Dos Mundos Wolfrahan ©

Capítulo 2

Heron

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Mientras corro a toda velocidad, alejándome de aquel lugar, maldigo entre dientes por haber desperdiciado aquella oportunidad única que se me había presenciado.

Esa maldita manada de lobos salvajes habían arruinado todo mi plan... habían llegado a defender su loba clase X para que Aramis siguiera aprovechándose de su sangre y fortaleciéndose.

Katrina resultó ser más fuerte de lo que imaginé, aunque puedo admitir; que con solo unos cuantos segundos más con aquella loba bajo el filo de mi navaja... la historia hubiera sido completamente diferente.

¿Cómo supieron que Katrina corría peligro?

¿Es que acaso todos velan los unos por los otros?

Sabía que a los lobos siempre les gusta ir en manada y en compañía. Pero no pensé que tuviera tantos lobos juntos como los tenía esta chica.

¿Cuántos lobos aparecieron en un pardapear?

¿Cinco o seis?

Ya ni lo puedo recordar.

¡Mierda!

Estuve tan cerca de lograr mi cometido. De comenzar a poner en marcha mi venganza hacia la bruja de Aramis; y el primer paso era manchar mis manos con la sangre de esta tal Katrina.

Llegando hasta el bosque que rodea aquel pueblo en donde están los lobos, me paro en un llano entretanto subo mis manos hasta mi cabeza y halo de mis cabellos; despeinándolos.

¡Malditos lobos y maldita Katrina!

¡Maldita Aramis y todos los de su clase!

Siempre igual, siempre tan....

Pego un grito de coraje al recordar lo cerca que estuve de cortarle la garganta.

Lanzo un puñetazo a un árbol que tengo a mi lado y le pego justo en el tronco; provocando que este se parta en dos y prontamente caiga al suelo.

Tenso mi mandíbula muy fuerte entretanto mi mente solo daba vueltas en cómo resolver esto. Debía hacer algo para encontrarla de nuevo... hallar otra oportunidad en la cual no estuvieran esos de su manada y así yo poderla emboscar.

Sí, eso haría.

Seguiría sus pasos muy de cerca, y cuando estuviera distraída; y toda esta tensión se les pasase y lo olvidasen... ahí sería cuando yo atacaría nuevamente.

Pienso en las palabras que me dijo cuando la tenía arrinconada contra la pared. Que su intención nunca fue ayudar a Aramis.

Pero, obviamente no le creía ni una sola de sus palabras.

Quizás lo dijo por zafarse de la situación. Por salvar su pellejo haciéndose pasar por la víctima y hacerme pensar que está de mi lado. 

Incluso, me dijo que la odiaba.

Río por lo bajo al recordar aquellas palabras.

¿Por qué ella la odiaría?

Si al fin y al cabo ella era de su clase, era una loba, y no solo eso... una loba clase X como lo es ella misma.

No lo sé, pero aunque así fuera; su mera presencia ponía en peligro todo para mi gente, para Lontar.

Si Aramis se hacía con su sangre, ya sea por voluntad propia o Katrina siendo obligada, esto haría que la estúpida loba se haga más fuerte. Y consecuentemente, más difícil para mí o cualquier vampiro acabar con ella.