Volver a amar

Capítulo 8

Dos semanas más tarde

Me encontraba en la sala de espera del consultorio, hoy tocaba mi sesión de los viernes. Como siempre Charles salía de su sesión 16:50hs y nos quedaban diez minutos para charlar antes de que ingrese con la doctora Martínez.

− Entonces, ¿en serio te pidieron que hagas los planos de un edificio de treinta pisos?

− Si, pero claro que no trabajo sola, sería una locura, sino que con Isabel que ya la conoces y más personas.

− Que extraño, en el Instituto creí que Isabel terminaría viviendo bajo un puente... Y resulta que es arquitecta, sí que me cerró el hocico− dice entre risas provocándome una carcajada. El odio es mutuo por parte de mi amiga.

− No seas así, es la mejor que conozco. ¿Carl te cubrió hoy?

− ¡Carajo!, debo irme hoy Carl me dijo que tendría que quedarse estudiando y que no podría cubrirme. Supongo que nos veremos el próximo martes Cass.

− Sí. El próximo martes nos veremos. Adiós Charles.

Siempre que me llamaba Cass sentía esas cosquillas en el estómago que provocaban que me tiemble la voz. Asiente con una sonrisa mientras se pone de pie y lo veo marcharse. Me sorprendo cuando se frena en seco y gira sobre sus tobillos para mirarme directo a los ojos.

− ¿Sabes? Creo que una arquitecta tan talentosa y inteligente como tú podría ser de buena ayuda para Carl que estudia ingeniería...−comienza a decir acariciando su mentón pensativo− ¿te gustaría venir a mi departamento a ayudarlo en su...?

− Sería un honor − respondo antes de que termine su pregunta, como si hubiese estado esperando el día que nos veamos fuera de este consultorio...Contrólate.

− Entonces te escribo y nos vemos más tarde.

Asiento y en ese momento oigo que la psicóloga me llama para ingresar a mi sesión. Me despido de él y me aproximo a la doctora.

− Te veo muy feliz− es lo primero que me dice una vez que nos saludamos. Intento disimular mi sonrisa constante.

− Es que ayudaré al hermano de...− me auto interrumpo− un amigo.

− Con la duda sobre como definir tu vínculo con esa persona me estás diciendo muchas cosas.

Frunzo el ceño confundida. Primero tengo que trabajar en mi ansiedad y en superar mis traumas con Scott, luego habrá mas sesiones para hablar sobre qué hacer para que el miedo a volver a sufrir no sea más fuerte que las cosas que me están pasando con Charles y por fin intentar estar con él. Por todo lo que me pasó estoy en mi derecho a ser egoísta, ¿no?

− Es que... es complicado. Mejor hablemos de otra cosa si no le molesta.

− Okey, todo a su debido tiempo, ¿como has estado con las pastillas?

Gracias a Dios el día que casi me vuelvo a cruzar con mi ex me contuve con respecto a tomar más de una dosis de mis pastillas, quizás haya ayudado el hecho de que ese día más temprano haya tomado mi dosis diaria. Las cosas iban bastante bien desde entonces, iba al trabajo, llegaba a casa y salía a pasear con Manchas y Mackenzie, otros días con Juliette y Isabel, comencé el gimnasio tres veces por semana gracias a el consejo de la doctora de realizar un deporte que me permitiera descargar energías para sentirme mejor, y bueno también iba a terapia que para mi sorpresa se volvieron mis días favoritos de la semana... todavía quiero descifrar si es por los consejos de la doctora o por mis diez minutos con Charles que siempre parecen tan poco tiempo hablando con él.

Al salir de la sesión me dirijo a casa esperando el mensaje de Charles para ir a ayudar a su hermano. Aproveche para organizar los planos y documentos de mi oficina para pasar el tiempo y a dejarle comida y cambiarle el agua a mi mascota. El reloj de la cocina marcó las 18:30 cuando mi móvil vibró.