capitulo 34

7.3K 484 16
                                    

Pov christian.

Los rayos del sol golpean mi rostro, no quiero despertar, de verdad esta cama es cómoda, no se si sera el colchón o porque tiene impregnado el olor a Ana,  me giro para sentir su cuerpo, pero no esta, la cama esta vacía en su lado, me desperezo y veo la habitación inundada con la ratos de una linda mañana.

Voy a la sala y veo que no está en ningún lugar del pequeño departamento,  voy al cuarto y marco su numero,  no contesta, comienzo a desesperar, como ha salido sola por Boston?, me voy a la ducha antes que mi preocupación aumente, me doy un baño corto, al salir escucho ruidos en la sala, salgo y la veo entrar a la cocina con Muchas bolsas.

Ella tiene puesto sus audífonos,  no escucha que estoy cerca, mientras ordena las compras, comienza a bailar, siempre me ha gustado verla bailar, aunque sea unos movimientos descordinados,  la tomó por la cintura y ella se exalta.

- lo siento, no quería asustar.
- no lo haces sólo pensé que dormías.
- donde estabas?
- fui de compras, cuando me levante nada de lo que había estaba comestible, así que lo tire y fui por comida.
- me ubieras despertado para ir contigo.
- no queríaparecías muy plácido durmiendo.
-entonces, que harás de desayunar?- le doy un casto beso en la cabeza y una palmada en el trasero- mujer quiero comer ahora!!.

Me alejo antes que pueda alcanzar un sarten en mi cabeza, llego riendo a la habitación,  jamás me cansaré de estos juegos con Ana,  me visto rápido a los picos minutos voy a la cocina con la esperanza que este mi desayuno sobre la mesa, pero no encuentro nada, ni comida, ni a Ana.  De pronto me llama, vuelvo a la habitación y la veo con su bata blanca.

- yo también tengo hambre pero de esto.

Deja caer su bata y queda completamente desnuda, ella se acerca, me besa con pasión  y lujuria,  ajo con mi boca hasta sus pechos,  mis manos recorren su espalda hasta su trasero, la levanto y la dejo caer suavemente sobre la cama, mis manos siguen su recorrido hasta su sexo, meto dos dedos en su interior,  Dios siempre tan húmeda.

- christian,  te necesitoahora, dentro de mi. Aaaaaahh.

Esas palabras son mágicas para mi, me saco toda la ropa rápidamente,  y me hundo en su interior,  de haber sabido que el embarazo la ponía así de ardiente no habría reaccionado mal con ted, es mas del momento que le quite la virginidad debí dejarla embarazada.

Introduzco mi miembro despacio, quiero disfrutar cada momento, quiero hacerlo despacio, para poder contemplar cada espacio de su interior,  amo a esta mujer demasiado.

- christian más rápido,  me estas matando, es una tortura,  rápido! !!

-que mandona tu has vuelto, pero estamos para complacer- susurro en su oído.

Embisto cada vez más rápido,  oh Dios esto es demasiado placentero, siento que su interior se contrae más,  esta a punto de llegar.

- vamos nena, correte para mi.

Doy dos embestidas más y nos corremos juntos, mi respiración se regulariza un poco, en el pecho de mi amada, nuestro corazones laten en sincronía,  miro sus ojos y tienen ese brillo especial en sus azul color, eso es por mi, solo yo hago que esta mujer se sienta de esa manera, de pronto recuerdo a nuestro bebé.

- nena estas bien?

-de maravilla

-el bebé está bien.

- lo tengo bien protegido señor grey, bueno hasta unos meses mas.- sonríe. - sabes algo, me dio hambre, y no precisamente de eso- hace un gesto apuntando mi flácido miembro que cobra vida cuando sus ojos se clavan en él- quiero comida.

Pov anastasia.

Estoy lavando la vajilla sucia del desayuno, christian esta metido en su laptor,  quizás viendo como van las cosas en seattle,  ha estado alejado de su empresa por mucho tiempo después de las hermosas vacaciones en familia y por venir a dejar a teddy a Boston,  sonrió al recordar mi insaciable apetito por tenerlo dentro de mi, cada vez me siento más deseosa de tenerlo, no se si sera algo normal, porque con teddy me pase todo el embarazo llorando por no estar cerca de él.  De pronto suena mi teléfono, veo que es mi pequeño,  Dios sólo hemos separado sólo un par de horas y ya me extraña,  como sera el resto del año,  al parecer christian tendrá que dejar el Jet,  solo a disposición de teddy para que nos viste y viceversa.

- Hola mi pequeño.
- Hola mamánecesito hablar con papá
-entonces ahora estoy siendo desterrada, ya no me quieres?
-no mamá no es eso, solo es que ocurrió algo necesito hablar con él por algo del departamento.

Se que miente.

- cariño que ocurre, recuerda que soy tu madre y te conozco más que nadie.
-lo se mamá,  pero porfavor pone a papa en el teléfono,  y después de hablar con él vienen para acá ok?
-ok hijo.

Le paso el teléfono a christian, se que algo va mal.

- nuestro hijo quiere hablar contigo.

Él frunce el ceño, yo solo me encojo de hombros.

- dime ted.

- ok, pondré a welch a trabajar en eso, iremos de inmediato para que me des información.

-ok, allá hablamos.

Cuelga, lo miro con rostro de dime que pasa.

- le llego una carta a ted, tendremos que aumentar su vigilancia.

- por Dios christian,  vamos ahora, si es posible que estudie a distancia, no quiero que nada le pase a mi pequeño.

- nada ocurrirá si es así opino lo mismo, estudiará a distancia.

Salimos de la casa con la esperanza que lo éste escrito en esa carta no sea del todo malo.

mi propia sombraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora