Dicen En El Pueblo

EPILOGO

Georgia

Rancho Cox 5 años después

-¿Dónde está tu padre?- camine con la tarta de cumpleaños tambaleando entre mis manos

-Está afuera con el tío Marcos colocando las banderas de adorno-

-Uff, se salvó, apenas venía a recordárselo- sentí como mi hijo tomaba el pastel de mis manos con cuidado- ponlo en la mesa si cariño-

-Bien, bien- lo note más apagado de lo normal

-¿Sigues sin saber nada de Asmee?- se encogió de hombros- estoy bien, supongo que así es mejor, Londres está muy lejos, y ella es realmente brillante, así que no importa-

-Hijo, tu sabes que si quisieras ir con ella, yo-

-Estoy bien, de verdad lo estoy, mi camino y el de ella son diferentes, pero mientras fueron el mismo fui muy feliz-

-David...- acaricie su rostro mirando toda su tristeza

-Te juro que estoy bien mamá, la amo lo suficiente para dejarla volar- y besando mi frente salió con aquel pastel en un a mano como si no pesara nada.

-Es un chico fuerte- Julieta se sentó en la barra de la cocina para terminar de poner los listones a las bolsas de dulces

-Lo es, supongo que después sacara todo con su padre-

-¿Celosa?-

-Un poco, la verdad que compartir el amor de mi niño no ha sido fácil-

-Ese Frank es una joya-

-A que lo es, claro que lo es- sonreí mirándolo jalonearse con Marcos y la decoración

-Mi Jaime también era una joya- soltó con aquella sonrisa torcida que siempre daba- hasta muerto lo es-

-Me asustas- arrugue el señor mirándola sonreír un poco mas

-Tuve un sueño, tenía mucho tiempo que no soñaba con él... me sentia mal porque pensé que lo estaba olvidando- se le corto la voz- me dijo "Sal con ese tonto" –

-Sabias palabras-

-Lo son- mordió su mejilla

-Es un buen tipo, a pesar de todo, siempre lo ha sido-

-Lo es ¿cierto? Me sorprendió cuando estuvo ahí para mi última cirugía, y más aún cuando me acompaño a cada revisión, algunas noches llegaba con las sobras de la cafetería, me ayudo a cambiar los pisos de la casa, el jardín... nunca dijo nada-

-Te ama, se le ve en la cara, te adora con todo el corazón-

-Lo sé... creo que yo también le quiero- dijo apenas

-July...- la abrace- pero no se lo digas que se le subirá a la cabeza- le susurre mientras reíamos

-Muy tarde- limpio sus ojos

-¡Hola! ¡Hola!-

-Duraras mil años, estábamos hablando de ti- dije separándome de mi amiga que sonreía mirándolo pasar con un nudo gigante de globos

-Bien, supongo que es algo bueno- llego hasta Julieta poniendo una mano en su costado- ¿Todo bien mi Juls?- pregunto apenas audible para ambos y ella asintió acariciando su rostro-¿Puedo?- y antes de que la pregunta terminara ella lo atrapo en un beso que lo hizo soltar los globos

-¡OYE!- grite sujetándolos- se supone que son los padrinos de Jaime, así que compórtense-

-¡Si, compórtense!- Lee entraba con aquella pequeña de ojos azules en sus brazos-¡Vamos, gobiérnense! ¿Verdad Skyler?-

-Deberían de ponerse de acuerdo para esos nombres, David, Skyler y Jaime, no pegan para nada-

-Solo ustedes la llaman así, su acta de nacimiento claramente dice Raquel, no sé porque la empezaron a llamar de ese modo, si esto sigue así tendremos que cambiarle el acta de nacimiento-

-Que no sería la primera vez que se hace en esta familia- Lee sonrió con la pequeña a un dormida

-¡LISTO!- un grito nos tomó por sorpresa

-Préstamela, vamos afuera- me quite el delantal tomando a mi princesa entre mis brazos

-¿Qué te parece?- Frank caminaba con Jaime pegado a su costado señalando las banderas

-Se ve hermoso- sonreí mirando el jardín lleno de adornos y globos- gracias amor- me puse de puntillas para besarlo

-No beses a mamá- Jaime empujo a su padre pasando de sus brazos a los míos

-Oh vamos Jaime, sabes que mamá y papá son esposos, así que debes dejarme darle mucho amor-

-Está bien, pero no puedes cargar a Skyler, también es de Jaime-

-Este niño será la peor pesadilla de su hermana- Frank rio intercambiando a los pequeños

-Ambos serán mi peor pesadilla- David estiro los brazos y ambos niños levantaron los brazos- lo ven, en el pueblo todos piensan que Skyler es mía-

-Seguramente por lo rubia- se burló Julieta

-Que graciosa. De verdad mamá cuando dijiste que tendrían un bebé creí que sería un bebé, estos son dos-

-Bueno, no puedes culparme a mí, culpa a tu padre-

-Tu sabes que me gusta que tu madre este feliz siempre- le guiño el ojo y todos reímos al ver la cara de asco de David

-Tengo 21 años ¡Por Dios! Entiendo de lo que hablas-

Este día de primavera era el primer cumpleaños de Skyler, jamás pensé, ni si quiera considere que volvería a tener hijos en mi vida, pero un día Frank lo dijo "Quiero tener un hijo contigo, alguien que tenga tus ojos y mi cabello, una princesa que ría como tú y mire como yo, un pequeño vaquero que monte tan bien como David, quiero que sepa lo que es tener hermanos, y saber que nuestros hijos tendrán un genial hermano mayor... ¿Te gustaría?"

Cuando me dijo aquello solo pude sonreír, porque claro que lo quería, David se volvió loco cuando supo que estaba embarazada de Jaime, fue el primero en cargarlo, y no se separaba de él, nunca lo vi tan feliz.

Y qué decir de la familia, pesamos que no podíamos tener más felicidad, y entonces llego Skyler, con esos ojos azules y la sonrisa de David, tenía a todo el rancho bailando en su mano... lo tenía todo...

Yo... el tema favorito del pueblo lo tenía todo...

Algunas noches me despertaba muy asustada, corría por el pasillo para cerciorarme que Jaime y Skyler estuvieran ahí, miraba la fotografía de la graduación de David en el pasillo, todo era real todo lo era...

En esas noches Frank me tomaba de la mano, me regresaba con él a la cama, acariciaba mi rostro y me susurraba que todo estaba bien, todo, que me amaba, que nada nos haría daño nunca más, que lo logramos...

Era casi improbable, era casi imposible, pero aquí estábamos.

Todos los que un día nos rompimos, nos armábamos lentamente, el tiempo nos estaba curando, nos daba un camino que seguir poco a poco, con todo ese karma acumulado para bien, devolviendo las sonrisas que nos arrancaron y dando la calma que nos hacía falta.

-¡VAMOS GEORGIA SONRIE!- el grito de July me regreso a la tierra y mi sonrisa se levantó en mi rostro con mi familia rodeándome, David y Jaime aplaudían mientras que yo sostenía la mano de Skyler junto con su padre para partir su primer pastel, esto era todo lo que alguna vez soñé, lo que pensé jamás tener... y ahora la vida me bendecía con esta felicidad que me ahogaba el pecho.

Aquella foto seria mi favorita por años...