Prisionero ~ Minsung.

No. 2 🚨

Está sentado observando la morbosa comida, le dan arcadas de solo verla.

- Sé que es asqueroso, pero tienes que comerlo - Le dice Minho con aquella voz que tanto le encantó y enganchó desde que la escuchó.

- Me da morbo, no hay otra palabra para describirlo - El suspira cansado, hace más de 15 minutos que lo ve mirar la comida con asco.

- A mi también, pero no quiero morir, así que tú también lo harás - Hacen contacto visual, Jisung lo rompe y vuelve a observar con detenimiento el alimento.

Con temor, agarra la cuchara y dirige un poco de arroz y frijol a su boca, al final, logra meterla, sabe horrible, pero no tiene otra más que tragar el alimento.

- Recuerda lo que te dije, por nada del mundo te separes de mí, ¿De acuerdo? - Jisung asiente, todavía asqueado.

El anuncio de que se ha acabado el tiempo de comida resuena por toda la cafetería, ve a todos pararse de sus lugares, él por inercia también lo hace, siente una mano calida sobre su muñeca.

- No me soltarás la mano hasta que lleguemos - Dice con voz firme, él asiente, tímido ante el tacto, Minho avanza hacía la salida, él solo le sigue el paso.

Al cabo de unos minutos llegan al patio, este está repleto de máquinas y pesas, no puede creer que están ahí, en pleno sol.

- Supongo que ahora no te extrañará ver a toda la gente bronceada - Bromea Minho al ver su expresión, Jisungo mira con temor.

- No sé usar nada, además, me quemaré el cuerpo, no me gusta - Lloriquea, el más alto roda los ojos

- Te tendrás que aguantar, tienes suerte de tener manga larga, lo único que te puedes quemar son las manos, la cara, tu nuca... Tu cuello - Aprieta su agarre y se dirige hacia una máquina, al lado hay unas pesas reposando - Aquí no te servirá quejarte, no existe la consideración - Por fin llegan, lo invita a tomar una pesa.

Con duda, Jisung la toma, inmediatamente quita la mano, está quemando.

- Tienes manga larga, cúbrete las manos, es lo único que puedes hacer - Le dice, lo suelta de su agarre y se posiciona en el aparato - Anda, hazlo, si no te ven haciendo algo te van a castigar, créeme que no quieres que eso suceda - Ahora, Jisung se encuentra subiendo la pesa de arriba a abajo.

Solo lo hizo 3 veces, pues siente su brazo doler demasiado, gime de dolor.

- Como se nota que nunca vas al gimnasio - Dice mientras sube una cosa que Jisung no logra distinguir con sus brazos.

"Solo voy a ver a chicos guapos y musculosos hacer ejercicio" Piensa, obviamente no lo dirá en frente de Lee.

- No estoy acostumbrado a esto, normalmente voy a gimnasios 1 vez cada año - Menciona con vergüenza, pasa la pesa a su otra mano, quemándosela.

- Voltéate, ahora - Dice con voz firme, él no entiende la repentina petición, lo mira con curiosidad - Hay cerdos mirándote el trasero - Tiene asco por lo que ve, hay demasiados hombres mirándole los gluteos con descaro, hasta unos se relamen los labios. El recíproco se voltea a una velocidad récord, dejándole la vista únicamente a Lee.

El traga duro, ahora entiende el porqué del acoso. Jisung tiene unos gluteos redondos y grandes, algo que definitivamente no se ve todos los días.

"Le dijiste que se volteara para que dejen de verlo, no para que ahora tú le veas el culo con descaro" Se regaña, trata de apartar la vista, pero es inevitable, ha parado de hacer lo que estaba haciendo, está embobado, unas inmensas ganas te tener aquellas nalgas en sus manos es muy fuerte.