Dr. Enzo||Matienzo

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—¡Mira, papá, mira lo que dibujé! —exclamó el niño, corriendo hacia Enzo y Matías con un dibujo en la mano.

—¡Vamos a ver! —respondió Enzo, sonriendo ampliamente mientras tomaba el dibujo y lo examinaba con interés.

Matías se acercó también, admirando el arte de su hijo con orgullo.

—¡Wow, qué bonito! ¡Eres un artista increíble! —elogió Matías, abrazando al niño con cariño.

El niño sonrió radiante ante el elogio de sus padres, sintiéndose amado y apreciado.

—Gracias, papás. Los quiero mucho —dijo el niño, abrazándolos a ambos con fuerza.

Enzo y Matías se abrazaron también, sintiéndose llenos de gratitud y amor por la familia que habían formado juntos.

—Y nosotros a ti, mi amor —respondió Enzo, con una sonrisa tierna mientras acariciaba el cabello del niño.

Matías asintió con cariño, sintiendo un nudo en la garganta por la emoción.

—Eres lo mejor que nos ha pasado, pequeño. Estamos muy orgullosos de ti —añadió Matías, con voz suave y llena de amor.

El niño se aferró a sus padres con fuerza, sintiéndose seguro y amado en brazos de quienes lo habían elegido como su hijo.

Enzo y Matías se miraron el uno al otro, Enzo le dió un beso en la frente a Matías

Enzo y Matías se miraron con una sonrisa cómplice ante la petición de su hijo.

—¡Parece que alguien quiere ver un beso, ¿verdad, cariño?! —exclamó Matías, divertido, mientras se acercaba a Enzo.

Enzo asintió con una risa juguetona y tomó suavemente el rostro de Matías entre sus manos.

—¡Aquí vamos! —anunció Enzo antes de inclinarse y darle un tierno beso en los labios a Matías.

Lucas aplaudió emocionado ante el gesto de sus padres, sintiéndose feliz de verlos tan felices juntos.

Enzo y Matías se abrazaron con amor, agradecidos por tener a Lucas y el uno al otro en sus vidas. Sabían que juntos, formaban una familia fuerte y unida, lista para enfrentar cualquier desafío con amor y apoyo mutuo.

*

Juani frunció el ceño con determinación, apartando la mano de Agustín de su mentón.

—¿Qué querés aquí, Agustín? Ya déjame en paz —dijo con firmeza, mirándolo fijamente.

Agustín suspiró y buscó los ojos de Juani con sinceridad.

—Juani, yo estoy enamorado de ti... Sé que tú también lo estás. Ya no podemos seguir así —declaró, con una mezcla de desesperación y anhelo en su voz.

Juani se apartó con firmeza de Agustín, negando con la cabeza.

—Lo siento, Agustín, pero estás equivocado. Ya no siento lo mismo por ti. Quedó ya en el pasado —respondió con firmeza, tratando de mantenerse firme ante la insistencia de su ex amor.

Agustín bajó la mirada, sintiéndose derrotado por la respuesta de Juani.

—Pero... yo... —intentó decir, pero Juani lo interrumpió.

—Ya está decidido, Agustín. Necesito que respetes mi decisión y me dejes en paz —dijo Juani con firmeza, alejándose de él.

Agustín la miró partir con pesar, sabiendo que había perdido la batalla por recuperar el amor de Juani.

—Dame una oportunidad por favor —Beso la mejilla de Juani

Juani se detuvo al escuchar la súplica de Agustín, sintiendo una mezcla de compasión y frustración.

—Agustín, ya te lo he dicho. Lo nuestro se acabó. Necesito seguir adelante —respondió con firmeza, mirándolo a los ojos.

Agustín suspiró profundamente, pero no se rindió. Con gesto apenado, se acercó y besó suavemente la mejilla de Juani.

— por favor —rogó, con la voz llena de anhelo y arrepentimiento.

La confusión se apoderó de Juani mientras luchaba con sus emociones. Finalmente, con un suspiro, cedió ante la insistencia de Agustín.

—Está bien, te daré una oportunidad —dijo Juani con cautela, sintiendo que quizás debía darle una oportunidad al menos para hablar y entender sus sentimientos.

Con gesto vacilante, Juani besó la mejilla de Agustín, mostrando un gesto de reconciliación y dejando una puerta entreabierta para explorar lo que podría suceder entre ellos.