La joya de la corona

80's y ojeras

El segundo día de la temporada de debuts siempre tenía lugar un aperitivo al aire libre. Este año, por ser el año que era, el aperitivo se celebraría en los jardines de palacio, cortesía de Ruslana y la familia Real. Juanjo apenas durmió esa noche. Llegó a casa tarde de la fiesta del bar y luego estuvo un rato dando vueltas en la cama por culpa de cierto príncipe con bigote que, de una forma poco sútil, había prometido convertirse en un grave obstáculo en su misión de asegurarse un futuro en el Palacio Real.

- Anoche llegaste tarde.- Su madre le esperaba ya en el comedor cuando bajó a desayunar.

- Hubo... Una pequeña celebración tras la presentación. Se nos hizo tarde.

- ¿Tuviste ocasión de hablar con la princesa?

- No demasiado... Con la llegada de su hermano fue todo un poco... caótico.

- Está más guapo de lo que lo recordaba.- Juanjo casi se atraganta con el café.

- Mamá por dios...

- Es solo una observación...

- No sé qué os pasa a todos en esta casa con él...Parece que se os olvida todo el rato lo que hizo...- Noemí se encogió de hombros, restándole importancia.

- Solo he dicho que está guapo.- Juanjo sintió que no tenía nada más que rebatirle a su madre así que intentó terminar de desayunar lo antes posible para salir corriendo hacia palacio.

Pablo le esperaba en la puerta de su casa cuando salió.

- Te veo más animado.

- He decidido aceptar que hay cosas que no puedo cambiar. Que el amor de mi vida sea lesbiana, por ejemplo, es una de ellas.- Juanjo soltó una pequeña carcajada antes de echar a andar con su amigo hacia el evento.- De todas formas me dio pena que me preguntara por Violeta, está claro que la pobre está perdidamente enamorada de ti.- Juanjo rodó los ojos.

- No digas tonterías.

- Puedes negarlo lo que quieras pero la mejor amiga de tu hermana lleva haciéndote ojitos desde que estábamos en primaria.- Pablo puso una mueca divertida antes de pasar un brazo por los hombros de su amigo- Ay Juanjito y las pelirrojas...

Tardaron un par de bromas más en llegar a la reja que daba entrada al jardín, donde unos guardas comprobaron quiénes eran y les dejaron entrar. El marqués tardó poco en hacerse con dos vasos de vino y localizar a la princesa que se encontraba hablando con Chiara en una de las mesas de comida.

- Señoritas... ¿Cómo va la mañana?- Le dedicó un guiño a la princesa que pareció dejarla fuera de combate unos segundos y aprovechó para intentar sacarse a Chiara de encima.- Chiara, un placer verte otra vez. Mi hermana estaba deseando conocerte para preguntarte sobre algo de un vestido... No me acuerdo muy bien. Es la rubia que está al lado de la pelirroja esa- A la inglesa se le iluminaron los ojos en cuanto divisó a Violeta.

- Oh... Supongo que... Iré a presentarme... - Se le tiñeron las mejillas de rojo y le faltó tiempo para salir corriendo hacia el grupo de Denna.

- Muy sútil por tu parte.- Ruslana había entendido al momento lo que estaba pasando. Juanjo le tendió la copa de vino que la princesa aceptó con una sonrisa.

- No sé de qué me hablas- Dibujó una sonrisa burlona antes de dar un sorbo a su bebida.- ¿Qué tal llevas la introducción a la sociedad?

- Es... interesante. Nunca tanta gente había intentado caerme bien a la vez. Es abrumador, pero supongo que en el buen sentido...

- Bueno... Puedes contar conmigo si necesitas cualquier cosa.- Ruslana le sonrió sinceramente.- Sé dónde va cada cuchillo en la mesa y para qué se usa cada tenedor.