Capítulo 21

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Al llegar a la empresa, sentí una energía renovadora. Sabía que cada día habría nuevos desafíos, y estaba decidida a enfrentarlos todos.

Después de pasar por seguridad y saludar a algunos compañeros, me dirigí a mi oficina. Apenas había tenido tiempo de dejar mi bolso cuando una notificación en mi computadora llamo mi atención. Era un mensaje de Park, convocándome a una reunión urgente en la sala de conferencias.

— Buen día T/N. Hoy comenzaremos con una reunión para discutir los próximos proyectos— dijo Park cuando llegué a la sala —. También queremos revisar las traducciones de las nuevas canciones para el álbum y asegurarnos que todo esté listo para la próxima gira.

Asentí y tomé asiento, observando como los demás miembros del equipo entraban. Entre ellos Yoongi, quien me lanzó una mirada evaluadora antes de tomar su lugar frente a mi. De verdad creo que este tipo tiene algo contra mi.

La reunión comenzó repasando el itinerario y tareas asignadas para cada uno de los presentes. Mientras hablaba, Yoongi me pasó discretamente una carpeta con las letras que necesitaban ser traducidas. Tomé la carpeta y comencé a revisarla, anotando algunas observaciones en mi cuaderno, podía notar las miradas de los chicos en mi. Levanté levemente mi cabeza y podía notar como J-hope me veía, a lo cual respondí con una leve sonrisa. 

Después de la reunión, me dirigí a la sala de ensayo para encontrarme nuevamente con los chicos. Todos estaban allí, practicando una nueva coreografía. Me acerqué a Yoongi, quien se encontraba afinando su guitarra.

— Necesito algunos detalles sobre las emociones que quieren trasmitir con estas letras. Quiero asegurarme de que las traducciones capturen la esencia. 

Yoongi asintió, su expresión neutral.

— Claro, podemos trabajar en eso. Quiero que las letras tengan el mismo impacto en cualquier idioma — respondió mirándome directamente a los ojos con mucha intensidad.

Pasamos la mañana trabajando codo a codo, discutiendo cada línea, asegurándonos que las traducciones fueran perfectas a la letra. Sin embargo, a pesar de la colaboración, notaba una tensión persistente entre nosotros. No se molestaba en suavizar sus críticas y comentarios, y aunque me esforzaba por mantenerme profesional y mantener la calma, cada palabra suya era un reto, e insoportable.

Durante una pausa, Tae se acercó con su habitual sonrisa juguetona.

— T/N, ¿que te parece nuestra coreografía hasta ahora? —preguntó, inclinándose un poco más cerca de lo necesario.

Le sonreí y respondí con sinceridad.

— Es increíble. Cada canción tiene profundidad y transmite emociones únicas. Es fascinante ver como las proyectan en sus pasos.

— No solo eres buena con los idiomas, también con las palabras — dijo Jungkook, uniéndose a la conversación con una risa.

— Estamos felices de tenerte aquí, T/N. Cualquier cos que necesites, no dudes en pedirla. Siempre podrás contar conmigo para una buena comida — dijo Jin con una sonrisa cálida.

Agradecí sus palabras y acepté la botella de agua que me ofreció. Sentía que poco a poco me podía integrar un poco más al equipo, eran amables y me hacían sentir bienvenida a pesar de sus coqueteos ocasionales. Durante otra pausa, mientras Yoongi seguía ocupado con su guitarra, Namjoon se acercó con una mirada curiosa.

— ¿Cómo te sientes trabajando con nosotros? — preguntó, con su tono más formal pero con un destello de interés personal.

— Llevo mucho tiempo trabajando con ustedes — contestó Suga.

— Le preguntaba a T/N — contestó, miré con desdén a Suga y contesté a la pregunta de Nam.

— Bastante afortunada, gracias.

Asintió, parecía satisfecho con mi respuesta, y volvió a su trabajo. Sentí un poco de alivio, pero también la presión de mantener ese nivel de profesionalismo. Al final del día, después de una intensa jornada de trabajo y colaboraciones, debía encontrarme con Suga en su estudio. Estaba ajustando algunos acordes mientras yo revisaba las últimas traducciones.

— Buen trabajo hoy — dijo, su tono más genuino de lo normal, aunque mantenía una pizca de su habitual frialdad.

— Gracias, estoy disfrutando mi podríamos decir, primer día. — respondí.

Rió ante mi respuesta, ¿se rió? ¿este chico puede expresar una sonrisa? ¿quién lo diría? Después de un tiempo, le di las gracias antes de salir del estudio. Tomé mis cosas y me dirigí al hotel. 

Llegué a mi habitación y me dejé caer en la cama, exhalando un suspiro de alivio y satisfacción. El día había sido intenso, pero increíblemente gratificante. Decidí seguir trabajando un poco más, así que encendí mi computadora y comencé a escuchar las canciones que los chicos estaban preparando para la gira. Mientras las melodías llenaban la habitación, no pude evitar dejarme llevar por el ritmo. Me levanté y comencé a bailar al ritmo de estas, permitiéndome sacar a relucir mi lado fan. Cantaba con entusiasmo, recordando los días en los que soñaba con ver a BTS en vivo, sin imaginar que algún día estaría trabajando con ellos.

Cada vez que una nueva canción comenzaba, me sumergía más en la música, sintiendo una mezcla de incredulidad y emoción. Poco a poco, caía en cuenta de que esto era real. Estaba del otro lado del mundo, trabajando para mi grupo favorito, con personas que alguna vez creí demasiado lejanas, en un trabajo que jamás se me habría ocurrido. Todo parecía tan surrealista. 

Cerré mis archivos y me recosté en la cama, sintiendo una paz interior. El cansancio del día empezaba a pasar factura, pero no quería que el momento terminara. Cerré los ojos, dejando que la música me acompañara. Justo antes de quedarme dormida, recibí un mensaje en mi teléfono. Era Jimin

"Buenas noches, disfruta las canciones."

Sonreí, apagué mi teléfono y me arropé. Mañana sería otro día en la oficina, esperaba que esta emoción nunca se desvaneciera.

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⏰ Última actualización: May 27 ⏰

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