Capítulo 6

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VALENTINA

—¡Es hijo de John Bennett, por Dios! Valentina, aléjate de él. —insistía mi madre.

—Pero que solo es un compañero de clase. —me justificaba.

—Nos da igual. Es hijo de un mal tratador. ¿O te tenemos que volver a recordar lo que sufrió tu tía? —me recordaba mi padre. Yo lo sabía pero es que Jake no tenía nada que ver con su padre.

—Con mis hermanos no os ponéis tan pesados.

—Pero tú eres una mujer. —habló mi madre.

—¿Y? —le pregunté incrédula. Odiaba que nos encasillaran así.

—Pues que los tipos como él se aprovechan de ella, mira a su padre. —seguía mi madre en su posición.

—¡Él no tiene nada que ver con su padre! Además que solo es un compañero de Universidad con el que me llevo bien. —me excusaba.

—Se acabó. No queremos volver a verte cerda de él. —me impuso mi padre con autoridad. Yo resoplé con rabia.

Entendía que quisieran protegerme pero no lo conocían. Él no era como su padre y ellos debían verlo..

En esos momentos prefería que mis padres fuesen los de Daniel y Teri, nunca despreciaron a Jake por ser hijo de quién era y dejaba a Jake juntarse con Daniel, incluso se había quedado en su casa a dormir incontables veces. Mis padres eran unos cabezotas pero yo no podía no obedecerlos. Nunca lo había hecho y no lo iba a hacer ahora.

Me di media vuelta y me digné a subir las escaleras hacia mi habitación pero mi padre me detuvo.

—¡Valentina! —volvió a llamarme y yo me giré intentando encontrar la calma para mirarlo. —La semana que viene nos vamos a Cancún de viaje durante un tiempo. Jake vendrá porque Lara y Tomás se lo han permitido al ir con Daniel pero por favor te pedimos que mantengas la distancia con él. Hay que tener mucho cuidado. —solté una risa sarcástica. Me parecía increíble lo que estaba escuchando.

Ahora sí. Sin decir nada más, subí hasta mi habitación y pegué un fuerte portazo.

Me quité los zapatos con brusquedad y me tiré en la cama. Suspiré frustrada.

Me daba rabia que me lo impusieran así. Pero no podía juzgarlos cuando yo hasta hace poco pensaba como ellos. Era algo complicado. Si tan solo supieran la historia de Jake.. De todo lo que sufrió cambiarían su visión de verlo.

De repente, mi móvil sonó con el sonido de notificación. Lo cogí de la cama en donde lo lancé anteriormente y lo miré aún tumbada boca arriba.

Un mensaje de un número que no tenía agregado.

¿Mañana irás a la fiesta del hijo de Joaquín, verdad?

No me acordaba de que al día siguiente era la fiesta de cumpleaños de mi primo pequeño. El hijo de Sandra y Joaquín. Cumplía dos años. Pero me confundió porque no sabía quién me hablaba. Me metí en la foto de perfil y había una imagen de un atardecer en la playa precioso. ¿Quién coño era?

Bajé su perfil para más información y vi que compartíamos dos grupos en WhatsApp. Observé su nombre, Jake Bennett.

Era verdad que nunca había hablado con él por texto. Era la primera vez que lo hacía. Me preguntaba si iría a la fiesta. Lo peor es que sí pero no podía hablar con él por el simple hecho de que les hice prometer a mi familia que no me acercaría a Jake así que no contesté.

Te pregunto porque si te veo. Tengo que darte algo. (FOTO)

Me envió la foto de mi colgante. El mismo que tenía con Jandi. El colgante que nos regaló mi tío Jin de pequeñas.

Con amor, Jake [EN FÍSICO: AMAZON]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora