Una semana había pasado desde el ataque fallido, la mayoría de las heridas de Kai habían sanado en su totalidad, pero luego de la baja de sus hombres, muchos omegas marcados comenzaron a morir por los lazos rotos y también los cachorros comenzaron a sufrir, su manada estaba en una decadencia que nunca antes se había visto, eso lo puso aún más furioso de lo que ya estaba, por suerte para él Toya ese día llevaría al hechicero Shigaraki ante él.
-Señor – llamo el rubio en la puerta del despacho de su líder – llegó el hechicero Tomura Shigaraki
-Hazlo pasar Toya y déjanos solos – ordenó con voz plana el alfa castaño
-Como ordene – Toya se hizo a un lado para el que Tomura Shigaraki entrara al despacho
El recién llegado tenía una apariencia inquietante, por su físico se podría decir que era un Alfa, pero había algo en él que no parecía tener subgénero, su cabello blanco y desordenado contrastaba con su piel pálida, sus ojos rojos brillaban con una intensidad sobrenatural, sus ropas eran en tonalidades rojas y negras, así mismo llevaba una capa que parecía hecha de sombras, se movía como si tuviera vida propia.
-Kai Chizaki - saludó Shigaraki con una voz ronca y arrastrada, sus labios curvándose en una sonrisa desquiciada. - He oído que necesitas mis servicios.
Kai asintió, con sus ojos evaluando al sujeto frente a él – Si, necesito tu ayuda para recuperar aquello que me arrebataron, mi manada está en ruinas y quiero venganza, quiero recuperar lo que es mío.
Shigaraki soltó una risa que resonó en el lugar causando que incluso Chizaki sintiera escalofríos, pero no lo iba a demostrar – La venganza es un plato que se sirve mejor frio Chizaki, ¿estás seguro de que deseas continuar? – ronroneo pues ese tipo de asuntos realmente lo beneficiaba mucho a él como hechicero.
Kai, saco del cajón el libro de Inko Midoriya, cuando Shigaraki observo el objeto entre las manos de Chizaki quedo sorprendido por la magia que pura que emanaba el objeto – Este libro contenía el tesoro más grande los lobos blancos, un collar que jamás encontré, pero con él puedo controlar al omega estelar, yo soy el ultimo miembro de los lobos negros por ende ese omega me pertenece, quiero que recrees ese collar y e inyectes tu magia oscura en este libro para así poder controlar al omega y hacerlo aparecer ante mi presencia.
Shigaraki tomó el libro de Inko entre sus manos, sus pálidos dedos acariciaban casi con veneración las páginas del libro, la energía que emanaba del objeto era increíble, un poder mezclado con la pureza misma de la luna.
-Este libro... es un artefacto de gran poder, la energía que contiene es muy antigua y poderosa, recrear el collar no será fácil, pero no es imposible, con la inyección de mi magia, obtendrás lo que deseas, el poder absoluto sobre el omega estelar.
Kai asintió, con una sonrisa triunfante. - No me importa cuánto tiempo tome o el costo. Quiero a ese omega bajo mi poder y mi venganza cumplida. ¿Qué necesitas para comenzar?
Shigaraki sonrió, una expresión de pura malicia que revelaba su emoción por el desafío. - Necesitaré materiales específicos y un lugar adecuado para realizar el ritual. Este tipo de magia no es algo que se pueda hacer en cualquier sitio. Pero en un par de horas obtendrás lo que deseas – comentó el hechicero – Pero antes, quiero asegurarme, el costo es muy elevado, ¿estás dispuesto a pagarlo aun y cuando lo sabrás llegado el momento?
- Estoy dispuesto a pagar cualquier precio para lograr mi venganza, haz lo que sea necesario para cumplir con este ritual.
Shigaraki lo observó por un momento, evaluando la determinación en sus ojos. - Muy bien, haré los preparativos, pero ten en cuenta, Kai Chizaki, que la magia oscura siempre cobra su precio, y no siempre es lo que uno espera
Con esas palabras, Shigaraki se retiró, dejando a Kai solo en su despacho sonriendo porque por fin obtendrá lo que tanto desea.
Esa misma noche, cuando la oscuridad cernía sobre la manada de Chizaki el hechicero comenzó a dibujar algunas runas antiguas, coloco velas y otros objetos malditos, en el centro coloco el libro.
