Hero ➸L.T

c i n c o

Louis PoV

-Hola- saludé sin apartar mi brazo dela espalda de Jess, podía notar cómo temblaba.

Todos giraron sus cabezas y mis amigos,se quedaron mirando a Jess durante unos segundos, pero como de costumbre la chica bajó la mirada y sus mejillas amenazaban con volverse rosadas, así que decidí presentarla.

-Ella es Jess, una amiga- sonreí y la miré por el rabillo del ojo; una media sonrisa estaba dibujada en su rostro.

-Yo soy Niall- saludó el rubio y se acercó a ella y le plantó dos besos en las mejillas, gesto que sorprendió a Jess - Venga sentaros y pedid algo, que nosotros hace un rato que pedimos - Niall le hizo un hueco a Jess entre él y Harry, quedándome yo en la esquina con Allyson a mi derecha. Podía ver cómo Jess me pedía ayuda con la mirada, pero en aquel momento no podía hacer nada, Niall se había apoderado de ella y a mí me habían desterrado a la esquina, donde lo único que tenía era a la castaña, que no paraba de mirarme a la vez que se mordía el labio inferior, hecho que me parecía un poco incómodo.

Jess PoV

Los amigos de Louis estaban siendo muy amables conmigo, nunca había pensado que podrían tratar a alguien como yo de esta manera, es decir, me hablaban como si mi intento de suicidio no hubiese pasado nunca y me trataban como si siempre hubiese estado en su grupo. Por el contrario, no podía decir lo mismo de las tres chicas que nos acompañaban; ellas no dejaban de mirarme, hacían muecas y susurraban, seguramente sobre mí y de cómo iba vestida o sobre cualquier otra cosa. Las conocía, eran las A,todo el mundo las respetaba por el simple hecho de que llevaban un blog en el que se dedicaban a criticar a todo el instituto, algo que me parecía bastante infantil, y por tanto nadie en el instituto quería aparecer en ese blog.

-¿Quieres otro?- me preguntó Niall señalando el vaso de mi refresco ya vacío.

-No gracias- sonreí y él me devolvió la sonrisa.

-Eres muy dulce¿sabías?- dijo y yo,sin poder evitarlo, me sonrojé, podía notar como hervían mis mejillas y no podía hacer nada para remediarlo

-Gr-gracias- fue lo único que conseguí contestar, mi cabeza y mi corazón iban a mil por hora tratando de asimilar esto; jamás nadie me había dicho nada así, siempre había sido eclipsada por el resto de mis amigas cuando éramos pequeñas y,por tanto, nunca había recibido piropos ni buenas palabras hacía mi persona. Pero se sentía bien, me sentía mejor después de esto.

Giré la cabeza para ver a Louis, que estaba sentado en la esquina y, un pinchazo recorrió mi cuerpo al verle con aquella chica; era castaña, con unos grandes ojos y una bonita sonrisa. Estaban hablando animadamente pero, además, la chica acariciaba sus mejillas y le cogía la mano, él parecía estar cómodo y verle sonreír así, sabiendo que no era por mí hizo que mi corazón se rompiera en pedazos. Me sentaba mal, porque quería ser yo quien le sacara esas sonrisas,quería ser yo la que acariciase sus mejillas, pero para mi desgracia eso nunca sería posible, porque yo era Jess y a Jess nadie la quería y nadie la apreciaba y tendría que vivir con ello el resto de mi vida.

Las lágrimas amenazaban con salir así que aparté la vista y la fijé en un punto del suelo intentado calmarme, pero todos mis intentos fueron en vano, necesitaba aire,necesitaba dejar mis lágrimas libres.

Cogí mi pequeño bolso y me levanté:

-Disculpadme- dije intentado que no se me rompiera la voz y salí casi corriendo hacia el exterior de la cafetería.

Nada más cerrar la puerta tras de mí,las lágrimas se apoderaron de mi rostro y resbalaban por él a toda prisa, haciendo que la vista se me nublara. Al llegar a la esquina giré a la izquierda, encontrándome con un pequeño parque que estaba vacío, supongo que a las once y media de la noche los niños no lo utilizarían y eso me tranquilizó, porque lo único que necesitaba ahora era tranquilidad y evadirme de todo por unos minutos.