Es totalmente patético, entiendo que bien hay una frase que dice "te das cuenta de lo que tienes hasta que lo pierdes", y así de literal puede ser, pero Cameron no me termina de convencer, ¿cómo es que según el "cambió" de un día para otro? es imposible, por Dios, ¡es Cameron Dallas de quien estamos hablando!
— Recuerden, no quiero a Lucy y a Carter presentes —Taylor habla y esta vez salgo de mis pensamientos para escuchar la conversación de mis amigos alrededor de mi, soy demasiado distraída.
Están hablando sobre la próxima fiesta en casa de Caniff como es costumbre. Aún no logro entender porque Taylor detesta a Carter pero con Cameron lleva la fiesta en paz, es decir, Lucy le puso los cuernos con ambos, no le veo sentido a este asunto. Cameron tampoco debería de estar aquí.
— Totalmente de acuerdo —Ashley responde haciéndose la fría, o más bien, tratando de dar una faceta de niña fuerte, intenta aparentar que no le ha importado lo que sucedió, pero se muy bien que ella es la más afectada de todos.
Nunca he tenido una relación que dure tanto tiempo como lo es un año, pero entiendo como se siente Ashley en estos momentos, que tu novio y tu mejor amiga se enreden a tus espaldas debe ser uno de los peores sentimientos, me sucedió con mi ex del jardín de niños y una de mis mejores amigas que ya ni siquiera recuerdo como se llamaba, no se compara a la gravedad de este asunto, pero al menos tengo una idea de cómo debe sentirse Ashley, hago un intento por ayudarla a sentirse mejor y verle el lado bueno a las cosas, aunque ahora no se cual es el lado bueno.
— Esos hijos de puta —Pienso pero me doy cuenta de que lo he dicho en voz alta al darme cuenta de que todos me miran con una cara de diversión. Me cruzo de brazos sobre la mesa y sonrío con inocencia, Nash ríe un poco para luego pasar su brazo por mis hombros.
En estos momentos estoy bien con Nash, le dejé muy claro que no quiero nada con el por miedo a lastimarlo, en cuanto a Cameron, seguimos igual que la última vez y no pienso perdonarlo tan fácil, jugar con el y hacerlo sufrir será su castigo. He sonado igual de mierda que el, pero siento que sería algo que podría hacerlo sentar cabeza, pero hay un 0.1% de probabilidades de un 100%.
— ¿Qué tal si es de disfraces? —Nos propone Mahogany desde su lugar con una gran sonrisa, todos se miran entre sí y sonríen divertidos.
Yo los miro aterrorizada, la última vez que fui a una fiesta de disfraces fue hace seis años y fui vestida de hot dog influenciada por mi madre, fui la burla de la escuela por una semana entera.
— ¡Me has robado la idea, Maho! —Jacob le reprocha con una sonrisa en su rostro, Mahogany hace un puchero en respuesta mientras que todos miramos la escena con ternura, no se imaginan cuanto tiempo hemos esperado para que estos dos de un paso y se digan que se gustan.
— ¡No digan de que o de quien irán vestidos! —Grito antes de que alguien pueda hablar, todos asienten alzando ambas de sus manos en señal de inocencia al ver toda mi energía y como los apunto con mi dedo índice.— solo para aclarar, si no quieren ser la burla de todos, descarten las comidas para su disfraz.
— Maya y Cam, deberían considerar usar trajes de pareja —Sugiere Maho con una risa tierna al final de la oración, por poco estampo mi mano sobre mi frente al escucharla. Cameron me mira alzando las cejas y de inmediato evito su mirada.
— Sí, mañana —Respondo de mala gana y con sarcasmo.
— ¡Mañana será entonces! —Taylor dice para luego darle un gran sorbo a su botella de agua. Se pone de pie captando la atención de todos y habla de nuevo:— chicos, saben que los amo, pero no tengo un disfraz así que me voy a comprar uno ¿sale? adiós.
