En el mundo hay personas sin escrúpulos y desafortunadamente, Christopher ha conocido muchas de ellas a lo largo de su corta vida. Aún siendo un joven delta de diecisiete años, era bastante ingenuo para su edad. Creía que como en su natal Australia...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jeongin solo era capaz de escuchar el sonido del teclado al lado suyo, ya era horario de salida y los maestros no deberían continuar dentro de las instalaciones, pero como se había hecho demostrar, su mejor trabajador, y casualmente mejor amigo, continuaba aun corrigiendo los cuadros de notas de sus pequeños alumnos.
El alfa claro que intentó sobornar al otro con su retirada del establecimiento, pero justo como todo un omega dominante, Heeseung nada más le lanzó un gruñido bajo, dejando ver que no estaba dispuesto a marcharse sin concluir su trabajo.
—Se te van a quemar las pestañas de tanto ver esa computadora, ¿no crees que ya has hecho suficiente por hoy?
El omega negó, despegando su vista del aparato —Tú me dijiste que las evaluaciones deben de estar listas para el final de la semana, así que no puedes quejarte de que trabaje tanto, ¿siquiera cuándo un jefe se ha quejado de que sus empleados se autosobreexploten?
—Se ha quejado cuando ese empleado es un omega que casualmente es mi amigo, Hyunjin me matará cuando se entere de que trabajas tanto, peor todavía cuando apenas vamos a martes y ya casi has terminado todo el trabajo —reprendió el alfa, quitándole el bolígrafo de la mano al menor —¿O es que acaso tienes algo importante que te ocupará por las tardes?
—No, realmente no, sabes que me gusta trabajar, es todo —rio el chico, dejando de lado su trabajo —¿Cómo está Hyunjin? Ya son tres meses de embarazo, ¿no?
Jeongin asintió con una sonrisa, acomodándose de mejor forma en su silla —Sí, está muy pronto a entrar a los cuatro meses
—A veces me dan tantas ganas de embarazarme, se me hace tan lindo, no lo sé
—¿Y por qué no lo hablan con tu alfa? Estoy muy seguro que a Jake le gustará la idea
El omega negó, mordiendo un poco su labio —No quiero tener hijos, no si Lia no ha vuelto, es bobo, pero quiero a mi hermana aquí conmigo para dar ese gran paso
—Hee, ya han pasado tres años... ¿No crees que sería bueno que reanudes tu vida?
—No —dijo seguro el chico —Es mi hermanita, pueden pasar 10 años y continuaré esperándola, tengo esperanzas que un día me llame, pidiéndome ayuda para volver a casa
Jeongin asintió en comprensión, sabiendo que aquel era un tema sensible para Heeseung. Él estuvo ahí cuando todo sucedió, porque así como Minho ha estado toda la vida para Hyunjin, Heeseung ha estado toda la vida para Jeongin.
Fue hace tantos años atrás, recuerda como su mejor amigo lo llamó llorando, su hermana menor había tenido una fuerte rabieta, como siempre las tenía, la rebelde chica quería continuar con su vida de fiesta y descontrol, lejana a las normas que en la familia Choi existían. Heeseung tenía 26 años cuando su hermana un día simplemente ya no regresó, el omega llevaba un año desde que se mudó fuera de su hogar, por lo que aquella llamada de sus padres desató un mal presentimiento que creía en el estómago del hombre.
