2.

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El clima de Bahrein le había parecido siempre sofocante y más teniendo en cuenta el tiempo que había pasado en Milton Keynes.

Max ya sentía el sudor pegar su playera a su espalda y su gorra empaparse, no llevaba mucho rato ahí, pero su rostro ya estaba completamente rojo.

¿Por qué? No recordaba jamás haberse puesto así, entonces un recuerdo se abrió paso por su mente.

Vamos Emilian, conseguí el protector solar más potente de todos, no queremos que te vuelvas un camarón cielo, ahora agáchate un poco para que te lo pueda poner

¿Camarón? -su esposo se había reído

Sip, los camarones se ponen rojos cuando los cocinan, justo como tú ahora- Sergio había sonreído tan bonito que no había resistido las ganas de besarlo, embarrandolo a él también.

-Pareces un Camarón amigo -alguien palmeó su espalda y su comentario le hizo doler el pecho- ¿Cómo has estado?

Max miró a Lando, él junto con Charles y Daniel eran sus mejores amigos, se había aislado durante las vacaciones de invierno alegando que había estado muy ocupado, cuando la realidad es que había estado tratando de recomponerse.

Sí sabía que su decisión de divorciarse de Sergio era lo mejor ¿Por qué dolía tanto?

-Bien, me la pasé entrenando.

Lando asintió, conocía demasiado bien a su amigo, pero era cómo una piedra, nunca sabían qué pasaba por su mente.

-Eh... ¿Lo has visto?

-No -ambos sabían a quién se refería y el rubio nunca se andaba con rodeos- no estuvo en Milton Keynes, pero vi a Jo hace unos minutos, así que por ahí debe estar, seguramente chismeando con Yuki y George.

-Sabes que sí necesitas algo puedes llamarme ¿Cierto? -Max simplemente frunció el ceño, para los que lo conocían era básicamente un "gracias lo se, pero soy tan duro que haré como que no me importa" - Suerte, nos vemos en la primera carrera.

Su padre no se encontraba en el recinto, por lo que sabía que tendría vía libre para buscarlo, aunque tratara de convencerse, necesitaba verlo, tanto, que su corazón comenzaba a doler.

Cuando entro al garaje de Sergio sintió cómo lo miraban, no le sorprendió, sabía que en el momento en el que él mandara los papeles de divorcio todos tomarían un bando y dentro de las escuderias y mayoría de fandom, él no ganaría, solo la estúpida prensa lo respaldaba.

Se sintió estúpido, no podía simplemente entrar a su motorhome, ya no, él lo había dejado, sin ninguna explicación previa, en el momento en el que su padre le había abierto los ojos sobre lo que estaba perdiendo, le había pedido el divorcio. Después sería alentado por un pequeño comentario sutil de su madre, insinuando la posible infidelidad. Se había negado a creerlo.

Seguía ahí, cuando vio salir a Jo con una mochila, el mexicano frunció el ceño al verlo.

-Jo

-Verstappen -nunca había sido santo de su devoción, pero jamás le había importado, a él solo le importaba la opinión Sergio.

-Eh... ¿Checo está dentro? -el castaño frunció el ceño. Realmente tenía unas inmensas ganas de partirle la madre al pinche güero. Pero no podía, al menos aun no.

-No.

- ¿Sabes sí regreso al hotel? Yo...

-No.

- ¿Entonces?

-Tú no deberías estarlo buscando, Tú lo abandonaste, asi que Tú deberías simplemente mantenerte alejado de él.

El mexicano se dio la vuelta y lo dejó ahí, sumido en sus pensamientos, un suspiro salió de él, realmente no se había preparado para lo que sería la convivencia con los demás.

REGRET (Chestappen) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora