UNO

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Respire antes de salir, ya era la tercera vez que intentaba entrar en La Nueva Voz y las dos veces anteriores había fracasado.

La Nueva Voz es el concurso de canto y piano más conocido de Menorca.

Consistía en una serie de programas en las que ibas cantando canciones y el público decidía si te quedabas o no, menos la primera etapa que era la más difícil de pasar porque el jurado tenía que aprobarlo, de tres jueces mínimo dos tenían que decir que si y yo nunca habia pasado.

Entrar era mi sueño y estaba dispuesta a conseguirlo.

Volviendo a mi, llevo cantando y tocando el piano desde que tengo memoria.

El piano era mi casa.

Mis amigas pensaban que el piano no me iba a llegar a nada, pero yo estaba decidida que lo lograría y que ellas estarían para verlo.

– Número 43, Mía Blanco salga al escenario.

No era la primera vez, pero si en la que estaba más nerviosa.

– Hola, soy Mía Blanco y voy a cantar y tocar The climb de Miley Cyrus.

– Adelante

I can almost see it
That dream I'm dreaming
But there's a voice inside my head saying
You'll never reach it.

Elegí esta canción porque me representa mucho, esa voz que me dice tu nunca lo conseguirás son mis amigas.

Aunque a pesar de eso son muy majas. A Delia la conozco desde hace un año y se ha portado muy bien conmigo aunque a veces es un poco tóxica no me importa. Y a Sicily la conozco desde que tengo tres años pero se ha vuelto mi mejor amiga ahora que tengo veintitrés aunque últimamente se junta más con Delia y me alegro de que se lleven tan bien.

Termine de cantar y el público y jurado empezaron a aplaudir.

– Mía Blanco, estás dentro, felicidades – me comunico el jurado– dentro de poco os diremos cuando teneis que venir.

Después de pasar a recoger unos papeles salí del plató, y lo primero que hice fue llamar a mi mejor amigo Roi. El sabía lo nerviosa que estaba y cuanto deseaba entrar por eso decidí llamarle el primero.

– ¡Roi! ¿A que no adivinas que ha pasado?

– Sorprendeme – Dijo Roi mientras le escuchaba reírse por la línea.

Hice una pausa dramática.

– Venga dímelo Mía.

– Perdón estaba haciendo una pausa dramática, ¡Me han aceptado!

– ¡Ole! Hay que hacer una fiesta para celebrarlo, está noche en mi casa a las diez, yo aviso a todos.

– Vale, nos vemos luego Roi.

Que emoción estoy dentro.

Después llamé a mi madre que se alegro muchísimo y se lo contó a mi padre en seguida.

– Delia, a que no sabes que.

Escuché a Delia suspirar en la línea, supongo que habrá tenido un mal día.

– Tía, ahora mismo no me importa, estoy viendo Mean Girls.

Ah, vale. No te molesto luego te lo cuento.

– Si, si. Adiós.

Y en ese momento colgó.

Mean Girls era la película favorita de Delia por eso la entendia que no me quisiera escuchar.

Voy a probar a llamar a Sicily ella me hará caso, supongo.

– Sicily.

– Sicily está en el baño que necesita.

Un momento esa voz me suena.

– ¿Delia?

– Hola... Mia... Eh,¿Que necesitas?

No me podía creer lo que estaba pasando, mis mejores amigas han quedado sin mi, pero lo que más me dolía era que no me habían avisado.

– ¿Habéis quedado sin mi?

Escuché silencio en la línea.

– Si, bueno como tú estabas en la audición.

– Es verdad, pero me lo podrías haber dicho. No importa, ¿donde estáis? Así voy y os cuento una cosa.

–¡No! Digo nos íbamos ya, esto adiós ya nos veremos.

Que raro.

Llamaré a Roi para saber su opinión, el siempre me dice la verdad por muy mala que sea.

Me cogió la llamada enseguida.

– Roi

– Dime.

No era la primera vez que Delia y Sicily me hacían esto asique sabía lo que iba a decir.

– No quiero que te enfades con ellas, pero iba a contarle a Delia y a Sicily que he entrado en el concurso y primero se lo iba a contar a Delia pero ella me ha dicho que estaba viendo Mean Girls y he decidido no molestarla.

Roi suspiro al otro lado de la línea.

– Mía, no es normal que te diga eso, por mucho que esté viendo su película favorita te debería haber caso.

Mierda, que dirá cuando le cuente la verdad de esa llamada.

– Eso no es lo peor, luego he llamado a Sicily y resulta que estaban juntas, han quedado sin mi y cuando le he dicho que donde estaban me han dicho que se iban y me han colgado.

Escuché como Roi pego un puñetazo a la pared.

– Mía, eso no está bien la tendrías que mandar a la mierda. Te lo hacen todos el rato. Te doy un consejo.

– Sorprendeme.

– Comer callado hace que no te atragantes. Luego cuando salgas en la tele ya verás como van corriendo contigo y tú las dirás que las amigas están en lo bueno y en lo malo.

Me quede pensando, la verdad es que era un buen consejo.

– Tienes razón.

– Siempre la tengo.

– Jajajaj, gracias por escucharme.

– Para eso están los mejores amigos.

Eso es verdad.

– Bueno está noche fiesta en mi casa, a las diez empezamos.

– Voy antes y te ayudo, Roi.

– No te preocupes yo puedo.

– Vale, nos vemos esta noche.

– Ponte guapa, chao.

– Siempre lo estoy – bromeé.

A prepararse se ha dicho.

Las Cosas No Salen Como QueríasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora