¿Podrías repararme? | Tartaglia | Genshin Impact

Capítulo 22

Advertencia: este capítulo contiene material +18. Leer bajo su propia responsabilidad.

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Al llegar al malecón, todos los chicos de las distintas universidades se reunían en la playa y disfrutaban de algunos bocadillos alrededor de una fogata que habían organizado los profesores.

El grupo de amigos bajó del auto mirando el lugar.

-¡Hace tanto que no se celebraba una victoria así!- exclamó Areli emocionada.

-Ciertamente, pero ahora me apetece ir a la fogata, ¿Vamos?- preguntó Damian.

-Oh, yo paso. Tengo algo importante que hacer- dijo Childe cruzando los brazos.

-¿Eh? ¿Qué cosa importante?- lo miró Lucy curiosa.

-Quiero ir a una zona apartada que ví por aquí. Dicen que las estrellas se ven bien, ¿Quieres ir conmigo, Luchy?- le preguntó con una sonrisa enorme.

Ella lo miró un momento y después a Areli que asentía con los pulgares arriba.

-Me encantaría- le dijo sonriente.

-En ese caso, supongo que los veremos después,- dijo Damian.

-Si, cualquier cosa nos escriben- dijo Areli yendo junto al moreno.

Los chicos se despidieron con la mano y entonces Lucy miró a Childe.

-Entonces ¿A dónde querías ir?- preguntó muy curiosa.

-Es aquí cerca, solo que quizá debamos conducir un poco- dijo el Fatui regresando al asiento del copiloto.

-Deberás guiarme, ¿Ya lo habías visto antes?- preguntó la chica subiendo al auto y volviendo a conducir.

-Lo ví una vez en internet. Mira, es esa zona de ahí- le dijo el chico señalando el lugar antes de mirarla- Y deberías un día enseñarme a conducir, me gustaría ayudarte de vez en cuando,- le dijo sacando una risa de la chica.

-Lo haré, pero fuera de la ciudad para que no haya accidentes indeseados- dijo ella riendo por el puchero que le hizo Childe.

-¡Muy graciosa, Luchy! Seguro hasta termino siendo un piloto de carreras como esos de la fórmula 1,- dijo orgulloso.

-Hazlo. Seremos ricos, viviremos en un penthouse y júralo que mi madre estará orgullosa,- rieron juntos.

No pasó mucho cuando ella aparcó cerca de dónde le había indicado Childe. Bajaron del auto y se sorprendió cuando él le pidió las llaves de la cajuela. No sabía para qué las quería pero cuando estaba de pie junto a la trompa del coche, el chico apareció con una toalla, una bolsa de bombones de colores y con una sonrisa enorme.

-¿Estás lista, compañera?- preguntó.

Lucy abrió los ojos sorprendida y se acercó a ayudarle a cargar la toalla.

-¿Cuándo metiste todo eso?- preguntó- ¿Y cuál es tu plan de hoy?

-Es simple, moya lyubov... Veremos las estrellas y comeremos de estas cosas que son tan deliciosas,- dijo tomando su mano para dirigirla cerca de la orilla del mar.

-¡Aw! Hace tanto que no hacía eso... Aunque pensé que querrías ir a celebrar- dijo Lucy llegando al lugar donde lo ayudó a extender la toalla y lo veía tomar asiento.

-Bueno, celebrar contigo me gusta más,- dijo Childe sonriendo y extendiendo su mano hacia ella.

La sonrisa de Lucycreció y tomó su mano para sentarse a su lado.