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- ¿Qué quieres que te diga, Juanjo?
- No sé. Tengo la cabeza hecha un circo.
- Bienvenido al grupo amplio y poco selectivo de gente que se ha liado con su ex. Puedes tomar asiento al lado de esa chica que se ha convencido de que el gilipollas que le puso los cuernos va a cambiar y de ese chico que se lió con su ex muy borracho y solo lo sabe porque se lo han contado unos amigos.- Paul y él se encontraban en su cuarto. Su amigo se probaba corbatas de Juanjo enfrente del espejo para robarle una para la boda, mientras Juanjo se lamentaba, tumbado encima de la cama.
- A veces no te soporto.
- ¿Esta lila me pega?
- Pero, ¿estás escuchando algo de lo que te digo?
- Tienes razón. El traje es azul marino. Lila no pega.
- ¿Repíteme por qué somos amigos?
- En serio, no eres especial, Juanjo. Todo el mundo se lía con su ex tarde o temprano. Es como una de las leyes básicas de la naturaleza. Cuestión de morbo si me permites mi opinión.
- ¿Morbo?
- Sí, ya sabes. Porque sientes que estás haciendo algo que está mal. Algo prohibido. Estaba claro que os ibais a liar desde que Martin apareció ayer allí y tú decidiste quedarte. Yo te ofrecí que nos fuéramos y ni caso.
- ¿Crees que Martin se lió conmigo por morbo?
- Oye, ¿Esta corbata no es mía? Me suena un montón.- Juanjo pensaba asesinarle con sus propias manos.
- ¿Me puedes hacer caso? ¡Estoy en crisis!
- ¡No haberte liado con tu ex! ¡Esto te pasa por salido! A los dos. No es tan profundo, Juanjo. Fue un calentón. ¿Roja?
- La roja la voy a llevar yo.- Le arrebató la corbata de las manos y volvió a llamar su atención.- Esa es la cosa. No creo que fuera un calentón. Por lo menos no por mi parte. Y creo que por la suya tampoco.
- Juanjo no quiero que te hagas falsas ilusiones yo solo...
- Me dijo que no se había sentido así con nadie más.
- ¿Te dijo eso? ¿Mientras os besabais?
- Sí. O algo así. No lo recuerdo mucho.
- Oh... ¿Y qué le respondiste?
- Nada. Le vomité encima.- Paul soltó una carcajada.
- ¿Cómo?
- No te rías, por Dios. Es que entre el pedo que llevaba y lo nervioso que me pone tenerle cerca, diciéndome esas cosas, Dios qué agobio. Entré en pánico. Fue un vómito de pánico.
- Juanjo...- Paul era incapaz de contener las lágrimas que se le escarban de los ojos con el ataque de risa.
- ¡Deja de reírte de mi!
- ¿Cómo no me voy a reír? El chaval se te declara y tu vas y le vomitas encima. Es lo más poético que he visto en mi vida.
- ¿Crees que fue una declaración? No sé, Paul.- Juanjo se frotó la cara con las manos, tratando de aclarar ideas.- Luego pensándolo solo me ha invadido la imagen repetida de toda la gente con la que se habrá liado para comprobar esa teoría. Para poder afirmar eso con tanta rotundidad. Se me revuelven las tripas de pensarlo, en serio...
- Cuidado no vayas a vomitar otra vez...- Volvió a soltar una carcajada ante su propia ocurrencia y Juanjo le propició un leve golpe en el hombro. Pero consiguió sacarle una breve sonrisa.- No creo que sea para tanto, Juanjo, no estabais juntos, ¿no? ¿Además tú no quedaste con Violeta?
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La joya de la corona
RomanceLa mayoría de edad de la princesa implica un montón de cosas. Para Juanjo, concretamente, la oportunidad de convertirse en rey. Pero todo cambia cuando el hermano mayor de la princesa vuelve de su "retiro espiritual" para ponerlo todo patas arriba...