Natsu Dragneel en Date A Live

Capítulo 56: Ángel Tobiichi

Unos minutos después de que la zona residencia se convirtiera en ruinas además de un gran porcentaje de Ciudad Tenguu. 

Después de llegar a una zona alta desierta, Origami finalmente redujo su velocidad.

Al echar un vistazo hacia atrás, parecía que nadie la perseguía. Después de levantar en silencio una de sus manos, Origami desmontó el Ángel <Metatron> que estaba fijo en su forma de ala y aterrizó en el suelo.

Origami frunció el ceño mientras veía a <Metatron> desaparecer en partículas de luz, hasta ahora, había usado un poder misterioso para ella, pero sabía usarlo como si lo hubiese usado desde siempre.

Origami: Este poder... esta armadura... yo soy un Espíritu...

Después de escupir esas palabras, Origami apretó los dientes para contener el vómito que subía gradualmente desde su estómago.

Pero en ese momento, había algo más importante en lo que pensar. 

Ese "algo" que le dio el poder.

Origami: Una entidad cubierta con un manto de estática... eso fue...

El poder para convertir a humanos en Espíritus. A pesar de que era una habilidad increíble, Origami había oído eso antes.

Era la misteriosa existencia que Natsu le mencionó a Origami antes... "Algo" convirtió a Itsuka Kotori, que era originalmente una humana, en un Espíritu.

Sí. "Otro Espíritu" apareció en la ciudad en llamas hace 5 años ese día.

Origami: Eso era... ¿"Phantom"?

No había ninguna garantía de que el "algo" que apareció ante Origami fuera el "Phantom" que le dio sus poderes a Itsuka Kotori hace cinco años. 

Pero... si ese "algo" era el Espíritu que apareció en Nankou hace cinco años...

Origami: ¿Eso fue... quién mató a mi padre y mi madre?

Entonces ese "algo" desconocido debía ser el objetivo de la venganza de Origami por sus padres.

En el momento que Origami notó esa posibilidad, ese "algo" ya había desaparecido, así que no pudo hacerle ninguna pregunta. Lo que Origami debía hacer ahora era buscar a ese "algo" para confirmar su propósito, su identidad, y también... dónde estuvo durante ese día hace cinco años.

Justo cuando pensó eso, el impulso de vomitar la atacó de nuevo y frunció el celo.

No fue solo porque se convirtió en un Espíritu. El hecho de que fue convertida en un Espíritu por la existencia que podría ser la asesina de sus padres se volvió una suciedad que envolvía su corazón.

Origami no sabía por qué le dieron sus poderes ni para que fin, sin embargo... había una cosa de la que estaba segura. Ella tenía ahora el poder para matar a los Espíritus.

El equipo oficial del AST. El arma de aniquilación <White Licorice>. La Unidad-CR personal <Mordred>. Origami ahora se encontraba en un reino que no pudo alcanzar a pesar de que utilizó todo tipo de equipos. 

Ahora que tenía poder, ahora que la existencia mágica apodada Salamander cayó en combate, las existencias que tanto la atormentaban, podrían caer también... Yatogami Tohka, Yoshino, Itsuka Kotori, Yamai Kaguya, Yamai Yuzuru, Izayoi Miku, Natsumi, e incluso también... Tokisaki Kurumi.

Origami abrió mucho los ojos de repente al pensar en ese último nombre.

Una cierta idea apareció en la mente de Origami.

Esa posibilidad. Fue solo un sueño que Origami imaginó por capricho. No había garantía de que pudiera suceder. Olvídense de eso, la posibilidad era muy baja.