I need you, asshole [Mona x Scaramouche] | Val

26 | Dominancia

⚠️ ADVERTENCIA ⚠️

Este capítulo tiene contenido +18/lemmon. Si este tipo de contenido no es de tu agrado, avanza al siguiente capítulo

~ • ~

     • Mona pov's •

VII. Sentimientos tóxicos.

     Odio que toquen lo que es mío.

     Desde pequeña he odiado a esas personas que llegan y se quedan con o usan las cosas que me pertenecen por derecho. Más de una vez llegué a tener problemas con compañeros de clase porque me tomaban cosas del escritorio sin pedirme permiso, y si bien Amy aprendió a respetar mis normas muy rápido, hoy por hoy me sigue hirviendo la sangre cuando me toma algo del bolso porque a ella se le olvidó.

     Sé que no es algo sano. El codiciar lo que es tuyo al punto de no querer compartirlo con nadie no es algo que esté bien a nivel psicológico, y yo misma se lo he echado en cara a Faruzan, que se vuelve insoportable tan pronto como alguna chica del grupo toca su computadora o intenta tomarle el celular, pero aún así, me da igual, porque lo que me pertenece solo me pertenece a mí y a nadie más.

     Pero hasta ahora jamás había experimentado el yo ser tratada como un objeto.

     Puedo entender las razones del porqué Scaramouche se puso celoso y armó el escándalo cuando me vió hablando con Albedo, pero, ¿Quién diablos se cree que es? Que mi conversación con el rubio haya acabado en un malentendido es culpa del idiota al que tengo por novio por no conocerme lo suficiente ni por saber mantener la compostura ante algo que, por lógica, no entiende. Si tan solo no hubiera actuado de esa forma tan prepotente, como si yo le perteneciera, quizá ahora no estaríamos en esta situación.

     Si tan solo Scaramouche no fuese una persona tan impulsiva, quizá hace tiempo me habría empezado a tomar más confianzas con él y hasta le habría ayudado a prepararse para presentarse ante mi abuela.

     Si tan solo él fuese más sumiso y entendiera verdaderamente como soy, quizá no tendría esa cara de sorprendido que tiene ahora.

     Si tan solo este idiota entendiera que aquí él es el objeto y yo la dueña, las cosas serían más fáciles para los dos.

     — ¿M-Mona? — él tragó saliva.

     Tras hablar un rato y dejarle en claro que todo ese mal rato que había pasado había sido completamente su culpa, Scaramouche se disculpó y dijo que me lo iba a compensar en los días venideros, pero, antes de que él pudiera sugerir cualquier cosa, yo lo arrastré hasta mi habitación e hice que se sentara en mi cama, mientras que yo aprovechaba de sacar una bolsa que hace no mucho tiempo había llegado; en un día como este, en donde tenía la casa para mí sola y podía dejar salir mis fantasías sin control alguno.

    Siempre he sentido curiosidad por los juegos de rol. El día que tuvimos nuestra primera vez no atreví a mencionar el catálogo de disfraces eróticos que había en la página del hotel, porque en aquel momento solo quería obligarme a entender que él era mi amigo y que lo quería a pesar de todo lo que había pasado.

     Pero ahora las cosas son distintas y yo misma he crecido como persona, al punto en que no me avergüenzo al mostrarle a Scaramouche la cantidad de juguetes sexuales que compré para mí y para él; jueguetes que me ayudarán a lograr mi cometido de hacerle entender que él es mío, que me pertenece y que no puede mirarme por encima del hombro.

     — Dijiste que me ibas a dar una compensación por haberte portado así, ¿Cierto? Bueno, te estoy ahorrando el trabajo de pensar — sonreí, mientras tomaba uno de los objetos y me paraba frente al chico —. Hace tiempo te dije que si no te comportabas te iba a poner una correa.