21 (Extra)

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Espero les guste esta sorpresa y me digan que les pareció.

Perdón por tardar tanto, e estado muy ocupado u.u

Los extraño ❤️

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Narra Chester.

Teníamos cinco años juntos como matrimonio y ahora él sabía exactamente cómo llenarme de placer. 

—-¿Qué es eso? —Pregunté divertido mirando una especie de anillo con el que jugaba en su mano mientras salía de la ducha con una toalla rodeando su cintura. Yo estaba ya acostado leyendo un poco de información local. 

—-Esto es algo que te va a fascinar —-respondió con una sonrisa traviesa y supe lo que quería. 

—-Mike, recién llegamos a París y debo descansar para dar una entrevista mañana temprano, luego tendré ensayo y por la noche mi concierto —-Dije mirándolo caminar hacia mi, entonces dejó caer la toalla al piso dejando ver su sexi atractivo, y si, se veía largo aun dormido. 

Amo ese paisaje. 

—-Lo sé, pero necesito un poco de ti para descansar tranquilo —-Él gateo sobre la cama y llegando a mis labios los beso con ternura. 

—-Mike... —-Susurre en un regaño. 

—-Será muy rápido, te lo prometo —-Me suplico con su carita de cachorro lastimado. —-Te necesito como no tienes idea —-Susurró ardiendo de deseo, como si tuviéramos meses sin sexo cuando la noche anterior, en Londres, yo lo había despertado para que me lo hiciera. 

—-¿Será rápido? No sé si me convenga.

—-Te haré tocar la luna en un segundo —-Habló casi presumido y yo me reí. 

—-Haber, quiero ver eso —-Hablé divertido y sonrió. 

Se acercó a mí y besó de nuevo mis labios, esta vez más apasionado.

Amo sentir sus labios suaves y carnosos. 

Sus manos bajaron por mi torso desnudo y se metieron debajo de mi ropa interior, yo sin duda gemi con su tacto. Hice mi cabeza hacia atrás y él recorrió con sus dedos suaves toda mi entrepierna, abrí mis piernas para él y levanté mi torso lleno de placer. 

—-Me encanta hacerte delirar —-Me dijo con un tono de excitado. 

—-A mi me encanta que me hagas delirar —-Dije sintiendo qué mi excitación aumentaba. 

Él sacó su mano y tomando mi cintura empezó a besar mi ombligo. No sé porque eso me excita tanto pero lo hace, él lo sabe y lo usa en mi contra. 

—-¿Estás suficientemente mojado? —-Me preguntó.

La mirada de Mike cuando está caliente es muy diferente, es como un gato feroz, sus labios lucen rojos y se dibuja una sonrisa casi maliciosa qué me hace enloquecer. 

—-Entra en mí, ahora —-Dije apretando mis dientes de lo excitado, mi corazón no podía más. 

—-A sus ordenes mi hermoso amo —-Dijo, para luego bajar mi ropa interior y tirarla lejos.

Su miembro ya estaba despierto, se miraba su vena y salía algo de semen. Bien podía haberlo metido en mi boca porque me encanta chupárselo y oírlo gruñir perdido en delirios. Me encantaba tocar y arañar su abdomen mientras hacía eso porque él se retorcía más en placer, movía su cadera, apretaba lo que estuviera a su mano y gritaba mi nombre tan delirante qué yo terminaba completamente mojado. Tras unos minutos volvía a pasar mi lengua por su delicioso y jugoso miembro para volverlo a despertar y entonces hacer unas cuantas sentadillas sobre él, cada vez más fuertes, amo sentirlo dentro, llenándome de placer y delirio.

 En veces se sentaba y me levantaba de la cintura para dejarme caer sobre sí, entrando duro y haciendo que mi clítoris rodará violento sobre su piel, eso me hacía gemir como loco. Una vez tuvimos que pagar por molestar a los cuartos vecinos. Desde entonces pedimos habitación privada. 

Pero esta vez él tenía algo en mente y yo moría por saber lo que era. 

Lo miré ponerse de rodillas en medió de mis piernas y luego se puso ese especie de anillo en Lollipop, era algo parecido a anillo de goma, entonces gimió un poco, gateo encima de mi y lo miré tomar su miembro e introducirlo suave dentro de mi, yo gemi delirante solo de sentirlo entrar, es que es tan grande y delicioso... Gemi más mientras lo sentía entrar lento, él también gemía con esa voz gruesa y varonil que eriza mi piel. Me lo metió todo tan rico que yo me quedé unos segundos sin aliento. 

—-Ahora veras —-Dijo mirándome, entonces no sé qué mierdas hizo que el anillo que se puso empezó a vibrar dentro de mí y yo explote en gemidos como un loco y él junto conmigo. 

Me empezó a besar tan apasionado qué sus besos se podían escuchar a varios metros y él me acariciaba la espalda, la cintura, empujaba su pené más adentro tomando mi pierna, salía un poco y volvía a empujarlo dentro tan rico, tan delicioso y satisfactorio que yo estaba sintiendo tanto... Tanto que todo mi cuerpo vibraba y se estremecía, mientras  gemía fuerte, completamente perdido en satisfacción, totalmente asombrado de lo que me estaba haciendo sentir. 

No les voy a mentir, si duramos poco, me vine tan rápido y fuerte que juro que moje la cama como nunca antes. Él se vino dentro de mí y continuó besándome un rato más, luego apagó esa cosa y quitándose la se acostó a mi lado para mirarme con una sonrisa. Yo estaba respirando fuerte, sin quitar mi cara de asombro. 

—-¿Qué tal? —-Preguntó sonriendo, yo voltee a verlo aun sin poder asimilar lo que pasó y me abrace a su torso escondiendo mi rostro en su cuello. —-¿Estás bien? —-Pregunto ya preocupado. —-¿Te lastimé amor? 

—-No no, todo fue tan... Wou... Yo... Estoy.... Wou. 

Me envolvió en sus brazos y besó mi frente. 

—-Eres una ternura —-Dijo antes de abrazarme más fuerte. 

Nos dormimos tan profundamente que desperté por los golpes de la puerta de entrada, eran los chicos de la banda. Normalmente me despertaba para hacer ejercicio con ellos, pero ese día no me levanté. 

—-El chófer ya está esperándonos para la entrevista —-Dijo Amyr mientras yo corría a la ducha. 

Ese día fue algo apresurado, terminamos a la madrugada comiendo perro caliente al lado de una carretera, ya que íbamos a otra ciudad y nos tocaría dormir en una casa móvil con chófer que la compañía rento, pero fue una pesadilla para Mike quien empezó a vomitar y tuvimos que llevarlo a emergencias, su antojo de cuatro perros calientes le cobró fractura. 

—-Él estará bien, solo ocupa comer saludable y reposar —-Nos dijo el Doc. 

—-O sea que voy a morir pronto —-Me dijo mi mitad japonés algo derrotado. 

Y esta no era la primera vez que algo le caía mal al estómago en este mes, supongo que los viajes y el estrés de que todo marchara bien ya lo estaban consumiendo, pero ya casi terminaba mi gira, solo faltaban dos semanas más y regresábamos a casa. Donde por cierto ya vivíamos solos, Pues Joe y Heidy ya habían comprado su casa también. 

—-Solo aguanta dos semanas más —-Le suplique a un Mike pálido con suero intravenoso. 

—-No te preocupes amor, estoy bien —-Me aseguró con unas enormes ojeras. 

Eso no me pareció que fuera verdad, pero no podía detenerme ahora. 

 

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⏰ Última actualización: Jul 13 ⏰

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