25. Dentro de poco.

54 5 0
                                    

Noah

Lamentablemente los días a solas con Amelia se habían acabado. Era momento de regresar a la cabaña.

De camino a la misma decidimos pararnos en un supermercado para hacer algunas compras.

—Mirando el lado bueno, ya tenemos un lugar a dónde venir cuando queramos estar solo tu y yo.—Le respondí a Amelia, me estaba diciendo lo mucho que iba extrañar estar en mi casa.

Agarramos un carrito de supermercado y nos adentramos a la tienda.

Mientras recorríamos los pasillos, recogiendo algunas cosas, no pude evitar sentir una sensación de domesticidad invadiéndome.

Esto era lo que hacían las parejas normales: iban juntos de compras.

Una extraña emoción me recorrió ante la idea de ser una pareja  "normal" para Amelia. Estaba feliz de sentir que Amelia ya no me miraba como su secuestrador y ahora éramos una feliz pareja.

Ella me había dicho "Te quiero" y aunque aún no era un te amo, revoluciono mi mundo, estaba seguro que dentro de poco ese "te quiero" se convertiria en un "te amo".

Mi corazón se disparó al escuchar esas palabras, las que había anhelado escuchar durante tanto tiempo, resonaron en mi mente.

"Te quiero", me había dicho, con la voz temblorosa de emoción. Había puesto mi corazón en conquistarla después de hacerle tanto daño secuestrandola y, finalmente, había valido la pena.

Aún recuerdo cómo mis brazos se apretaron alrededor de Amelia, abrazándola mientras devoraba mi boca con la suya.

Cuando finalmente nos separamos para tomar aire, la mire a los ojos y ví la verdad de sus sentimientos reflejada en mi.

—No tienes idea de lo mucho que eso significa para mí.—dije en voz baja, con la voz llena de emoción. —Pensé que nunca te escucharía decir eso.— pase los dedos por su cabello, sin apartar mis ojos de los de ella.—Yo te amo, Amelia. Más que nada, y se que dentro de poco, tu te quiero será un te amo.—Me incline para besarla de nuevo, vertiendo todo mi amor y pasión en la caricia.

Le mostre sin palabras lo mucho que ella significaba para mi, cuánto su amor lo había cambiado todo. En ese momento, supe que nuestro futuro era brillante. Habíamos enfrentado obstáculos y desafíos, pero los habíamos superado juntos. Y mientras nos tuvieramos el uno al otro, sabía que podríamos superar cualquier tormenta.

Charlabamos y bromeábamos mientras comprabamos, mirándonos de vez en cuando. Me encontré a Amelia sonriendo más que en meses. Quizás todo este asunto de la relación no sería tan malo después de todo.

Gire el carrito junto al de Amelia, escuchándola charlar alegremente mientras recorríamos los pasillos. Me encantaba verla así, despreocupada y sonriente. Me hizo sentirme agradecido de tenerla a mi lado.

Mientras comprabamos, no pude evitar notar con qué naturalidad encajabamos. Era como si estuviéramos en una relación desde hacía años, no meses.

Me reí para mí mismo, sintiendo una sensación de satisfacción invadirme. Tal vez fuera una locura todo lo que hice para llamarla "mía", Pero no importaba, sabía que Amelia era diferente.

Ella me hizo sentir vivo de nuevo, después de tantos años de dolor y tristeza.

Ella se acercó y apretó mi mano, dándome una cálida sonrisa.

—Sabes, nunca pensé que estaría haciendo algo tan normal como ir de compras con mi novio, pero... realmente me gusta esto.—Admitió, con los ojos brillando de emoción. Mi rostro se suavizó ante sus palabras, mi corazón se hinchó de amor y afecto.

—Voy al área de farmacia.—Le informe con una sonrisa.

—¿Para? ¿Te sientes mal?— me cuestionó preocupada.

—Voy a comprar condones.— le susurré con voz sensual en el oído— una vez que ya te probé no pienso soltarte nunca más.

Ella me dió una risa tímida y yo le pedí que se fuera formando en la caja.

Seguí mi paso dejando a Amelia cerca de la caja, llegué a la farmacia agarrando unos condones. Tenía tiempo que no tenía relaciones sexuales con nadie, pero ahora que había tenido a Amelia me había hecho adicto a ella y no pensaba soltarla. Le haría el amor, día y noche, sin parar.

Regrese a el lugar en dónde había dejado a Amelia solo para darme cuenta que no estaba ahí, no estaba en ninguna de las cajas. El miedo me invadió.

No la hallaba por ningún lugar, hasta que finalmente la encontré, cerca de la entrada, hablando con un policía.

Mi corazón empezó a latir con velocidad, el terror se empezó a apoderar de mí cuando ví a Amelia hablando con un policia, sentia como todo mi mundo estaba apunto de destruirse ¿Amelia le estaba contando a el policía que ella era la chica que habían estado buscando por tantos meses?

Sabía que Amelia odiaba estar secuestrada, pero ella me quería ¿No? No sería capaz de dejarme... También sabía que estaba mal tener a Amelia mediante esos recursos, pero ya me había enamorado de ella y sabía que dejarla ir me dolería en el puto corazón como nunca, no quería separarme de ella, de mi sol.

Me acerque corriendo, con la preocupación grabada en mi rostro mientras me acercaba a Amelia.

—¿Está todo bien?— pregunté con voz temblorosa. —El guardia parece preocupado...— Amelia puso una mano tranquilizadora en mi brazo.

—Sí, todo está bien. Sólo le estaba preguntando al oficial dónde está el baño de mujeres.—Exhale, sintiendo una oleada de alivio invadirme.

Mi secreto todavía estaba a salvo... por ahora.

El oficial asintió cortésmente.

—Está por ahí, señorita. A su izquierda— Dió media vuelta y siguió con su camino continuando su ronda. Me volvi hacia Amelia y mi expresión se suavizó.

—Lo siento. Supongo que estoy un poco paranoico.—Amelia sonrió y me apretó la mano.

—ohh.—dijo algo incómoda— no dejemos que eso arruine nuestro día, ¿de acuerdo?

Juntos terminamos las compras, y yo di por olvidado el incómodo momento.

FAVORITE CRIME

Cinco capitulos para acabar el libro :(

¿Cómo creen que sea el final? ¿Amelia y Noah terminarán juntos?

No sé olviden votar 💕

FAVORITE CRIME Donde viven las historias. Descúbrelo ahora