Natsu Dragneel en Date A Live

Capítulo 153: Clímax final

En la soledad de las antiguas ruinas a las afueras del gran palacio de Stella, la confidente del rey, Sonya, se encontraba sosteniendo el báculo cuyo poder mágico era tan grande como para volver a simple cenizas una nación entera, el arma nacida del resentimiento y tristeza de los dragones, el <Dragon Cry>.

De pie en medio del altar, las palabras que aquel chico de cabello rosa y bufanda de escamas dijo cuando los ayudó a escapar, resonaron sin control en su confundida mente.

["Cuando lo sostuve en mis manos, sentí la furia, el dolor y el sufrimiento de los dragones"]

Aún así, incluso si quisiera hacerle caso y no usar el poder del <Dragon Cry>, ya no había vuelta atrás, no había otro camino, era la única llave que podría salvar al reino.

Renovando su determinación silenciosa, Sonya reafirmó su agarre y comenzó a liberar el poder del báculo en sus manos.

Sin embargo, al momento de liberar su poder, diferentes memorias fueron enviadas a su mente, sentimientos oscuros, dolorosos y tristes arremetieron en su corazón, todo lo que estaba sintiendo, era en realidad los sentimientos perdidos de los dragones del pasado. 

A la vez que las lágrimas caían por sus mejillas hacia el suelo sin control y sin voluntad, una voz masculina la llamó desde sus espaldas. 

Era la misma voz que siempre la llamaba desde la misma dirección, donde sus pasos no se podían escuchar y donde su figura era oculta por las sombras de las ruinas. 

Sonya: Rey Animus...

Animus: Vamos, dame el <Dragon Cry>. 

Sonya: No... ¡Esta fuerza sumerge a las personas en el infortunio, no puedo darle este báculo! 

La figura del rey se hundió en el silencio de las palabras firmes de Sonya, contorsionando su expresión con una rabia interna.

-Con Lucy-

Todos los barrotes que formaban las celdas del calabozo fueron convertidas en frágiles ramas por la mano del Ángel en manos de Natsumi, cayendo al suelo en ruidos secos y quebradizos, liberando a todas las prisioneras de la zona.  

Lucy: ¡Vamos, apresúrense, antes de que ese sujeto aparezca! 

- ¡M-Muchas gracias, en verdad!

- ¡Se los agradecemos mucho!

Riana: Gracias... en serio... 

Lucy y Natsumi sonrieron cálidamente al ver las lágrimas llenas de felicidad y alivio de las prisioneras que a toda velocidad escapaban por la salida hecha por Natsumi.

Sin embargo, sus acciones no pasaron desapercibidas. Zash bajó las escaleras al calabozo con un rostro hundido en la furia.

Zash: Ustedes... ¡¿Qué mierda hacen aquí?! ¡¿En dónde está el <Dragon Cry>?! 

Natsumi: ¡"Bruja Falsificadora"! ¡<Haniel>!

Natsumi alzó la escoba de su mano al cielo, sellando la salida en la pared que ella mismo creó en su llegada, impidiendo que Zash pudiera perseguir a las prisioneras que liberaron. 

Lucy: Vamos juntas... ¡Natsumi!

Natsumi: R-Realmente no tengo más opciones... moou, y yo que pensé que aquí al menos no tendría que luchar... 

Con un suspiro pesado, el cuerpo de Natsumi comenzó a brillar.

Su estatura creció hasta alcanzar el tamaño de una mujer adulta, las curvas de su cuerpo se hicieron más prominentes y su cuerpo era cubierto con su Vestido Astral.