Epílogo

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Daniela y Luz llegaron a la parte trasera de la casa del Presidente, era un lugar con una gran explanada para que un helicóptero pudiera aterrizar. El Presidente iba al lado de Alma, la madre de Daniela, entre ambos agarraban a Marta que estaba forcejeando

-¡Mamá! -gritó Daniela al ver a su madre

-¡Luz! -gritó Marta al ver a su tía

-Tú... -Alma miró a Luz como si se tratara de un fantasma-. Está visto que las ratas son difíciles de matar

-Más de lo que piensas -dijo Luz con voz tranquila mientras avanzaba lentamente hacia el centro, impidiendo que el helicóptero tuviera una zona despejada donde aterrizar

-Tendría que haberte matado personalmente, si tu sangre no fuera tan valiosa... -dijo Alma-, pero no voy a permitir que nos impidas irnos

Alma apuntó con una pistola a Luz, pero ésta no se detuvo

-¡Mamá no lo hagas! -gritó Daniela

-Nunca te ha faltado de nada, te dimos una buena educación..., debiste elegir mejor a tus amistades -dijo Alma a su hija

-¡Lo que estáis haciendo en el sector dos es una injusticia! -se rebeló Daniela

-Eres como tu padre una idealista, siempre pensando que el mundo se puede salvar con buenas obras, a veces hay que hacer sacrificios para que el mundo mejore -dijo Alma. Alzó aún más la pistola al ver que Luz había aprovechado para acercarse-. Ella... ella es la que te ha cambiado tanto, ¿verdad?

-Ella me hizo descubrir... lo equivocada que estaba -asintió Daniela

-La has puesto en mi contra -dijo Alma a Luz

-Eso ha sido mérito completamente tuyo -comentó Luz

Marta se deshizo del agarre y comenzó a alejarse, Luz corrió hacia su sobrina, pero entonces escuchó un disparo, se quedó inmóvil, temiendo lo peor, su sobrina estaba entre sus brazos, la observó, estaba bien, entonces levantó la vista. ¿Quién había disparado? Y lo más importante, ¿a quién?

Entonces lo vio, una melena rubia frente a ella, de pie, con los brazos extendidos protegiéndolas a ella y a su sobrina

-Dani... -Luz apenas tenía voz, le temblaba ante el mal presentimiento, entonces Daniela cayó al suelo-. ¡Daniela!

Luz corrió hacia ella, puso su cabeza en sus piernas, vio el disparo en su abdomen

-¿Por qué? -gritó Luz mirándola

-No podía dejar que te hiriera... -dijo Daniela con un atisbo de voz sin dejar de mirar los ojos de Luz

-¿Estás loca? ¿Cómo pudiste? ¿Por qué arriesgas tu vida por ella? Ella no es nad... -preguntó su madre dejando caer el arma al ver que había disparado a su propia hija

-Ella... es la mujer que amo... a la única persona a la que he amado en toda mi vida... -dijo Daniela en apenas un susurro

-Dani no te duermas... -dijo Luz apretando su herida

-¡Basta ya de tonterías! -gritó el Presidente-. Trae a la niña y vam...

Se escuchó un segundo disparo, Luz atrajo a Marta hacia ella y protegió el cuerpo de su sobrina sobre el de Daniela. Al alzar la vista vio caer al Presidente, su madre era quien había disparado

-No... -gritó Daniela cuando vio que apuntaba a su madre-. No la mates...

-Mamá... por favor... -dijo Luz negando con la cabeza

-¡Daniela! -el Ministro a pesar de estar herido corrió al lado de su hija

-Dilo... -dijo Daniela mirando los ojos de Luz

Me lo juego todoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora