algo en mi.

-Eh, emm... ¿Te he despertado?- ¿Eso es una Emma nerviosa?

Sí, lo es.

-Si preciosa, me has despertado.

-Lo siento Álvaro. Estoy a una hora de Atocha, era solo para avisarte.

-¿¡Una hora!? ¡Mierda Emma, me he quedado dormido!- Se escuchaba agitado, se había levantado de golpe.

𝔇𝔢𝔰𝔢𝔞𝔪𝔢 (Reborn/Imantado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora