Cap. 30

6 0 0
                                    

Al día siguiente, el despertar llegó demasiado temprano. Con apenas unas horas de sueño, la alarma sonó a las 6 de la mañana. Olivia se levantó con dificultad, el sueño aún pegado a sus ojos, pero la emoción del día la mantuvo alerta.

Niall, Maura y su familia ya estaban listos. La familia se reunió en la entrada de la casa con el frío de la mañana envolviéndolos. Olivia, a pesar del cansancio, se sentía animada por el apoyo que estaba brindando a Niall. Subieron al auto que los llevaría a Dublín, el trayecto de más de una hora se pasó rápido con la conversación animada y el ambiente lleno de nervios y entusiasmo.

En el auto, Maura y Bobby hablaban sobre los preparativos para la audición, mientras Niall se concentraba en repasar mentalmente su canción. Olivia se sentó junto a él, observando su rostro concentrado. Le tomó la mano, ofreciéndole un gesto de apoyo en medio de la tensión.

—¿Todo listo? —le preguntó, tratando de mantener la conversación ligera.

—Sí, creo que sí —respondió Niall, intentando sonar seguro pero con la tensión palpable en su voz—. Solo espero hacerlo bien.

—Lo harás increíble. Estoy segura de ello —le animó Olivia, apretándole la mano con cariño.

El trayecto a Dublín se desarrolló entre conversaciones animadas y momentos de silencio reflexivo. Cuando llegaron a la ciudad, la primera luz del día iluminaba las calles mientras se dirigían al lugar de la audición.

El edificio donde se llevaría a cabo la audición era grande y moderno, con una entrada impresionante que reflejaba la importancia del evento. Al llegar al lugar de la audición, la atmósfera estaba cargada de nervios y anticipación. Las cámaras comenzaron a captar cada momento, registrando a los participantes que se agrupaban en la entrada del gran edificio. Niall y Olivia se dirigieron a la mesa de registro, donde Niall recibió un número de registro. Olivia observó el proceso con una mezcla de nervios y orgullo.

Ella se acercó a Niall, que parecía estar acumulando una mezcla de emoción y ansiedad. Con una sonrisa reconfortante, se inclinó hacia él para ajustar su camisa de cuadros rojos. Mientras acomodaba el borde de la camisa, le depositó un suave beso en la mejilla. Niall, sorprendido y emocionado por el gesto, le devolvió una sonrisa agradecida.

—Gracias por estar aquí —dijo Niall, sus ojos reflejando la calidez de sus sentimientos.

Olivia le sonrió y respondió con ternura—: No podía perderme este momento. Estoy aquí para ti, pase lo que pase.

Se pusieron en fila, y la magnitud del lugar se hizo evidente. La fila parecía interminable, extendiéndose hasta donde alcanzaba la vista. Los participantes conversaban en voz baja, algunos intentando calmar los nervios, otros compartiendo pequeñas charlas para distraerse. Olivia y Niall se acomodaron en un rincón de la sala de espera, tratando de mantenerse tranquilos mientras observaban el ir y venir de los demás.

La espera sería larga, y el tiempo parecía ralentizarse con cada minuto que pasaba. Olivia tomó la mano de Niall y la apretó suavemente en señal de apoyo.

—Recuerda que lo más importante es disfrutar el momento —le dijo ella—. Estás preparado y lo harás genial.

Niall asintió, respirando profundamente mientras la fila avanzaba lentamente. El bullicio y las cámaras seguían capturando la energía del lugar, creando una atmósfera vibrante y cargada de expectativas. Aunque la espera era ardua, el apoyo mutuo entre Olivia y Niall brindaba un respiro en medio de la tensión, y ambos se aferraban a esa conexión para enfrentar el desafío que tenían por delante.

Una vez que pasaron el control de seguridad, Olivia y Niall se encontraron en una sala de espera amplia y moderna, llena de sillas organizadas en filas. El ambiente estaba cargado de anticipación y nervios, y el murmullo de las conversaciones de los participantes llenaba el aire.

Ojos Color Cielo. [Niall Horan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora