Una gigantografía y algunas letras
un rostro fijo en algunas fotos,
mi mejor venganza,
quitarte la inmortalidad que me pediste.
Como llegaste, ahora te vas
que no te agrade
que en tu risa irónica, te vas.
S D-1, P451 es tu dirección
"justo allí donde todo se detuvo,
en ese preciso instante miré
y no vi una sola cosa alrededor
más que el hedor
y podredumbre de la muerte".
Nunca te despedí aquí
es la clase de tributo que no mereciste
tuviste razón, siempre la tuviste,
era mejor taconear los cuadros
quemar todas las letras
era mejor que darte inmortalidad,
tu no estás en Venus,
no esperas nada, no buscas nada
el conteo de las mariposas
ni el agua donde lanzaste el pañuelo.
Cuando jugamos con el verde
yo maquillaba tus labios
simulacro de una despedida
que felizmente, tampoco te di.
Te escribo hoy
sólo para saldar las cuentas contigo,
no me debes, no te debo,
si hablamos de suertes
resultamos tener mucha,
tu por tus caminos, yo por los míos.
"Para mí es necesario morir
para que tu puedas seguir viviendo"
así te fuiste, así se diluyó tu perfume
que no llegó a mi ventana más
tenías razón, te lo agradecería,
te lo agradezco.
Contigo aquí me habría perdido la vida.
Dalí del Exilio
ESTÁS LEYENDO
El habitante
PoetryColección de poesía con una mezcla de romanticismo, oscuridad, pasión y melancolía, algunos matices alegres se escapan, todo depende del habitante que ese día esté presente en mi mente llena de habitaciones, muchas de ellas, inexploradas. El habitan...