LA PROFECÍA DEL REMOLINO|| ❝Ella es hermosa, pero dañina. Tal y como una rosa, Sasuke sabía perfectamente eso, pero ella era su alegria.❞
✄┈┈┈┈┈┈┈┈┈┈┈┈┈┈┈
┏━━━━━━━━━━━━━━┓
SASUKE UCHIHA
┗━━━━━━━━━━━━━━┛
➤「FANFICTION」
➪BASADO; en el anime "Nar...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
❝Mi único consuelo. Quien se lleva mis preocupaciones. Si no eres tú, entonces...jamás quiero entender.❞
En ese preciso instante en el que volví a ser abrazada, desee poder vivir envuelta en la comodidad que sus brazos me hacían sentir; ligeras caricias en mi cabello, me provocaron cosquilleo.
—...Akane—pronunció mi nombre, y podía jurar que su grave voz, podría quebrarse en cualquier instante—.
—Estoy bie-...—no pude decir más, ante su repentino tacto en mi rostro. El cual tomo entre sus temblorosas manos, y elevó con delicadeza—.
—Él te hizo esto—afirmó. Visualizando la venda que cubría mi herida, el cubrió su rostro volviendo a ocultarse en mi hombro—. I-Itachi, él...él...—su respiración comenzó a oírse cada vez más acelerada—.
—Sasuke—lo llame, pero fue inútil; estaba sumido en su impotencia—. De verdad, no importa Sasuke.
—¿Cómo puedes decir eso?—elevó su rostro, dejándome ver su afligida expresión—. Yo...no pude...-
—Sasuke—insistí colocando mi mano sobre la suya, que estaba en mi mejilla—.
—Debiste escapar...debiste...—cabizbajo, sus lágrimas comenzaron a caer al suelo—. ¿Por qué siempre tienes que salvarlo?
—...
Ninguno dijo más. Fue en silencio que el vio mi venda caer, eso hizo que se alarmara. Cerrando sus ojos con fuerza, por un instante se rehusó a levantar la cabeza.
—...Sasuke.
Mordiendo sus labios, ante mi llamado, el elevó la mirada. Sus profundos ojos negros llenos de angustia, observaron la herida. Su reacción fue cerrar sus ojos con fuerza, y fruncir su entreceja, negando en el proceso; no quería creerlo, y sin embargo le tomo segundos devolver su mirada hacia mí, con absoluta suavidad, en ella vi reflejado su incondicional cariño.
—¿Escapar?—pregunté guiando su mano mi herida, prosiguiendo a cerrar mis ojos—. Sabes bien que no lo haría.
—¡¿...?!—su expresión se lleno de confusión, al ver que de entre sus dedos se escapaba una luz rojiza—.
—Lo que hice por él, lo haría por tí...—con preocupación, el fue retirando su mano, hasta posarla por completo en mi mejilla—.
Lentamente comencé a pestañear, para acostumbrarme nuevamente a la luz. Elevando la mirada, fije mis iris grisáceas en él. Sus brillantes orbes oscuras, temblaban ansiosas.
—¿...P-Por que?—se mostró confundido, incrédulo pestañeo varias veces creyendo que su visión estaba jugando con él de manera cruel—.
