- Como siempre, ella parece muy triste...
- Pero, es inútil, no importa cuantas veces trate de acercarme a preguntarle, ella nunca quiere hablar sobre el tema, y solo se limita a llamarlo por su nombre...
"Solo un poco más... aguanta un poco más, Shinji..."
- ¿Quién rayos es Shinji? No lo entiendo... ¡Estamos todos juntos! ¿No debería ser suficiente para ser feliz? Igneel, y yo siempre le hacemos compañía, no me gusta ver esos rostros tan tristes...
Aquel pequeño niño de cabello rosa se acercó a la mujer de belleza inconmensurable sentada melancólicamente en una roca, viendo un pequeño osito de peluche mal cosido en sus manos.
A su alrededor, no había más que grandes árboles que apenas dejaban entrar los escasos rayos del sol, los arbustos repletos de bayas dulces abundaban los suelos, y el extenso campo verdoso parecía no tener fin.
Entonces, con una sonrisa llena de pureza, el niño se acercó a ella, tomando su atención cuando la jaló de su largo vestido blanco.
- Nn... ¡¿Hasta cuándo tendrás esa mirada, Mio-san?! ¡Juguemos juntos! ¡Estoy seguro que así podrás divertirte! ¡Odio verte así de triste!
La mujer se le quedó viendo por unos segundos al niño, exponiendo una débil sonrisa en su rostro, mientras de forma amable, cálida y amorosa, acarició el cabello del niño a su lado, como una preocupada madre.
- Lo siento tanto... me gustaría jugar contigo un rato, pero no estoy de ánimo ahora pequeño...
El niño expuso un rostro frustrado, en su inocente mente, no podía entender la agonía que estaba sufriendo aquella triste mujer.
- Esto es tonto... no puedo comprenderlo... ¿Por qué siempre estás triste? ¡Igneel siempre dice que cuando estés triste, tienes que hablar del futuro para encontrar fuerzas!
La preciosa y misteriosa entidad al lado del joven de cabello rosa, rio débilmente, dirigiendo su mirada hacia el cielo.
- Sí, tienes razón... ¿Sabes? Yo espero poder reencontrarme con alguien que atesoro mucho... pero yo no soy como los humanos, tampoco como los magos, ni siquiera como los dragones... yo no tengo fuerzas para olvidar el pasado, no tengo esa clase de determinación... así que solo puedo esperar pacientemente a que mi deseo se cumpla...
- ¿Y ese deseo es encontrarte con esa persona especial? Creo que lo entiendo... pero se siente mal verte con ese rostro... ¡Ya sé! ¡Yo te ayudaré! Justo como lo hace Igneel conmigo, me aseguraré de quemar todas tus preocupaciones~.
El pequeño dio una sonrisa dentuda que tomó por sorpresa a esa existencia a su lado, emitiendo como pocas veces, una sonrisa cálida mientras volvía a acariciar su cabello con el cariño de una madre.
- Sí... sé que tú serás el que pueda ayudarme a cumplir mi deseo... ¿me ayudarás, pequeño dragón?
- ¡Sí! ¡Porque Mio-san también tiene que sonreír!
- Te prometo, que pase lo que pase... siempre estaré eternamente agradecida contigo, estoy encantada de haberte podido conocer, Natsu~.
-...- -...- -...- -...- -...- -...- -...- -...- -...-
Con un fuerte dolor de cabeza, el mago de Fairy Tail, "Salamander", Natsu Dragneel, comenzó a despertar de su aparente sueño.
Natsu: ¿Nn...? ¿Acabo de soñar con algo nostálgico...? Ahh... no me acuerdo... ¿Habrá sido con los desayunos de Shidou...? ¡¿Y por qué rayos me duele tanto la cabeza?!
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Natsu Dragneel en Date A Live
Fanfic"Espíritus" Chicas con poderes especiales que causan destrucción con sus apariciones, lo quieran o no, son tachadas como monstruos y perseguidas para su eliminación inmediata. Enviado desde un mundo donde la magia es usada día tras día por toda la p...
