Desde Buenos Aires a U.A | Un argentino en Boku no Hero Academy

Capítulo 10: Presidente de clase.

—¿Cómo es tener a All Might como maestro?



—¿Puedes contarnos algo sobre el curso de héroe que está enseñando?


—¿Cómo crees que le esta yendo como profesor?



—¿Cómo estás disfrutando de Japón hasta ahora?



Ryu gimió internamente, ¿podría simplemente llegar un día tranquilo a clases? ¿Qué pasa con todos estos reporteros? En el momento en que se bajó del autobús, la horda de reporteros lo acosó al instante en que lo vieron con el uniforme de la UA. Lo siguiente que supo fueron cámaras, teléfonos, micrófonos, lo que sea, y se los arrojaron a la cara antes de que pudiera hacer algo.

—¿Qué mierda?— Fue el pensamiento de Ryu cuando múltiples micrófonos fueron acercados a su cara.


 —Esto se ve mal por donde lo veas, parezco Karely Ruiz la concha de la lora— su vista se cegó por las fotografías tomadas.


—¿Cómo son las clases de All Might?— preguntó una reportera a su lado a otro estudiante, Ryu caminó fuera de las cámaras al reconocer esa voz nerviosa.



—¡Ah, Ryu-kun!— Gritó Midoriya al ver a su compañera llegar a él, empujando a los reporteros que intentaban conseguir un poco de conversación.


—¡Para hijo de puta!—Gritó enojado Ryu a alguien detrás de él.



—¡Me estas apoyando el micrófono en el culo la concha tu madre!— Insulto  en español con sus puños apretados listo para lanzar un puñetazo cuando pisaron sus zapatillas blancas. Izuku lo notó y rápidamente lo tomo de su brazo.


—Esto... disculpen— se coloco enfrente el peliverde, Ryu extrañado bajo el puño cuando fue arrastrado por su compañero. —¡Nos tenemos que ir!— arrastro rápidamente a su compañero para entrar dentro de la escuela. Dejando que los reporteros interroguen a otra persona.


-X-



La noticia de que All Might fue contratado como profesor en la U.A, sorprendió a la nación, y los medios fueron a la escuela y causaron conmoción por días.

Cuando llegaron al aula Ryu se sentó atrás de Mina en su asiento habitual. —Buenos días, Mina-chan— Saludó en japonés.



—¡Buenos días, Ryu-kun! ¿Dormiste bien?— Ella respondió alegre mientras Ryu iba a tomar sus cuadernos.


 —Seeeh— él respondió, al parecer nadie de los de su clase se relajaban al sacar de su sistema todo el acoso sufrido en la entrada al momento de entrar y hablar con sus compañeros. Todoroki asintió con su cabeza al igual que Shoji al fondo levantar su mano en señal de saludó, a lo que el argentino haría un movimiento con su pulgar y meñique estirado.


—Buenos días Todoroki-san


—Buen día— Respondió de manera neutral, el pudo ver como Shoji hacia su mismo movimiento, causándole una pequeña risa.


Bakugo a su lado izquierdo le dio una mirada furiosa antes de mirar a la entrada cuando la puerta se abrió.


—Muy bien, cálmate— Todos en la clase dejaron de hablar cuando vieron a Aizawa entrar al salón de clases.


 —Buen trabajo en el combate de entrenamiento ayer— su mirada se dirigió al lado de la habitación donde se encontraba Ryu.


—Bakugo— Ryu vio que el rubio se animaba y volvió a ver a su maestro.



—Eres talentoso, asi que no actúes como un niño— sermoneó Shota al chico explosivo, pudiendo Ryu escuchar la frustración liberada en un suspiro de Bakugo mientras miraba abajo.



—Lo se— Respondió con molestia.


—Y Midoriya al parecer te las arreglaste para terminar con otro brazo roto— Se animó Izuku, y aunque Ryu no podía verlo sabia que por su lenguaje corporal demasiado obvio que el peliverde no estaba contento.



—No puedes decir... que no hay nada que puedas hacer porque no controlas tu peculiaridad. Hay mucho que debes hacer. Siente el sentido de urgencia, Midoriya— Finalizó Shota.



—¡Bien!— Respondió Izuku emocionado. Ryu sintió los ojos sobre él al igual que Mineta y Yaoyorozu.


—Moretti y los otros dos que conformaban el equipo C, obtuvieron las mejores calificaciones, aunque si tuviera que criticarlos sugeriría que trataran de mantener el daño mínimo la próxima vez. Pero dadas a sus oponentes y sus habilidades con el entorno en el que se encontraban, era necesario. Asi que no voy hablar más del tema, buen trabaja y comunicación entre sí y formulando un plan para contrarrestar y confundir a los oponentes.


—Gracias sensei— dijo Momo con una reverencia.


—Gracias, ciruja— pero rápidamente se tapo la boca.


—¿Qué fue lo que dijiste?— Preguntó Aizawa con su ceño fruncido.


—G-Gracias sensei— tartamudeo nervioso, el comentario se le había escapado sin querer.



—Entiendo...— murmuró lo ultimo entrecerrando sus ojos al argentino que solo silbo nervioso haciéndose el boludo.


—Ahora, empecemos esto— Se dirigió esta vez a todos sus alumnos.


—Lamento decirlo tarde, pero hoy, ustedes— hizo una pausa antes de continuar al ver las reacciones de todos.




—¡¿Otra prueba especial?!— Se animaron todos al tener el mismo pensamiento



—Decidirán un representante de la clase— Hubo un enorme suspiro de alivio entre los estudiantes. ¡Por fin cosas normales del colegio!


—¡Yo quiero ser el representante de clase! ¡Elíjanme!— Gritó eufórico Eijirou levantando una mano al igual que su voz.



—Esto llevará tiempo— Pensó Ryu mientras se ponía sus auriculares y se ponía a ver vídeos, ignorando todo a su alrededor, pudo ver de reojo como Jirou Kyouka levantaba la mano al igual que Mina y Aoyama, incluso Bakugo.