El ejército de Lord

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—Su plan en verdad es muy simple, casi me burlo la primera vez que lo escuché. —dijo Matama sacando un montón de soldaditos de la caja de juguetes de Korisu.

Matama y Nemo se habían unido al grupo de Utena después de ser derrotadas, y tras una "purificación" de sus pecados por parte de Utena se unieron oficialmente al grupo. Ahora estaban todos en la Base Temporal Natch 2, o sea, la casa de Kiwi.

Era una casa bastante grande y lujosa, aunque por suerte no había nadie en casa, así que podían usar la sala perfectamente para planear sus movimientos.

—Básicamente va a usar a las chicas mágicas como fuente de energía para su gran estrella, que es una batería gigante de magia. Luego va a usar toda esa magia para potenciar su poder de crear demonios y va a mandar a miles de demonios por ahí a atormentar a la gente, y para que deje de hacerlo tendrán que elegirla a ella como la nueva líder mundial. —dijo Matama representando la escena con los soldaditos y dejando perplejas a las chicas.

—Nadie ha sabido nada de Tres Magia, ¿verdad? —preguntó Utena pensativa.

—No hay rastro de ellas, es como si hubieran desaparecido, pero tampoco están secuestradas en la base Natch. —dijo Nemo recostada en un sofá.

—Tal vez podríamos atacar en... —Baiser no terminó de contar su plan porque todos sintieron una gran fluctuación mágica.

—Trans Magia. —gritaron todas al unísono antes de que se abriera un portal del cual salió Venalita. —Por aquí, chicas, está atacando el centro de la ciudad.

Al cruzar el portal, las cinco estaban sobre un edificio, un montón de demonios con forma de slime con máscaras estaban por todos lados, absorbían a las personas dentro de ellos y se los llevaban por un portal inmenso en el cielo.

La ciudad estaba en pedazos, algún que otro edificio derrumbado, fuego por todos lados y autos chocados en las calles, algunos civiles trataban de defenderse y otros se habían encerrado en sus casa.

Una pequeña sonrisa apareció en el rostro de Utena, pero a su vez sus cejas mostraron un enojo total. —Muy bien, chicas, ya que Tres Magia no aparece, por hoy seamos las heroínas del cuento. —dijo antes de arrojarse del edificio, golpeando a un par de cuervos con su vara.

Baiser y sus cuervos, los cuales ahora eran dos grandes parvadas, atacaban a los demonios de slime, mientras Baiser creaba más monstruos para salvar a los civiles.

Leopard estaba usando todo su arsenal para hacer retroceder a los demonios de slime. —¡Te ves genial hoy, Leopard-chan! —¡Tú también te ves muy linda, Baiser-chan! —se gritaron mutuamente en algún momento.

—Dejen de coquetear. —dijo Leaberblume, quien controlaba a varios civiles, dirigiéndolos hacia un gran edificio que apareció en medio de una plaza.

Neoalice asintió desde encima de su peluche de gato, el cual llevaba a más civiles hacia el mismo edificio. El edificio en cuestión era el hospital que usaba Korisu para curar a las chicas cuando se herían.

Ambas pasaron al mismo tiempo por enfrente del edificio, donde estaba Loco Música. Un grito resonó detrás de ellas, y vieron como Loco había destruido a otro par de demonios.

La escena se repitió varias veces, cuando necesitaban moverse el edificio simplemente se hacía pequeño y aparecía en otro lugar después. Pronto habían salvado a gran parte de los civiles y las chicas comenzaban a cansarse.

—Chicas, no va a funcionar, hasta que no derroten a Lord los demonios seguirán regenerándose. —apareció Venalita desde otro portal.

—¿No pudiste avisarnos antes? —gritó Leopard disparando a más demonios.

Un estruendo se escuchó de repente. Del portal gigante en el cielo había caído Sister Giganta, con el tamaño de un edificio. Del mismo portal empezaron a salir cientos de demonios voladores, de pieles rojas y fornidos, con colas, alas y cuernos.

—Tenemos que sacar a los civiles de aquí. —dijo Baiser cayendo frente al hospital. Leopard cayó a su lado. —Utena, tienes que derrotar a Lord, si no, no vamos a acabar nunca. —dijo parándose frente a ella mirando directamente a Sister Giganta que se acercaba lentamente.

—¿Segura que puedes con esto? —preguntó Baiser, un poco preocupada por su amiga. Leopard en ese momento volteó rápidamente y besó a Baiser. —Promete que cuando acabemos esto, iremos a un motel. —dijo cuando terminó el beso.

—Lo prometo. —dijo Baiser antes de empezar a volar hacia el portal en el cielo. —¡Ustedes, saquen a los civiles de aquí! —gritó Leopard a sus amigas.

—Maldita Lord, ya verás que acabaré contigo. Tres Magia, donde sea que estén, no se preocupen, yo me encargo está vez. —pensaba Utena mientras volaba a través del portal.

Mahou Shoujo ni akogarete /// My versionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora