CAPITULO 25

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Frank

Tenía que ser listo, no podía dejar que mis emociones me dominaran, tenía el tiempo contado, las cosas en colorado se complicaban y yo necesitaba de cualquier manera regresar sin levantar sospechas.

El choque emocional que fue para mí el descubrir que la persona en la cual confié durante años me mintió fue devastador, no solo me hizo creer que se preocupaba por mí, sino que por muchos años me culpo indirectamente por la pérdida de Constans... todos esos años pensando ¿Qué pude hacer diferente? Culpándome, buscando los responsables...

Él estuvo ahí, y sabía perfectamente que estaba dando vueltas en círculo, porque nadie más que él tenía las manos llenas de sangre, de culpa... de pecado.

Supongo entonces que lo último que espero en esta vida fue que al llegar a ese pueblo me terminara enamorando de Georgia, era una posibilidad en un millón, porque tanto para él como para toda esa gente imbécil del pueblo, el valor de Georgia era nulo.

Ese fue su error... y mi más grande acierto.

Supongo que el destino tenía sus maneras de revelarse ante este tipo de jugadores, y supongo, que después de todo Stone tenia razón... ese lugar me daría la paz para encontrar la verdad... y la encontré.

-¿Estas bien?- se sentó a mi lado mientras esperábamos al encargado del caso de Georgia

-Estoy nervioso, he esperado por esto durante años así que yo...-

-Supe que esta vez buscaste en los archivos desclasificados- primer alerta

-Sí, de verdad no puedo fallar esta vez, yo solo quiero justicia. Pero no encontré gran cosa, la verdad es que todo lo que hemos investigado está en orden, ir a ese lugar solo me quito un poco el tiempo, son unos imbéciles- maldije y pude ver como su cuerpo se destensaba

-Lo único que quiero es paz-

-Siento mucho esto Stone... no puedo entender lo doloroso que debe de ser para ti, si yo siento tanta desesperación e impotencia... perdóname por arrastrarte hasta aquí-

Mis palabras fueron sinceras, porque en realidad ahora mismo no tenía ni idea de lo cerca que estaba de perder todo por lo que lucho, todo ese dinero, ese renombre, no valdrían nada en un abrir y cerrar de ojos, y realmente lo lamentaba.

-¿Has sabido algo de la chica Cox?- segunda alerta

-No, la quiero mantener lejos de todo esto hasta que lo solucione- respire intentando controlarme

-Esa chica es igual que su madre- dijo mirando a la pared, como si su mente viajara a un lugar donde no quería estar- tienen una magia que te hace creer invencible, pero no dura mucho, son orgullosas y devastadoras...su madre jamás se tentó el corazón cuando de hacerme daño se trató-

-Creí que tú te habías marchado-

-Lo hice, lo hice, pero ella...- trago grueso- simplemente jamás acepto mi vida, jamás pudo salir de ese jodido pueblo y término con el hijo de su patrón, que novedad, que novedad que se quedara con el tipo con dinero-

Pude indagar en esa herida, pero podía ver por su postura lo incomodo que estaba, lo fuera de lugar que se sentia, si seguía por ese camino lo único que lograría sería ponerse en evidencia, y que por consecuencia yo también lo hiciera.

El paso por la corte fue mejor de lo que espere, pelee lo suficiente para no levantar sospechas y con gran desagrado pude darme cuenta como Stone me metía el pie cada dos por tres, quizá no lo note en el pasado, lo que yo creía era un intento por llevar una vida serena, ahora mismo era una alerta más de lo que alguien sin escrúpulos podría llegar a hacer.

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