LO QUE NO LLEGAMOS A SER

Me sonrió y arruinó mis planes.

Llegué a casa sonrojada, mi padre estaba en casa, mi madre por suerte no. Dejé las cosas en mi habitación y me estiré en la cama, estaba agotada así que me eché una siesta. Llamada entrante de Elia.

- Dime Elia -Murmuré medio dormida.

- ¿Es posible que antes te haya visto bajando del coche de tu novio? -Me chilló contenta.

Le había contado todo lo que pasaba con Ian, pero no lo había visto en persona todavía.

- Sí -Me reí- y no es mi novio -Murmuré.

- Sisi, lo que digas -Se rió.

- Bueno, voy a ducharme, luego hablamos.

- Vale, Besitooos -Chilló con alegría.

Elia siempre estaba contenta, le veía el lado positivo a todo, yo en cambio veía lo negativo de todo, pero gracias a ella me comencé a valorar más y me di cuenta de que yo no era una mala persona. Elia me ayudó mucho y a día de hoy me sigue ayudando en todo.

Me fui a duchar para irme a casa de Ian, estarían Nelly y Elyan. Llegué a su casa, él iba con una camisa negra de manga corta que le quedaba muy bien, unos pantalones cortos tejanos azul medio oscuro que le llegaban hasta las rodillas, iba guapísimo, yo llevaba unos pantalones de lino color blanco amarillento y un top gris sin mangas ajustado. 

- Hola pitufa -Me susurró.

Me dio un escalofrio y se me puso la piel de gallina al escuchar su voz grave cerca de mi oído. Me daba vergüenza llamarle mi vida o algo parecido, no estaba acostumbrada a decir estas cosas.

- ¿Me vas a dejar pasar? -Intenté sonar borde pero con él me era imposible.

Que patetica eres Jessica

- ¿Que me das a cambio? -Preguntó vacilón.

- Traigo mucho amor para darte -Me reí.

- Propuesta interesante... -Murmuró- Es algo que no me negaría.

- Luego dices que nosotros somos unos pesados -Murmuró Nelly -Se te va a caer la baba de tanto mirarla.

- Sería raro que no se me cayera con ella delante -Dijo mientras me dejaba pasar.

Me sonrojé un poco...

Estás como un tomate.

Es que es imposible no sonreirle cuando quieres todo con él, es imposible no querer que se vayan todos y quedarme con él a solas, lo conozco de hace tan poco y parece que lo conocí hace años, yo tenía en mente no enamorarme pero me sonrió y arruinó mis planes. 

- ¿Que me miras tanto pitufa? -Me susurró.

No me había dado cuenta que estaba mirándolo.

-Tienes tres opciones te beso, me besas o nos besamos, ahí decides tú -Me susurró mas cerca del oído.

- Podrías besarme directamente - Le susurré yo.

Miré a Nelly y Elyan para darle un aviso a Ian pero no me hizo ningún caso y me besó. Todavia no me acostumbraba a que me bese, pero ojalá nunca parara.