Capítulo XIX: Oscuro bosque

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Su cabeza punza demasiado, trató de llevar una de sus manos a la zona, pero no podía moverla, o más bien no quería, su cuerpo dolía y su cerebro se negaba a moverse, aunque fuera con un acto tan sencillo como mover su brazo

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Su cabeza punza demasiado, trató de llevar una de sus manos a la zona, pero no podía moverla, o más bien no quería, su cuerpo dolía y su cerebro se negaba a moverse, aunque fuera con un acto tan sencillo como mover su brazo.

Abrió uno de sus ojos con lentitud, gruñendo quedito ante la luz que le llegaba directamente, era demasiada claridad, ¿desde cuándo eso pasaba? Volteo a su lado tratando de reconocer el sitio donde estaba, pero dicha tarea se canceló en cuanto su vista se topó con una imagen más interesante.

Christopher observó con asombro la figura sentada a pocos pasos de donde él se encontraba.

Se trataba de Minho.

Minho con un cachorro en brazos.

Su cachorro...

Observó embelesado la imagen que ocurría delante de él, como el gran enigma que siempre se veía imponente descansaba a su lado, tarareando una canción en voz baja para la pequeña criatura entre sus brazos, Christopher se preguntó porque solo cargaba a uno, cuando debía de tener dos cachorros, hasta que después observó una pequeña cuna al lado de la cama.

Sonrió un poco, sintiéndose cálido de admirar dicha escena con sus cachorros en brazos de su padre, tan calmados... sus cachorros, dos de ellos...

¡Sus cachorros estaban en la misma sala que él!

Cerró sus ojos con fuerza al momento que su cerebro pareció conectar ideas, todos los recuerdos de las últimas horas golpearon con fuerza su mente, aturdiendo. Si él estaba ahí, con vida, eso quería significar que los hombres de patriarca ya habían descubierto que estaba con vida y mierda, eso no debía suceder.

Sin desearlo, comenzó a llorar por aquello, podrían castigar a Sana, a Lía, ¡podrían hacerlo pagar con Changbin! No podía permitirlo, no, de ninguna forma, intentó impulsarse con sus brazos para levantarse, pero su cuerpo parecía negarse a responder, por lo que acabó cayendo de nueva forma contra la cama, haciendo suficiente ruido como para llamar la atención del enigma.

Minho volteo a su lado, sintiéndose aliviado de notar como Christopher por fin había despertado, sin embargo, su sonrisa se borró en cuanto pudo notar como el pánico cubría su cuerpo. Supo que debía hacer algo, por lo que dejó al pequeño cachorro que cargaba en brazos en la cuna junto a su hermano, para después acercarse al delta, que lo observaba con los ojos llorosos.

Se acercó a la cama, intentando tomar la mano del chico, pero este se apartó bruscamente, alejándose del tacto del mayor —Christopher, soy yo, Minho, estás a salvo conmigo

—N-no

—¿Por qué? —le cuestionó el mayor, tomando asiento en la camilla junto al chico —No podrán lastimarte ahora que estás conmigo

—N-no lo entiendes, ¡no puedes entenderlo! —exclamó Christopher, cubriendo sus oídos con terror.

Lo iban a castigar, él no puede marcharse, los hombres de patriarca están en todas partes, seguramente ya venían hacia acá, querrán lastimar a Minho, ¡a los cachorros! Todo por su maldita culpa, debió morir más rápido, impedir que esto sucediera

Limbo || minchanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora