Ojos Color Cielo. [Niall Horan]

Cap. 35

23 de julio de 2010.

El 23 de julio llegó rápidamente, y la mañana estaba cargada de una mezcla de nervios, emoción y ansiedad. Harry, Anne y Olivia se encontraban en el coche, dirigidos al Bootcamp. La carretera se extendía ante ellos, con un cielo azul claro y el sol brillando, proporcionando un telón de fondo perfecto para el día tan esperado.

Olivia estaba sentada en el asiento trasero, observando el paisaje que pasaba por la ventana. Su mente estaba llena de pensamientos sobre lo que les esperaba en el Bootcamp. De vez en cuando, lanzaba miradas hacia adelante, donde Harry y Anne conversaban, tratando de calmar sus propios nervios.

—¿Cómo te sientes, Harry? —preguntó Anne, intentando suavizar la tensión en el ambiente.

—Un poco nervioso, pero emocionado —respondió Harry, apretando las manos en su regazo—. No puedo esperar para ver qué sucede.

Olivia le ofreció una sonrisa alentadora desde el asiento trasero.

—Lo has hecho genial hasta ahora. Sólo sigue siendo tú mismo y todo saldrá bien —le dijo, tratando de transmitir confianza.

—Gracias, Olivia —dijo Harry, volteándose para mirarla—. Me alegra tenerte aquí.

Anne, conduciendo, mantenía la mirada en la carretera, pero sus ojos reflejaban la misma mezcla de orgullo y preocupación. Ella sabía cuánto significaba este día para Harry, y por eso quería estar allí para apoyarlo en cada paso del camino.

Al llegar al lugar del Bootcamp, un gran edificio con una fachada moderna y múltiples vehículos estacionados en el área, la emoción en el aire era palpable. La entrada estaba llena de participantes y sus familias, todos esperando ansiosos el inicio del evento.

—Este es el lugar —dijo Anne, estacionando el coche—. Vamos a entrar.

Harry tomó una respiración profunda y salió del coche, seguido por Olivia y Anne. Se dirigieron al área de admisión, donde un grupo de voluntarios y personal organizaban a los participantes.

—¡Hola! —saludó una de las asistentes con una sonrisa—. ¿Vienen para el Bootcamp?

—Sí, Harry Styles —dijo Anne—. Aquí está su pase de acceso.

La asistente revisó el pase y luego les indicó el área de registro.

—Por favor, sigan por aquí para registrar a Harry y recibir la información del día. Los participantes tendrán que pasar por una serie de controles antes de entrar al área principal.

Mientras se dirigían al área de registro, Harry miraba a su alrededor, observando la cantidad de personas que estaban allí. Era evidente que todos estaban igualmente emocionados y nerviosos.

—Este lugar es enorme —comentó Harry, mirando las instalaciones—. Todo está tan bien organizado.

Olivia asintió, tratando de captar la magnitud del evento. La impresión de las luces brillantes y los equipos de filmación en movimiento contribuían a la atmósfera electrizante.

En el área de registro, completaron los formularios necesarios y recibieron las instrucciones para el día. A Harry se le entregó un número de identificación y una pulsera, mientras Anne y Olivia recibieron pases para acompañarlo durante la jornada.

—Estás listo para esto —le dijo Olivia, colocando una mano en su hombro—. Vamos a disfrutarlo.

Harry se abrazó a su madre y hermana con fuerza, agradecido por su apoyo incondicional. Anne y Olivia le dieron palabras de aliento, y con una última mirada de cariño, lo vieron dirigirse hacia la sala común.