Comenzó a recitar algo en una extraña lengua, su voz resonaba como si estuvieran en un lugar cerrado, el aire alrededor de ellos comenzó a soplar con fuerza y en un momento a otro varios curiosos cerca del lugar del hechizos cayeron sin vida, sus almas fueron tomadas como parte del hechizo, eso no le importo al Alfa solo deseaba el poder para obtener al omega.
Un fuerte rugido se escuchó haciendo vibrar todo el lugar, las velas se apagaron y el cielo lleno de estrellas se oscureció por completo, se sentía algo extraño en el ambiente como si un ser siniestro caminara entre ellos y se dirigía hasta el libro, y un destello rojo apareció sobre el libro, formando un collar de un lobo negro aullando con unas piedras rojas en los ojos del mismo
Shigaraki tomó el collar en sus manos con reverencia, el objeto vibraba en su interior por la carga de magia oscura, todo regreso a la normalidad entonces, el cielo se despejo, las velas se encendieron y los sonidos normales del bosque se volvieron a escuchar.
El hechicero le entrego el collar a Kai, los ojos del líder brillaban con demencia, sabía que ahora nada podría detenerlo, era el primer paso para la venganza, una vez que el omega estuviera entre sus brazos lo marcaria y seguiría controlándolo a su antojo.
-Este collar, es la clave para controlar al omega, úsalo con cuidado Chizaki – advirtió el hechicero – Si el omega esta vulnerable puedes obligarlo por medio del collar a teletransportarlo, de lo contrario tendrás que buscar la manera de acercarte un poco a él, lo suficiente para que sienta el poder del collar, y lo único que debes hacer es ponérselo en su cuello, eso te dará el poder absoluto sobre él, pero si
-¿Y si qué? - Preguntó Kai, impaciente por los detalles.
Shigaraki lo miró con una sonrisa enigmática. - Si el collar es destruido o removido por alguien que posea un poder superior al tuyo, el omega se liberará y la magia oscura se revertirá contra ti. Así que asegúrate de mantenerlo seguro y bien protegido.
Kai asintió, la determinación brillando en sus ojos. - Lo haré. No permitiré que nada ni nadie se interponga en mi camino.
Shigaraki se retiró después de eso, pero no le dijo que clase de poder superior al suyo podría destruirlo, así que cuando lo descubra será demasiado tarde, el hechicero descubrió la conexión del omega estelar con su Alfa y sabía perfectamente que ellos eran la caída del Alfa, pero él no se metería en detalles banales, él otorgo lo que se le solicito.
Esa noche, mientras Izuku dormía en los brazos de su Alfa comenzó a tener pesadillas, un enorme lobo negro intentaba atraparlo el lobo se acercaba muy rápido a él, y sus ojos brillaban con malicia, entonces tropezó con algo, el miedo lo paralizó estaba a punto de ser atacado por el enorme lobo.
De repente, una luz cálida y brillante apareció a su alrededor, alejando al lobo. Izuku sintió una presencia que reconocía, aunque tenía mucho de no verlos
-Hijo mio – la voz cariñosa de su madre se escuchó – no dejes que la oscuridad te consuma, recuerda siempre que hay personas que te aman, nosotros te amamos mi niño.
Izuku se despertó de golpe, su respiración estaba muy acelerada le faltaba el aire y su corazón latía con fuerza, Katsuki despertó al sentir el miedo del omega a través del lazo, y lo abrazo con fuerza dejando salir su aroma para tranquilizarlo.
-¿Qué pasó, Zuzu? —preguntó Katsuki, sus ojos miraban a su omega con preocupación.
- Tuve una pesadilla... - Izuku susurró, aferrándose a su alfa -. Vi a un lobo negro que intentaba atraparme, pero luego una luz me protegió. Y escuché la voz de mi madre... Me dijo que no dejara que la oscuridad me consumiera.
Katsuki frunció el ceño, acariciando suavemente el cabello de Izuku para calmarlo.
-Tranquilo Zuzu estás conmigo ahora, no dejare que nada te pase, solo fue un sueño – le hablo para tranquilizarlo, pero algo dentro de Katsuki le decía que esto solo era el inicio de algo mayor.
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Y si ahora viene la parte complicada para todos, ¿Katsuki podrá proteger a su omega? O ¿Chizaki saldrá victorioso?
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El ultimo lobo blanco (Bakudeku)
Short StoryKatsuki es un hibrido de lobo que por azares del destino siempre tenia un sueño, su omega aunque no lo conocia aun, solo soñaba con un par de esmeraldas como si de un bosque profundo se tratase, en su cumpleaños su omega aparece no de la mejor forma...