Taylor se va y lo siguen Jacob, Nash y Cameron, irán todos a comprar su disfraz y por último quedamos Mahogany, Ashley y yo, las chicas iremos a comprar nuestros trajes juntas. De camino a nuestro destino pienso en que podría elegir, pero mi mente está en blanco, solo se disfrazarme de vampiro cada que es Halloween.
Al llegar al centro comercial empezamos la búsqueda de alguna tienda que tenga lo que estamos buscando, y después de casi una hora en este gigantesco lugar una tienda de disfraces justamente aparece frente a nosotras. No miento al decir que duramos al menos dos horas encerradas ahí, probándonos literalmente toda la tienda, hasta que por fin nos decidimos por los adecuados, bueno, no se si decir que son los adecuados pero son los que más nos gustaron, y también al trabajador de la tienda.
— Hola —Un chico llega a mi lado muy sonriente en cuanto salgo de la tienda, miro a todos lados y veo como Mahogany y Ashley se alejan entre risas, las miro con los ojos entrecerrados y el ríe.
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— ¿Es a mí? —Pregunto apuntándome con mi dedo índice, el asiente con una bella sonrisa haciendo que sienta el calor subir a mis mejillas, vaya me sonrojo demasiado rápido, ¡pero mira ese piercing en su labio!.— y ¿qué pasa?
— Bueno...te vi salir con tus amigas y me pareciste linda —Contesta sin rodeos, vaya, este chico si que es directo, tomo mi cabello y comienzo a jugar con las puntas del mismo nerviosa. Debo de verme ridícula ahora mismo, más de lo usual.— ¿me das tu número de teléfono?
— Oh... bueno —Murmuro mientras que veo como me ofrece su celular, le sonrío y el me entrega su teléfono, me registro como "Maya, chica linda" y el me mira contento al ver mi número y ni nombre en la pantalla.— mándame un mensaje diciendo que eres tú.
— Claro que lo haré —Dice dándome su mano, la tomo gustosa y nos damos un apretón.— tengo dieciocho.
— Un gusto, Maya, dieciséis —Respondo de la misma manera para luego reír nerviosa, este chico es muy guapo y me pone nerviosa, lo admito.
— ¡Cameron, regresa! —La voz de Ashley a lo lejos capta mi atención, volteo y la veo corriendo detrás de Cameron el cual viene hacía mí.
Cameron me mira con un ceño fruncido al ver a Luke, miro un tanto incómoda al rubio y después le sonrío apretadamente. En cuanto Cameron está frente a nosotros, no deja de mirar de manera expectante a Luke. La rubia que perseguía a Cameron se rinde y regresa junto a Mahogany.
— Mm, Maya, tenemos que hablar, estaba comprando el disfraz y hace unos minutos mi madre me llamó, es algo que surgió de último momento y... —Cameron empieza a hablar pero de un momento a otro se detiene.— espera ¿y este quién es?
— Oh, lo siento, es Luke, Luke, él es Cameron, un amigo —Los presento y hago que ambos se estrechen las manos. Cameron parece hacer todo a la fuerza.— Luke y yo estamos saliendo.
Los ojos de Cameron se abren ampliamente y nos ve como si no pudiera creerlo. Y ni siquiera sé porque he dicho semejante estupidez si recién lo acabo de conocer, literal, han pasado solo minutos.
— ¿Desde cuando? —Nos cuestiona mirándonos a ambos, miro a Luke suplicante esperando que me siga la corriente.
— Oh, hace un mes —Luke me salva, siento como un alivio me recorre y me recargo en su brazo tratando de simular que nos tenemos confianza como cualquier chica que sale con su futuro novio.
— Wow, Maya, te gustan las relaciones liberales, eh —Cameron me codea y me sonríe travieso, hago una sonrisa totalmente falsa que después cambio una mueca bastante obvia de fastidio. Luke está confundido, no entiende nada.— como sea, Maya, en serio es urgente que hablemos, a solas.
