Happiness is a Butterfly || Daniel Ricciardo.

d i e c i n u e v e

"Estoy tan deprimida
que actuó como si
fuera mi cumpleaños todos los días"
—I can do it with a broken heart; Taylor Swift.

2 de septiembre

—Daniel —llame a mi esposo quién se estaba duchando.

—Dime

— ¿Has visto mis gafas Dior?, las quiero usar hoy y no las encuentro.

—Las puse en tu neceser de joyas.

Caminé al closet y busqué mi neceser, lo abrí y estaban las gafas, las tomé, antes de cerrar el neceser un particular objeto llamo mi atención, unas pinzas para el cabello miu miu.

Eso no era mío.

Cualquier duda que había tenido antes sobre una infidelidad de Daniel, fue disipada y por su parte confirmada.

Tomé las pinzas con ira, la chica había estado en la habitación, había estado de entrometida en mi closet, había visto mis joyas, ropa, zapatos y lo peor aún, se acostó en la cama, tirarlas a la basura era la opción más viable, sin embargo, una parte de mi la más cruel y orgullosa decidió otra cosa.

Peine mi cabello con el cepillo, y luego pase la plancha asegurándome que mi cabello quedará completamente liso, luego tome el par de pinzas rosa, y con mucho cuidado las puse sobre mi cabello, lo peine una vez más y luego aplique un poquito de gloss sobre mis labios.

A esta altura, Daniel ya se había terminado de arreglar, se aplicó perfume y me avisó que ya estaba listo, por mi parte tomé un bolso que hiciera juego con las pinzas, salí de la habitación, Daniel estaba alistando las llaves del auto.

Salimos de la habitación y entramos en el elevador, me mire en el espejo verificando que las pinzas estuvieran bien puestas.

—Maddy me escribió preguntando la hora en la que llegaríamos al restaurante —dijo Daniel sacándome de mis pensamientos.

—A las siete —respondí retocando mi gloss.

— ¿Te podrías venir sola del autódromo al hotel luego de que acabe la qualy?

Lo mire fijamente.

—Sí amor —sonreí— No hay problema

—Tengo que hacer unas cosas antes de ir a la fiesta, así que no te podré traer de vuelta —dijo rascándose la nuca.

—No te preocupes mi amor —seguramente Alice no se puede regresar sola al hotel— Le diré a Boris que me traiga de vuelta.

—Vale —entrelazo nuestras manos y salimos del elevador camino al auto.

•••

Termine de apuntar la sandalia de tacón que usaría, mire la hora en mi celular, faltaban treinta minutos para que iniciara mi celebración de cumpleaños y Daniel no aparecía, lo había llamado y dejado un par de mensajes, pero no había respuesta alguna, tal vez llegué al restaurante, trato de convencerme mi subconsciente

Retoque mi gloss, tome mi bolso y salí de la habitación.

—Nos vamos —le dije a Boris, me miró confundido— No sé a qué hora se le dé la gana aparecer al señor Ricciardo, y es mi fiesta de cumpleaños que se está haciendo un día antes para que el "pudiera estar".

Boris asintió y salimos rumbo al restaurante que mi mejor amiga y hermana habían rentado para la noche.

Al salir del hotel fanáticos de la fórmula 1 estaban ahí, esperando señales de su piloto favorito, saludé de lejos a los que se alegraron de verme y me subí a la camioneta que me llevaría a mi fiesta.