todo por aquel viaje [FINALIZADO]

3

Tara

Cuando volvíamos a Australia de Bali, Jorge me esperaba en el aeropuerto. Una sonrisa apareció en mi cara. Me lancé a sus brazos en cuanto lo vi, lo había echado de menos. Fuimos los cinco en el coche mientras que el resto se iba por su lado. Yo solo quería llegar a la casa y estar con él, estar pegada con él y ponernos al día. No hacía demasiado que no nos veíamos, pero nos hacía falta. Nos podíamos pasar horas hablando, eso era algo bueno de nosotros.

–Bueno, cuéntame, ¿qué habéis estado haciendo?

–Visitar cada rincón. Es tan bonito.

–Te dije que estar ahí era mejor que las fotos –sonríe.

–Y que lo digas.

–¿Y que tal con las demás? ¿Lili te has vuelto a pelear con Carla como la última o…?

–Una buena contestación le he pegado –responde ella.

–A mi lo que me ha gustado es cuando hemos bajado del coche –dice Borja sonriendo.

–Se han besado y lo están volviendo a intentar.

Mi novio abre la boca en forma de O. Le encanta el cotilleo, tanto como a mí.

–Y la señorita me ha sacado a Daniel.

–¿Como? –eso ya no le hace tanta gracia.

–Pregúntale a ella.

–Vamos a irnos a verlos, en dos semanas –habla ella tan campante.

No quise ni mirarlo. Sabía la cara que tenía.

–Estupendo.

–Voy obligada.

–No tienes que ir si no quieres y lo sabes perfectamente, Tara.

–No importa, así veo a los demás, que se les echa de menos.

–Haz lo que quieras –chasqueó la lengua.

–Eso hago.

A él no le hacía ni puta gracia. No le caía bien Daniel, a Borja lo toleraba muy bien y eran amigos, pero al resto no podía ni verlos. Pero al final eran mis amigos y tenía que respetarlo. En dos semanas tenía que mentalizarme para saber qué iba a ver a ese chico, junto con los otros dos. Y no voy a mentir, estaba nerviosa.

Plex

Estuve un poco más contento gracias a Jopa y a Paconi, me estaban apoyando día a día, y a Borja, que volvió.

–¿Cómo ha ido?

–Bien, bien… –estaba raro.

–Ya me estás contando que te pasa porque tú no eres así.

–He estado con ella.

–¿Con ella quien?

–Con Tara.

Se me paró el corazón un segundo cuando oí ese nombre. Sabía que eran amigos, pero nunca mencionaba nada de ella.

–¿Recuerdas que Lili me había invitado a un viaje a Bali? Hemos estado con ella. Son buenas amigas y…

–No me lo cuentes.

–Pensé que te haría bien saber de ella.

–Estoy intentando salir de esto, claro que quiero saber de ella pero no me haría bien. Saber qué podría estar con ella si todo esto no hubiera pasado me rompe, y lo sabes, Borja.

–Vale, lo siento.

–¿Algo más que contar?

–Bali es precioso.