Capítulo 2

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Al menos, el pequeño parecía cómodo estando cerca de Jeonghan. Era extraño ya que, si el omega se alejaba, el pequeño comenzaba a hacer muecas parecidas a alguien que comenzaría a llorar.

La hora del término de clases llegó, pero el hombre con traje no había aparecido todavía. Logró llamar a uno de sus amigos más cercanos y vecino, Wonwoo, para que pudiera pasar por Chan a la primaria, después de todo era el segundo número de contacto en los datos de su hijo.

—¿Estás seguro que puedes quedarte? —preguntó Seungkwan mientras terminaba de alistar sus cosas— Podemos dejarlo en una estación de policía.

Jeonghan miró al pequeño que estaba aferrado a su pierna, como un cachorrito, no podía dejarlo en otro lugar desconocido.

—Estaré bien —el omega le dedicó una sonrisa tranquilizadora a su amigo—, estoy seguro que el padre aparecerá en cualquier momento.

Y como si sus palabras predijeran el futuro, la presión en su pierna desapareció cuando la puerta de la recepción fue abierta, entrando por esta el hombre de la mañana. Se inclinó para recibir con los brazos abiertos al pequeño que estaba corriendo directamente hacia él y le dio un cálido abrazo.

—¿Cómo estuviste, campeón? —dijo el hombre mientras le acariciaba el cabello— Te dije que volvería por ti.

Jeonghan pudo observar la tierna escena, pero también como su amigo babeaba por el hombre de traje. No iba a negarlo, desde el primer momento se había dado cuenta que era bastante guapo, pero el hecho de haber dejado a su hijo a su suerte había logrado suplido todo pensamiento positivo de su apariencia. Sin mencionar que ese hombre le había visto de forma extraña durante mucho tiempo.

—Jeonghan —dijo Seungkwan en un susurro—, creo que me enamoré.

—Siempre lo dices cuando ves alguien atractivo —le respondió igual en voz baja—, mejor vete antes de que le babees encima.

El omega empujó a su amigo mientras su vista volvía al hombre, quien nuevamente le miraba con unos ojos difíciles de descifrar.

El hombre de traje se levantó con el pequeño entre sus brazos y se acercó a paso lento hacia Jeonghan.

—Gracias por cuidar de mi hijo —hizo una pequeña reverencia, sus ojos seguían mirando a Jeonghan con una intensidad que lo confundía.

—Era lo mínimo que podíamos hacer —la voz de Jeonghan salió más tosca de lo normal, tanto que Seungkwan le dio un leve codazo por el costado—, pero, para la próxima no deje a su hijo en el primer lugar que vea.

El hombre se sintió apenado, o eso esperaba que sintiera Jeonghan cuando lo vio sonrojarse ligeramente y desviar la mirada.

—Fue una emergencia, pido disculpas por los inconvenientes.

—No se preocupe, no tuvimos problemas —se apresuró a decir Seungkwan cuando vio como su amigo estaba preparándose para regañar como a un niño pequeño a ese hombre con traje —, ¿Verdad, Jeonghan?

Un suspiro molesto que no se preocupó en disimular se escapó de sus labios y asintió con la cabeza, el hombre seguía mirándolo solamente a él.

—Necesito que llene el formulario —dijo Jeonghan—, si quiere que volvamos a cuidar a su hijo, necesitaré algunos datos importantes.

La mirada del hombre pareció iluminarse y agradeció repetidas veces. En ese momento Seungkwan se había percatado de algo, ese hombre estaba solamente mirando a Jeonghan, eso significaba que él no podría ligárselo, por lo que dejó el lugar despidiéndose de ambos.

Baby ❤️ JeongcheolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora