Too ugly for you » Cameron Dallas©

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"Estamos juntos en esto."

Cameron PDV

Mi mente no deja de pensar qué va a suceder ahora, solo tengo dieciséis años y soy responsable de que una chica que es probablemente igual de inmadura que yo, tenga a mi primogénito dentro de su cuerpo. ¿Quién lo diría? hace al menos unos seis años, me veía como un empresario exitoso a futuro, justo igual que mi padre, aunque ahora no le esté yendo del todo bien. No estoy diciendo que mi vida pueda arruinarse y mis planes se jodan por la llegada de un bebé a mi vida, pero claramente, dificultará mucho las cosas.

Lo pensé durante tantas noches... pedirle a Maya que aborte. Pero, después de analizarlo muchas veces, llegué a la conclusión de que lo mejor será tener a la criatura, quiero hacerme responsable de mis actos, y espero que Maya también quiera hacerlo. Además, estoy seguro que en cuanto les diga a mis padres sobre lo que está pasando en mi vida ahora mismo, van a apoyarme, y me ayudarán para poder salir adelante... ó me mandarán por un tubo y fingirán que no existo, una de dos.

Seguramente todos pensarán "Es un pequeño que no sabe lo que quiere" y sí, tal vez soy pequeño, no puedo decir que tengo la suficiente edad para poder cargar con algo así, como lo haría un adulto responsable, pero estoy seguro de que es lo que quiero. Quiero mantenerme junto a Maya hasta que ese bebé nazca y si es posible, tener una relación con ella, aunque no sé si eso pueda llegar a cumplirse, pondré aquí las razones:

1. Me fui después de haber tenido relaciones sexuales con ella por primera vez, me confesó ser virgen, después de unas horas regresé a Irlanda y no volví a saber de ella durante un mes, y obvio, ella tampoco de mi por culpa de mis padres.

2. Debe de pensar que soy un aprovechado que no vale ni un centavo, no creo que tenga ni un poquito de ganas de verme.

3. Aún no sé si ella quiere esperar nueve meses para tener a ese bebé, y tampoco sé si quiere que me quedé con ella mientras que eso pasa.

4. Han pasado casi dos semanas desde que nuestros amigos me llamaron para darme la noticia del embarazo, y apenas me he decidido a regresar a LA. Maya no sabe los motivos por los que tardé en dejar Irlanda, pero si los supiera, estoy seguro de que no me querría hablar por ser tan hijo de puta.

Al bajar del auto, justo frente a la casa de Jacob, siento como empiezo a ponerme nervioso, no sé cómo podré ir hacia la maldita puerta y tocar el timbre. Después de pagarle al taxi por haberme traído desde el aeropuerto, el auto se va, ya que aún no me atrevo a acercarme a la puerta, me mantengo en la banqueta, observando como el coche desaparece al doblar en una esquina. Miro por la ventana, y observo movimiento dentro de la casa, puedo ver la rubia cabellera de Ashley asomándose por el vidrio, la chica cree que no me he dado cuenta de como me observa y llama a los demás que están adentro, a los pocos segundos, solo veo a Jacob colocarse frente a la ventana y en cuanto me ve, me saluda sacudiendo su mano.

Ni siquiera lo saludo porque rápidamente ambos chicos se encuentran abriendo la puerta de la casa, camino hacia la misma y en cuanto estoy parado frente a ellos, recibo un golpe de una pequeña mano, pero que al parecer tiene demasiada fuerza, ya que ha logrado que suelte un quejido y empiece a dar un masaje en la zona adolorida.

— ¿No sabes que existen los condones, pequeño...

Jacob interrumpe a Ashley colocando su mano sobre su boca, la echa para atrás sin dificultad y me invita a entrar a su casa. Le sonrío algo incómodo, y en cuanto entro, después de un largo pasillo que recorremos en menos de diez segundos, Maya se hace presente en mi campo de visión, sentada en uno de los sofás de la sala de estar, observándome con seriedad.